El cierre de su gira “Sirope” en México, en Rosarito, Baja California, se convirtió en la noticia más difundida del pasado fin de semana, al dar la vuelta al mundo no precisamente por la actuación de cantautor, sino por algunos videos en los que se observa al intérprete español defender a una mujer por supuesta agresión. Al final, la persona que se ve en dicha imagen asegura no ser el agresor, y el promotor del concierto afirma que la situación se le salió de control
Falla en la logística es lo que atribuye el promotor de ShowStation, Óscar Victoria, a que la gente no respetara los lugares y llegara hasta la parte frente al escenario sin haber pagado boleto preferente, obstruyendo visibilidad a quienes sí tenían acceso al área VIP.
Con el concierto comenzado y tras interpretar la quinta canción, Alejandro Sanz hizo una pausa para defender a una mujer que el artista observó, estaban lastimando. Bajó del escenario, intentó sacar al agresor y regresó al entablado sin terminar su actuación.
Ahí comenzó la historia de una presentación que dio la vuelta al mundo y no por el excelente trabajo del cantautor, haciendo un recorrido por sus 25 años de trayectoria artística, sino por el incidente que quedó grabado en varios videos que los fanáticos tomaron.
En las imágenes se ve un hombre que molesto, expresa que no lo dejan ver, su nombre es Fernando, quien en entrevista con ZETA asegura no es el agresor, y que su molestia se debía a que no respetaron su lugar.
“Yo solo estaba en ese momento pidiendo que se respetara el lugar por el cual pagué para disfrutar del artista en compañía de mi esposa y de mis amigos, pasar un momento agradable y se convirtió en algo totalmente desagradable”, comentó de entrada.
Dijo que siempre se dirigió al personal de seguridad para que evacuaran a la gente que no debía estar en esa área, sin embargo, no tuvo éxito.
“Les pedí que retiraran a las personas, desafortunadamente no hubo oportunidad, ya pasando ese momento, es cuando se viene la situación y la confusión del artista”.
Explica al Semanario que: “Después de este muy penoso incidente, soy víctima de una situación, yo creo que el artista también es víctima de una situación provocada por la pésima organización, la pésima logística del evento, no había garantías, no había seguridad, no había controles de acceso, controles de lugares donde te tenías que sentar, de zonas en las que tenías que respetar; definitivamente sí es una situación en la cual nos pusieron muy vulnerables a todos los que estábamos ahí”.
Por su parte, el representante de ShowStation afirma que efectivamente hubo problemas de logística, desencadenándose desde la hora en que abrieron puertas (7:45 pm), ya que la estructura que tenía que soportar la producción, retrasó la hora de acceso al inmueble.
“El artista tampoco se podía retrasar más (salió a las 9:15 pm) y en tan poco tiempo meter 6 mil personas, fue muy complicado”, reconoció Óscar Victoria.
Entonces vino el desorden, gente que no encontró su mesa, se colocó donde pudo y sucedió el incidente.
“Sí teníamos el control de VIP, pero las personas de la misma zona se levantaban y se iban para enfrente de las vallas, nosotros con seguridad las íbamos a ir a sentar, pero fue el mismo artista que dijo que no, que porque a él le gustaba ver a las fans brincando y dio la orden que no las sentáramos”.
Lo cierto es que la gente adquirió boleto por un lugar privilegiado, y no tenía por qué pagar los platos rotos: “Yo entiendo su inconformidad, al fin y al cabo estamos tomando medidas para que este tipo de situaciones no se vuelvan a repetir”.
Según Victoria, durante el concierto sí hubo un agresor, pero no es el que aparece en los videos difundidos: “Efectivamente existió agresión hacia una de las fans, sin embargo, la persona que ha sido señalada como el agresor no fue realmente quien intervino en el incidente, cabe hacer mención de que la persona que agredió a la fan del artista fue expulsada por elementos de seguridad del evento”.
No así el señor Fernando, quien permaneció en el show junto con su esposa y amigos, aun cuando la gente en ningún momento se quitó de enfrente.
Un espectáculo de lujo
Luces robóticas, un escenario de primer nivel, nueve músicos, dos coristas y el ansia de dejar en el escenario lo mejor de su repertorio tras 25 años de carrera, Alejandro Sanz regaló un set de temas que son parte importante de su discografía, como “El Silencio de los Cuervos”, “Quisiera Ser”, “La Música No se Toca”, “Amiga Mía”, “Corazón Partío”, entre muchas más, sumando un total de 20 canciones que fueron coreadas y aplaudidas por 6 mil personas que se dieron cita en el Baja California Center en Rosarito, inmueble que una vez más deja asentado que no es apto para realizar conciertos.
