Residentes del Valle de Mexicali y San Luis Río Colorado, agricultores, estudiantes, comunidades indígenas y organismos no gubernamentales, lanzaron un llamado de auxilio al Papa Francisco -quien llega a México hoy viernes 12 de febrero- solicitando su intervención para lograr el respeto al Tratado de Aguas Internacionales que entrega agua dulce al Río Colorado, para que se paguen parte de las ganancias generadas por el uso de agua del rio desde 1950, y sobre todo, que se alimente del líquido a todo el ecosistema que se conforma en torno al cauce del Río Colorado en la parte mexicana.
En un documento público denuncian el “criminal” despojo de agua destinada a 57 mil hectáreas que resultaron afectadas a raíz del sismo de abril de 2010, al modificar el Tratado de Aguas signado en 1944 por medio de la llamada Acta 319.
El escrito está firmado por el Comité Ecológico Sonora-Baja California, nativos del Río Colorado en Sonora y Baja California, comunidades indígenas como Cucapah y Pápagos, agricultores del Frente Campesino de la Zona Cero, así como estudiantes y profesionistas.
“Con fundamento en su encíclica Laudato sie Mi´ Signore -alabado sea el Señor- solicitamos su mediación ecológica ante el Senado de Estados Unidos y México para el respeto integro al Tratado de Aguas Internacionales entre Estados Unidos y México para que se entregue agua dulce de inmediato al cauce del Río Colorado”, apuntan en el documento.
Demandan que el agua llegue hasta la Zona Núcleo de la Reserva de la Biosfera del Alto Golfo del Mar de Cortés y Delta del Río Colorado, zona registrada por la Organización de las Naciones Unidas como “El Acuario del Mundo”.
Denuncian que, con el pretexto del sismo de abril de 2010, “criminalmente” se ha modificado el Tratado del Río Colorado firmado en 1944, creando el Acta 319, documento con el que han despojado a cerca de 57 mil hectáreas de agua por año.
También refieren que con fundamento en el Artículo 19 del Tratado Internacional del Río Colorado, ambas naciones acordaron la producción binacional de energía eléctrica en presas internacionales y con aguas internacionales -de México y Estados Unidos-, por lo que reclaman el pago de los multimillonarios frutos obtenidos del año 1950 a la fecha.
Consideran que ese adeudo se debe entregar a las familias campesinas conforme al registro del padrón de usuarios del Distrito de Riego 014.
Además, en el documento dirigido al Sumo Pontífice, exigen la entrega de agua dulce al Río Colorado para evitar el ecocidio internacional por la falta de agua dulce y oxígeno en la reproducción de las especies en peligro de extinción en la Zona Núcleo del Golfo de California.
“Solicitamos su valiosísima mediación para llevar a los hechos la filosofía de la encíclica ecológica Laudato sie Mi´ Signore en proyectos binacionales entre México y Estados Unidos”, refrendan en la carta.
