Cuando el entonces regidor por Ensenada, Armando Reyes, corrió a Ramiro Orea, del Partido del Trabajo, éste vino a verme, para pedirme prestada una oficina, usar el salón de reuniones y que se sumaba a mi proyecto de construir un Partido Estatal. No lo rechacé, porque venía acompañado de una centena de adultos mayores. A los cuales brinda un desayuno cada viernes (pide cooperación para los artículos del desayuno, que en ollas grandes, preparan personas acomedidas o comisionadas. Pero allí, también comen gratis, Ramiro y su parentela). Igual que sus empleadas madre e hija, que reciben abonos (mil pesos mensuales) de cada uno de los más de 2 mil 500 lotes irregulares, que Ramiro ha vendido y sigue vendiendo a personas de escasos recursos. Pero a todos ellos les sale gratis el desayuno. También consigue otros apoyos como despensas, cobijas, etcétera, y hay un dicho que dice: “El que parte y reparte, se queda con la mayor parte”. Igual sablea a quien se deja, además a regidores, diputados, funcionarios del gobierno municipal, estatal y federal, gente de dinero y también a gente de pocos recursos. Pero a cambio de invitarles el desayuno semanal y apapachar a los adultos mayores, los utiliza para diversas acciones. Citándolos para marchas, plantones y manifestaciones de todo tipo. Y allí no hay alimento, a veces ni agua y las más de las veces, ellos se trasladan por sus propios medios. Aquí una muestra de ellas, a las cuales, he bautizado como “ramiradas”: El Presidente Municipal de Ensenada Profesor Gilberto Hirata Chico, para su Primer Informe de Gobierno del año 2014, le pidió a Ramiro Orea Hernández le llevara gente, para que se viera más lleno el recinto oficial, durante el Informe. Así mismo, el Señor Raúl Carrillo, dirigente del transporte de Ensenada, quiso hacerle un reclamo al Alcalde, porque no había recibido respuesta favorable, en su petición de que les autorizaran un aumento de 2 pesos al precio del transporte. Entonces vio a Ramiro Orea y le pidió gente, para que junto con los choferes de micros y camiones urbanos, se vieran más personas inconformes. Entonces, Ramiro mandó a la mitad de “viejitos”, como él los llama, adentro de Palacio Municipal, para que le aplaudieran a Hirata Chico, y, la otra mitad, afuera del palacio, para que hicieran bola, y se vieran más personas inconformes. Allí estuvieron junto a los choferes de microbuses y camiones urbanos, que gritoneaban al Presidente Municipal de Ensenada, durante su Primer Informe de Gobierno, con el lenguaje folklórico, propio de los choferes de microbuses, enojados y azuzados. Ramiro me lo platicó, porque un servidor recopilaba fotos de grupos de personas, para un álbum político, y me dijo que fuera a tomarles foto al grupo que se manifestaba junto con los choferes. Pidiéndome que me dirigiera a la Señora Graciela Velazco Jaramillo, quien estuvo a cargo esa tarde-noche, del medio grupo de “viejitos”. Graciela es Consuegra de Ramiro Orea, quien era acompañada en esa ocasión, por su hija Brenda Velazco Jaramillo, Ambas estuvieron a cargo de los “viejitos” junto con los choferes, pidiendo el aumento de precio para los microbuses y camiones urbanos. Ésta es una de las muchas “ramiradas”, acciones canallas ladronas y traicioneras, de Ramiro Orea Hernández, un pseudo “líder social” y vividor profesional, que se jacta de traer el número de celular del Presidente Municipal de Ensenada, quien a su decir, le contesta, cada vez que lo llama. Hago responsables de atentados contra mi vida, mi familia o mis bienes, a Ramiro Orea Hernández y pandilla. También entregué una carta a la Procuradora General de Justicia del Estado de B.C. Profr. Gabriel Fernando Santillán Roque Correo: gafersanroque@hotmail.com Ensenada, B.C.
Publicidad
