Jesús Eduardo Marcelo Pizarro y Carmen Cristina Urías Camarena fueron detenidos en Colima por el asesinato de dos hijos de ella, de cuatro y un año edad, cometido hace siete años en Tijuana. A pesar de que la madre fue testigo de cómo su pareja golpeaba a sus hijos hasta causarles la muerte, continuó viviendo con él. “Yo quise empezar una nueva vida”, dijo Carmen Cristina sobre su razón para dejar la ciudad después de que sus hijos fallecieron. La pareja consumía la droga sintética cristal. Presentado ante medios de comunicación, Jesús Eduardo Marcelo Pizarro dijo haber estado bajo la influencia de las drogas al cometer el asesinato. “No recuerdo, solamente cuando desperté ya lo había hecho… había asesinado a los niños”, declaró. Durante estos años, la pareja se escondió en el sur del país y este 8 de octubre de 2015 fueron trasladados a Tijuana por la Policía Ministerial de Baja California, tras su localización en Colima. 
Por los dos homicidios, Jesús Eduardo Marcelo Pizarro, de 29 años de edad, fue agregado a los cartelones de los delincuentes más buscados en 2009, junto a narcotraficantes como Raydel López Uriarte “El Muletas”. El crimen cometido contra los dos pequeños, consideró el actual subprocurador de Justicia en Tijuana, Jorge Álvarez “ameritaba una búsqueda” igual a la de sicarios, narcotraficantes y secuestradores. La mujer, actualmente de 28 años de edad, se encontraba embarazada al momento en que su pareja asesinó a sus dos hijos. La mujer refirió que el 21 de noviembre de 2008, ella salió a la tienda y cuando regresó a su casa, no encontró a los dos pequeños, solo a uno de sus hijos. Información proporcionada por la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) indica que el menor de cuatro años fue trasladado a un hospital privado en la colonia Rubí de Tijuana por un hombre, quien refirió haberlo encontrado atropellado. Sin embargo, el hombre cambió su versión al asegurar que el niño había sido golpeado por sus vecinos, pero cuando personal médico intentó fotografiarlo para dar aviso a las autoridades, huyó del lugar. Christian Aarón Urias Camarena, de cuatro años de edad, presentaba múltiples mordeduras y moretes en el torso, piernas y golpes en el rostro. Por esas lesiones, perdió la vida. Ese mismo día, en el Hospital General fue ingresado un bebé de 18 meses de edad. El menor fue internado por politraumatismo severo y falleció casi un mes después, el 13 de diciembre de 2008. La madre de los menores, Carmen Cristian Urías Camarena informó a los agentes ministeriales que ella era testigo de cómo su pareja golpeaba a sus hijos. “No fue una sola vez que lesionaba a los menores, fueron varios eventos que culminaron con el homicidio de los niños”, refirió el subprocurador. La mujer también dijo tener tres hijos, dos de los cuales son de anteriores parejas. Sobre la ubicación del menor, quien nació después del fallecimiento de sus hermanos, el subprocurador indicó que la dependencia trabaja en su localización. Mientras Jesús Eduardo Marcelo Pizarro fue consignado por homicidio calificado con ventaja, homicidio calificado y lesiones a menores encapaces, Carmen Cristina Urías Camarena fue aprehendida por omisión de cuidado. Ambos fueron internados en la Penitenciaría de Tijuana, donde esperarán la resolución de su situación legal.
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