El viernes 26 de septiembre, el Museo de Arte de San Diego inaugurará una muestra que requirió cuatro años de trabajo y de coordinación inter-institucional para su desarrollo. El resultado es una colección de 220 obras procedentes de 60 museos de todo el mundo que llevará por título “El arte de la música”, proyecto con el cual concluyen las celebraciones del centenario del Parque Balboa. “El tema es la música, y es una exposición que tiene distintas intenciones: la primera es acercarse a la comunidad en general, ampliar audiencia y ser mucho más accesibles”, explica a ZETA Roxana Velásquez, directora ejecutiva del SDMART desde 2010 a la fecha. El acervo, que estará abierto al público hasta el 7 de febrero de 2016, reúne obra de todos los períodos históricos -desde vasos griegos y piezas prehispánicas hasta trabajos contemporáneos del autor californiano John Baldessari- bajo una línea común: compartir cómo los artistas visuales contemplan la música, es decir, “cómo podemos referirnos a este elemento que nos ha acompañado a muchísimas civilizaciones a lo largo de las generaciones”, explica Velásquez, quien a su vez fue directora del Museo Nacional de San Carlos, el Museo Nacional de Arte (MUNAL) y del Museo del Palacio de Bellas Artes en la Ciudad de México. 
Cuadros de Picasso, Tamayo y Botero compartirán espacio con instrumentos musicales pintados, como clavicordios y arpas que fueron aportadas por el Metropolitan Museum of Art de Nueva York, como resultado de una colaboración con más de diez musicólogos y curadores, además de la ardua labor efectuada por el equipo de especialistas del museo en arte europeo, arte de los siglos XX y XXI, de la India y de Japón, entre otros. Además del carácter interactivo de la exhibición como otro factor que seguramente atraerá a los visitantes, Yale University Press editó el catálogo de “El Arte de la Música”, que ofrece un recorrido detallado por la muestra a través de más de 360 páginas. Una serie de conciertos no solo de obra clásica, sino también de blues y de jazz tanto dentro como fuera del museo previo a la apertura de esta colectiva, ha sido otra estrategia acertada para acercar a distintos públicos a una institución que también ha diversificado su oferta con programas para menores en cárceles juveniles, el Teen-Art Café solo para adolescentes, Culture&Cocktails que se realiza cuatro veces al año para jóvenes profesionales, uno de los programas más exitosos con la capacidad de convocar hasta a dos mil personas para convivir y acercarse a las colecciones del museo. Al igual, la directora enfatiza el uso de las nuevas tecnologías como una herramienta más para dotar a los usuarios de información, recurso que complementa las visitas guiadas tradicionales que tanto en inglés como en español se ofrecen todos los días. “Es muy importante que el Museo de Arte de San Diego tenga una iniciativa bilingüe, y siempre verás las cédulas tanto de exposiciones temporales como permanentes en inglés y en español, y siempre podrán encontrar un guía que les dará la explicación en español”, asegura Roxana Velásquez. —El Museo de Arte de San Diego tiene una trayectoria muy reconocida en la comunidad, en lo que ha sido tu gestión, ¿cuáles son los enfoques principales donde has canalizado tu trabajo para sostener el prestigio del museo y hacerlo crecer? “Pues sí, son varios aspectos, déjame mencionarte los principales. Ha sido fundamental para mí acercar mucho más audiencia a este museo, la reputación, como tú dices, y la tradición histórica de este museo nos está llevando casi a cumplir 100 años en este lugar, es el museo más antiguo, es el museo más grande, es el museo más reconocido de arte, pero a mí me interesaba expandir nuestra presencia hacia grupos que normalmente no atendían. Te pongo un ejemplo del resultado numérico, el año pasado tuvimos 360 mil visitantes al museo, y nuestro número promedio estribaba entre 220 y 240 mil visitantes. Es un incremento importantísimo, no se compara con ningún número de los últimos seis años. 
“Además de los números, y de traer más público, nos hemos enfocado en dar servicio a las comunidades lejanas, es decir, hacer una verdadera labor de expandir nuestras fronteras. Te puedo mencionar el ejercicio que hicimos en cuatro barrios, Barrio Logan, Logan Heights, el Jacob Center donde hay una gran presencia hispana y de latinos, y hemos hecho trabajos de colaboración con esos mismos barrios que han resultado en murales, por ejemplo, decorar murales debajo de ciertos puentes, o crear una estación de radio que se dio en Logan Heights. Me he enfocado mucho en no solamente incrementar los números de asistentes, insisto, sino realmente allegarnos a los grupos que no tienen tanta presencia. “Lo mismo sucede con el Board. El Board es el órgano de gobierno de este museo, el Board of Trustees es el órgano de gobierno, nos hemos dedicado de invitar la presencia de más miembros hispanos, miembros de Tijuana, de la región, me interesa mucho ampliar nuestra colaboración con la región, considero que es una de las grandes ventajas que tiene este museo y peculiaridades, desde un punto de vista positivo, tenemos que tener más colaboración regional. Entonces, te menciono que a lo largo de mi gestión aquí, que estoy cumpliendo cinco años, he logrado, invitado miembros al órgano de gobierno de Baja California, de Tijuana y de México, entonces es también un gran cambio. “Por otro lado, la colección permanente siempre ha sido de mi conocimiento, mi interés. Sabemos que la colección de un museo es el corazón del museo, entonces, hemos logrado hacer adquisiciones muy importantes en los últimos años y precisamente este año pasado logramos adquirir a través de donaciones obras importantísimas de origen hispano, Joaquín Sorolla y Bastida es un óleo espectacular que llegó a la colección en el mes de febrero de 2015, también Francisco de Zurbarán, el gran artista español, logramos adquirir un San Francisco de Asís en oración en una gruta, y también Juan de Valdés Leal, otro óleo que llega a la colección del Museo de Arte de San Diego con grandes honores, o Pedro de Mena, un escultor del Siglo XVII y es la representación de San Diego de Alcalá, el santo que da nombre a nuestra ciudad. Estos son solamente algunos de los objetos que he logrado adherir a la colección permanente y que son muy reveladores del interés que tenemos de seguir con la excelencia de esta colección importantísima española, son solo un aspecto de la colección; hay que recordar que el museo tiene 20 mil piezas de todo el mundo, piezas de China, de Corea, de Japón, de la India en especial, y nos hemos enfocado en estos últimos tiempos en traer obras del arte español. 
“Por otro lado, la presencia internacional del museo, mencioné al principio la presencia regional, la colaboración con ciertas áreas de la ciudad que no tenían bastante comunicación con el museo, pero vamos a hablar también del posicionamiento del museo a nivel internacional. Hemos logrado hacer tres exposiciones en Madrid, en la Ciudad de México, en el Museo de Antropología, y en Canadá, en el Musée national des beaux-arts du Québec, hemos hecho tres proyectos importantísimos con 110 piezas del museo de San Diego y en China hicimos una exposición de arte americano también en el 2011. Entonces, lo que te quiero comentar es posicionar el museo, tener una presencia a nivel internacional es tan importante como lo ha sido a nivel nacional y aquí regionalmente, entonces, trabajando en esas tres capas de presencia”. —También en años recientes ha crecido la cantidad y diversidad de actividades que hay en torno a una exposición, el programa educativo, conferencias, talleres, eventos familiares. ¿Qué tan importante ha sido este complemento para posicionar al museo entre el público en general? “Es fundamental, como te decía yo, es la primera intención de nosotros al llegar aquí hace cinco años fue exactamente acceder a distintos públicos y abolir las fronteras que tienen los museos de arte, y la forma más inmediata de hacerlo y más coherente, es diseñar programas específicos para distintos nichos de la población. Entonces, esa variedad de programas que han surgido aquí, sí han sido planeados con intención específica”. — ¿Y el enlace con la comunidad de Tijuana? Tenemos un cruce muy numeroso, pero más bien para fines comerciales. “Nos interesa muchísimo, por supuesto que tenemos que seguir creando mecanismos para esto, yo estoy más que interesada en tener la presencia de todas las personas de Tijuana, de la región, de Baja California, y decirles que vale la pena acercarse a ver este museo, estamos listos para recibirlos, estamos a muy pocos minutos de distancia y me gustaría mucho tener más presencia, por supuesto, del todo el público del otro lado de la frontera. “Estamos empezando a diseñar proyectos con universidades, estoy en conversaciones con algunos miembros de mi órgano de gobierno que acaban de ingresar al patronato y que nos pueden ayudar haciendo esos puentes de comunicación, pero estoy abierta a cualquier universidad, escuela, proyecto y sugerencia para iniciar proyectos concretos”.
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