Cierto que no todos los días se cumplen 66 largos y acomodados años, pero el caso de Loreto Quintero Quintero, la oficial mayor del Gobierno del Estado, prácticamente paralizó durante dos días consecutivos actividades de Poder Ejecutivo. El pasado viernes 4 de septiembre, en horario laboral se dejó consentir -a propósito de sus primaveras- en un restaurante de Tijuana. Al lugar aterrizaron al menos 20 altos funcionarios del Estado que cancelaron citas o eventos agendados para ir a cantar las del Rey David. Entre ellos, el secretario de Desarrollo Social, Ricardo Magaña; el director del Seguro Popular, Carlos Torres Torres; el delegado del Sistema Educativo, Leopoldo Guerrero, entre muchos funcionarios más. Un día antes, sucedió algo similar a partir de las tres de la tarde en Mexicali, en un restaurante con botellas de caguamas y guisados chinos. Ahí, por mencionar a algunos, la procuradora general de Justicia, Perla del Socorro Ibarra; la secretaria del Trabajo, Juanita Pérez Floriano, o el secretario particular del gobernador, Rafael Morgan, dejaron sus actividades para festejar a la que maneja los presupuestos en el Estado.