Cuando se crearon los “pases médicos” en Tijuana, se pensaron para generar cruces hacia Estados Unidos sin la necesidad de hacer fila, generalmente para extranjeros que acudían a México a atenderse constantemente. Antes los regulaba el Consejo de Desarrollo Económico de Tijuana (CDT) y ahora los autoriza la Secretaría de Desarrollo Económico municipal que más o menos dirige Xavier Peniche, y los reparten en la Sindicatura Municipal que titula Arturo Ledesma Romo. Y, bueno, eso ha permitido que el pase de acceso por el Carril de Cruce Rápido sea otorgado por favores, afectos o simples atenciones a políticos de medio pelo, que los utilizan más que los enfermos que se atienden en Tijuana o los turistas médicos o gastronómicos, dando preferencia a políticos, empresarios y funcionarios. Empleados de Sindicatura han visto cómo se reparten los pases a las novias y amigas de los directores, compadres o simples amigos. Incluso, han alcanzado para personal de CONAGUA que titula Eduardo Ledesma, hermano del síndico. Y hasta para el Consejo Estatal de Atención al Migrante del gobierno de Francisco Vega, pero encabezado por Carlos Mora Álvarez. Ángel de la Torre, panista y ex director de Servicios Médicos es otro de los beneficiados, o bien, otro para el regidor del PAN, Luis García López. Total, qué culpa tienen ellos de que no exista un carril de cruce preferencial para funcionarios y políticos.