El candidato electo Wenceslao Martínez Santos quiere llegar al Congreso de la Unión de puntitas y sin hacer mucho ruido, pues cree que así, el manto sagrado del fuero legislativo podrá sacudirle unas bronquillas legales que lo persiguen. Wenceslao es de Ensenada, la jugó de líder empresario y cambió la Cámara empresarial por la Cámara de Diputados, en brazos del Partido Acción Nacional. Un abogado del puerto reclama, con sentencia en mano, el cobro de más de 130 mil dólares al candidato electo por haber litigado a su favor la propiedad del rancho El Relieve, en el que, por cierto, prepara un evento en las fiestas de la Vendimia. O llega primero a la Cámara de Diputados, o paga lo que la sentencia emitida el 21 de marzo de 2014 establece, porque –refieren los afectados- “si pasa lo primero, nos olvidamos de lo segundo”.