Ramón García González de 22 años, falleció víctima de un infarto agudo al miocardio en el poblado Ramona dentro del Parque Nacional Constitución de 1857, donde no se le atendió con equipo médico y no había ambulancia para su traslado. El primer día del año, el joven emprendió un paseo turístico hacía la Laguna Hanson con familiares y amigos desde la ciudad de Ensenada, para contemplar la nieve que cayó en la zona por el temporal invernal. Su cuerpo sin vida tuvo que regresar en un carro particular, pues los vehículos del Servicio Médico Forense (Semefo) no pudieron ingresar a la zona. Él y sus acompañantes (alrededor de 19), llegaron al parque nacional alrededor de las 2:30 de la tarde, después de haber transitado –en tres vehículos– 40 minutos de terracería desde el kilómetro 43 de la carretera libre Ensenada-San Felipe. Cuando jugaban en la nieve, a unos dos kilómetros del poblado Ramona, el joven se desvaneció intempestivamente y no respondió a los primeros auxilios que sus acompañantes le brindaron. Posteriormente lo subieron a un vehículo pick up y regresaron al poblado, donde hay servicios sanitarios, de cabañas, de alimentos, pero no equipo médico. Un doctor que ahí se encontraba lo valoró, pero no pudo hacer más que determinar el fallecimiento. A pesar de que anteriormente se reportó el hecho a los números de emergencia, se informó que solo llegaría una unidad de la policía municipal. Fueron los oficiales, cuando llegaron, quienes solicitaron permiso para sacar el cuerpo de la zona y anticiparse a la baja temperatura que empezaba a sentirse. Ya en el poblado de Ojos Negros, la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) y el Semefo se hicieron cargo, el resultado de la necropsia arrojó un infarto. Cuando se ingresa al parque para visitar la Laguna Hanson se hace bajo riesgo propio, pues las autoridades no implementan operativos de vigilancia o seguridad médica. Los cientos de visitantes, sobre todo en días nevados como el primero de enero, solo tendrían posibilidad de ser atendidos (en situación de emergencia) si regresan a Ojos Negros, a unos 40 minutos de distancia. Sin embargo, de acuerdo al delegado de la Secretaria del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Alfonso Blancafort Camarena, “tiene que haber un apoyo” de las autoridades, en este caso de la Comisión Nacional de Áreas Protegidas (Conap). La comisión –que está dentro de la estructura de Semarnat–, tiene la responsabilidad de administrar los parques nacionales, como el que alberga la Laguna Hanson, donde debería existir equipo médico. Blancafort Camarena, aseguró que en los próximos días hará una visita a la zona para supervisar el funcionamiento del equipo, que aunque, dijo, en el caso de Ramón no hubieran sido de mayor ayuda, sí podrían salvar otras vidas posteriormente. Por su parte, Antonio Rosquillas, director estatal de Protección Civil, afirma que actualmente la única posibilidad de que existan estos servicios en el lugar, es a partir de un convenio entre la Comisión Nacional de Áreas Protegidas (Conap) y la Secretaría de Salud, mismo del que no hay registro. Actualmente, dijo, está en el Congreso del Estado una propuesta para reformar la Ley Estatal de Protección Civil, que daría facultad a la dependencia que dirige, de hacerse cargo de los servicios de emergencia. Siempre y cuando exista el equipo necesario, acotó. Ambas dependencias y la dirección municipal de Protección Civil afirmaron a este Semanario que anualmente se realizan reuniones intersecretariales para activar protocolos de emergencia y seguridad en zonas como el Parque Nacional Constitución de 1857, pero Alfonso Blancafort dijo que este año no hubo registro de ello.
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