Alrededor de las seis de la mañana del 19 de diciembre de 2014, la Policía Federal realizó un cateo en un domicilio de Culiacán, Sinaloa. Ahí aseguraron un rifle AR-15, una subametralladora, dos granadas de fragmentación, 30 equipos de telefonía móvil, dinero, tres vehículos y detuvieron a José Luis Mendoza Uriarte “El Güero Chompas”, “… integrante de un grupo delictivo presuntamente responsable de la producción y distribución de droga (…) quien cuenta con antecedentes penales y contra quien pesa una orden de aprehensión por el delito de homicidio, girada por el Poder Judicial de Baja California, presumiblemente mantenía su zona de operación en el municipio de Tijuana, desde donde enviaba droga hacia Estados Unidos”, detalla un boletín emitido por la Comisión Nacional de Seguridad. La Policía Federal hizo efectivas tres órdenes de aprehensión que el sistema judicial otorgó contra Mendoza, una por homicidios, otra por robo de auto en Baja California, y una tercera por delincuencia organizada, tramitada por el Ministerio Público del Fuero Federal. Sin realizar disparo alguno y como resultado de un trabajo de inteligencia y coordinación que inició a mediados del presente año en la Secretaría de Seguridad Pública de Baja California, las decenas de equipos de telefonía móvil no fueron suficientes para que el delincuente se pudiera ocultar. En el transcurso de seis meses, las comunicaciones entre el criminal, sus familiares y socios criminales, fueron interceptadas y permitieron conocer diversas de sus ubicaciones. De hecho, cuando en septiembre se detuvo a Alfonso Lira Sotelo “El Atlante” en Zapopan, Jalisco, las autoridades sabían que Luis Mendoza tenía y habitaba una casa en la misma colonia, que podría huir, pero decidieron que los capturarían, uno a la vez. Como esperaban, en ese mes “El Güero Chompas” se movió y regresó a Culiacán-tenía otra casa en Sinaloa, en los límites con Durango, donde se refugiaba seguido-, sin embargo, su constante cambio de residencia no era novedad, era común que por vía terrestre se acercara a Baja California -según las autoridades, sin entrar al estado- para vigilar que sus cómplices cumplieran sus órdenes. Igual que en diciembre de 2011, cuando había sido aprehendido en Tijuana, este 19 de diciembre, Mendoza estaba en compañía de Kelvin Humberto Quiñónez Armenta, también identificado por las corporaciones bajacalifornianas como Marco Anubis Quiñónez Armenta. Con este nombre, el compañero de Mendoza tienen en su contra una orden de aprehensión activa por el delito de homicidio calificado, de fecha 24 de julio de 2006, girada por el Juzgado Quinto Penal en Tijuana, la cual derivó de la AP3546/06/206, donde “El Güero Chompas” también está como sospechoso, lo que evidencia la duración de su relación criminal. En las corporaciones de Baja California, José Luis Mendoza tiene antecedentes por portación de arma de fuego de uso exclusivo del Ejército, Armada y Fuerza Aérea, asociación delictuosa, homicidio -por el que tiene orden de reaprehensión- y robo equiparado, por el que tiene orden de aprehensión activa. Por robo equiparado en el Juzgado Sexto de lo Penal de la ciudad de Tijuana -fecha 25 de octubre de 2013-, y por el delito de homicidio (2006) en el Juzgado Quinto Penal de la ciudad de Tijuana, compartida con Anubis Quiñónez. Detención y liberación Los cargos más recientes por homicidio contra José Luis Mendoza Uriarte “El Güero Chompas”, datan del 1 de julio de 2010, cuando un hombre acompañado de dos mujeres fue interceptado por otro sujeto mientras se dirigía a un mercado Six de la calle y colonia Arboleda. Ahí, frente a las testigos, lo mató a balazos y huyó. Como resultado de ese crimen, el mismo día fue detenido Luis Ángel Gallardo Ortega “El Kamuz”, “El Shopper” o “El Ander”, quien señaló a Mendoza como el autor intelectual del asesinato; también lo implicó en otros homicidios. A las 8:17 pm del 15 de enero de 2011, en medio de una jornada de varios operativos violentos, fue acribillado a balazos Rodrigo Becerra Cuevas, cuyo cuerpo quedó en la calle Guapango de la privada Guapango, frente al número 9676 de la colonia Villas de Baja California, en la subdelegación Los Pinos. En ambos casos, el Ministerio Público del Fuero Común abrió expedientes, pidió y recibió órdenes de aprehensión que se concretaron el 2 de diciembre de 2011, cuando, acompañado de dos hombres, “El Güero Chompas” circulaba a exceso de velocidad y fue interceptado por elementos de la Policía Estatal Preventiva (PEP) en el Bulevar Sánchez Taboada y Avenida Antonio Caso de la Zona Río, cuando se trasladaba en un Nissan Máxima con reporte de robo, razón por la que fueron detenidos. Mendoza Uriarte intentó evadir a la autoridad dando el nombre falso de Mariano Rodríguez Peña, pero cuando se dio cuenta que lo habían identificado y no lo iban a liberar, amenazó a los uniformados advirtiéndoles: “Van a valer madres”. Tanto “El Güero Chompas” como Guadalupe Javier Rodríguez Cruz y Kelvin Humberto Quiñones Armenta, quienes fueron capturados con él, lograron ser liberados un año después, en diciembre de 2012. El Juez Primero de lo Penal, lo liberó por los dos cargos de homicidio, al considerar que no existían elementos suficientes y le acreditaron otros cargos por robo. La pena se consideró cubierta con el tiempo que estuvo preso. En enero de 2013, Abel Galván Gallardo, entonces subprocurador de Delincuencia Organizada del Estado, declaró estar en desacuerdo con la decisión judicial y que solicitaría la reaprehensión. El tema no se volvió a tocar públicamente. Otros homicidios pendientes “El Güero Chompas” y su hermano/primo Javier Mendoza Uriarte “El Chapito”, heredaron la célula criminal de su primo, Raydel López Uriarte “El Muletas”, brazo derecho delictivo de Eduardo García Simental “El Teo”, sicario escindido del Cártel Arellano Félix que generó una pugna interna entre 2006-2010 que terminó por debilitar la presencia del CAF en Baja California y de abrirle las puertas al Cártel de Sinaloa. Aunque delinquieron con su primo, son cabezas de célula y prácticamente, concesionarios criminales en la Zona Oriente de Tijuana desde febrero de 2010, cuando “El Muletas” fue capturado, y, aunque han sido mencionados en muchos crímenes en los últimos cuatro años, actualmente la Procuraduría General de Justicia del Estado solo tiene a José Luis Mendoza implicado como presunto responsable en cinco expedientes, aún en integración. La mayoría, perdidos en una racha de homicidios violentos ocurrido entre junio y septiembre de 2011: * El 12 de junio abrieron la AP 185/11/201 por el asesinato de Juan Manuela Sandoval Córdova, atacado a balazos en la calle Privada de los Olivos en Cañadas de El Florido. Según el expediente, fue asesinado por venganza. * Del 9 de agosto de ese año, tiene abierta la averiguación previa por el homicidio de Juan Manuel Rangel Calderón, ocurrido en la calle Rambutan en El Florido, por motivos de narcomenudeo. Fue ultimado con arma de fuego frente a su familia, desde una camioneta Chevrolet Suburban. Expediente AP251/11/201. * El 15 de agosto, en la AP255/11/201, se consigna el homicidio de Víctor Manuel López Núñez en el interior de Abarrotes América, con dirección en Prolongación Presa, Fraccionamiento El Florido Tercera Sección. Según los primeros indicios, lo asesinaron por venganza. El hombre se dedicaba a la venta de droga al menudeo. * El 6 de septiembre de 2011, junto a su auto y con tiros por la espalda, fue asesinado Tomás Delgado Arellano, en la calle Hermenegildo Galeana del Mariano Matamoros. El móvil identificado fue narcomenudeo, ya que entre sus ropas se encontraron algunas dosis de cristal. La PGJE abrió la AP/282/11/201. * La más reciente data del 25 de agosto de 2014, y se refiere al asesinato de José Heriberto Robles Serna, ocurrido en Avenida García, Fraccionamiento Los Reyes, en el interior de la carnicería La Mejor. Según los primero indicios, Robles había sido víctima de un robo que salió mal, pero tras la indagatoria, los investigadores pudieron conocer que el hombre estaba relacionado con temas de narcomenudeo. Abrieron el expediente AP 264/14/201. Estas investigaciones serán remitidas a la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO) para integrase al expediente con el que la PGR busca consignar a José Luis Mendoza Uriarte. La célula delictiva Teniendo como actividades ilícitas el trasiego de droga a Estados Unidos, así como el narcomenudeo y la administración delictiva en la Zona Este de Tijuana, varios de sus presuntos empleados criminales han sido detenidos y lo han señalado como su jefe criminal. Luis Alberto García Meza “El Wicho”, capturado con armas el 20 de octubre de 2014 (previamente, el 15 de noviembre 2009 con armas y por homicidio) dijo ser empleado de Mendoza, encargado de la zona del Mariano Matamoros y El Florido, que “El Güero Chompas” era quien ordenaba los homicidios y levantones, que su jefe era muy violento y mataba a su propia gente solo por sospechas. Detenido en julio de 2014, Santiago Rincón Martínez “El Toxic” se dijo empleado delictivo de los Mendoza Uriarte y confesó haber participado en tres operativos homicidas que resultaron en cuatro muertos: una mujer localizada en el interior de un auto en la carretera Tijuana-Tecate, el 23 de febrero de 2014; el asesinato de Adrián Orta Vélez “El Sumer”, el 30 de abril; y los dos cuerpos sin vida localizados el 16 de abril en la camioneta que dejaron en el estacionamiento de la delegación la Presa, todos relacionados con narcomenudeo. Además redactó dos narcomensajes, incluido uno amenazando al subjefe de la Policía en la delegación La Presa. José Refugio Becerra Cueva “Don Cuco” fue arrestado el 8 de octubre de 2014 por la Policía Municipal, con una orden de aprehensión por el delito de secuestro agravado cometido contra una mujer propietaria de una tienda de abarrotes que fue golpeada y violada durante la privación de su libertad. Identificado como el cabecilla narcomenudista de la droga conocida como cristal en la zona de Sánchez Taboada, Virreyes, Villas de Baja California y Lomas de la Presa, su nombre apareció en varias indagatorias de homicidios en la zona. El 1 de octubre, esta célula dejó sobre un hombre asesinado una cartulina en la que “El Güero Chompas” presumía la protección que recibía de la corporación municipal. El hijo de “Don Cuco”, Óscar Ricardo Becerra Rizo, detenido a finales de octubre, confesó dedicarse a la venta de droga al menudeo y estar al servicio de “El Güero Chompas”, y haber asesinado a Héctor René Arenas Moran “El Gordo Reyes”, la madrugada del 18 de agosto de 2014 en una casa de la colonia Villas de Baja California, por órdenes de Mendoza. A este grupo también lo ligan con el asesinato de René Araujo López “El Guasave” o “El Pichón”, cometido el 9 de diciembre, en el Bulevar Simón Bolívar, mientras circulaba “a bordo de un vehículo Lincoln Navigator de color gris -sin reporte de robo-, apreciándose tanto en la unidad como en el sujeto, diversos impactos producidos por arma de fuego, localizándose en el lugar seis casquillos percutidos y un útil calibre 7.62 por 39; además de dos casquillos percutidos calibre 45, y cinco proyectiles deformados. Para las autoridades, el principal sospechoso de este homicidio es Susano Lobato, uno de los matones de Hugo Carlos Escobar Godoy, “El Moreno” y/o “El Negro”, buscado como líder de una banda delictiva dedicada al homicidio, secuestro y robo violento al servicio de los Mendoza Uriarte, ambos, presuntamente ligados al asesinato del joven Pablo Giovanny Zamora el 13 de septiembre, y su padrino Jorge Pérez Chávez en agosto de 2014 Como parte de esta célula de “Los Morenos”, el Grupo Coordinación de Baja California tiene identificados a: Hugo Gerardo y Jonathan Alfredo Dávalos Magaña, Florentino Sánchez Hernández “El Michoacano”, Junior Belem Sánchez Hernández y Reyver Sánchez Sánchez; Alberto Trejo Romero y/o Romero Trejo “El Chino Fugas” y a María Guadalupe, Rogelio y David Alberto Pérez Altamirano. Conforme a las declaraciones de los detenidos y el trabajo de inteligencia del Consejo Estatal de Seguridad de Baja California, “El Güero Chompas” y el aún prófugo Javier Mendoza Uriarte “El Chapito”, son operadores del Cártel de Sinaloa, delinquen bajo la protección de Ismael “El Mayo” Zambada. En los últimos dos años, han desatado una serie de jornadas de sangre, secuestros y privaciones de la libertad, al enfrentarse a células rivales de los grupos de Alfonso Arzate García “El Aquiles” y los ahora detenidos Fernando Sánchez Arellano “El Ingeniero” (23 de junio 2014), del CAF, y Alfonso Lira Sotelo “El Atlante”. Armas de Tijuana a Guerrero Elementos de la Procuraduría General de la República catearon la mañana del martes 23 de diciembre de 2014, la vivienda ubicada en el número 13910 de la calle De las Brisas en el fraccionamiento Altabrisa y aseguraron: -18 armas largas, llama la atención que no tienen registro de fabricante, las armaron por fuera. -22 bolsas llenas de cartuchos. -Un tanque de gasolina, que servía de compartimento para ocultar armas largas. -Y fundas para armas largas. Este cateo tuvo su origen en una detención realizada por la Policía Estatal el 20 de diciembre. Los uniformados hacían un recorrido de vigilancia preventiva sobre la Calzada Tecnológico del fraccionamiento Altabrisa, y abordaron a un grupo de personas que estaban en el interior de un auto Toyota Solana rojo, con placas de California 4MEM412, debido a que fue evidente que intentaron huir al verlos, y en el interior había dos menores de edad. Al revisar el auto los oficiales localizaron dos rifles calibre .223 y 352 cartuchos, además de casi un kilo de la droga conocida como crystal, por esos hechos fueron detenido Victoriano Bustos, Miguel Pérez, y Guadalupe López, Los menores, que eran hijos de López Ventura quedaron bajo custodia del estado, esta mujer ya había sido aprehendida previamente, bajo las averiguaciones previas 1859/03/20C/AP por daño en propiedad ajena intencional, y la 97/03/203/AP por robo a local cerrado. Al estar detenido, Victoriano Bustos manifestó que él vivía en la casa con el número 13910 en esa colonia y que la usaban como almacén de armas, dijo que: “…las armas le pertenecen a un amigo de Guerrero el cual lleva por nombre Delio Morales Loya”. Detalló que el propietario del arsenal, se había trasladado a finales de noviembre de 2014 al estado de Guerrero, donde vive, y que las armas estaban en el cuarto que Morales ocupaba cuando estaba en Tijuana. De acuerdo a las indagatorias de las autoridades incorporadas el Consejo Estatal de Seguridad, Morales Loya se dedica a la compraventa de armas, las quiere en California, Estados Unidos y las cruza en autos arreglados para tal efecto, según sus cómplices tiene varios y los cruza 2 o 3 veces a la semana. Una de las formas de ingresar las armas a México es importando los autos: “…los dejan en la Pensión Álamos, y se los importa la Tramitadora Vilchis…”, no especificaron si estas empresas tenían o no conocimiento, del tráfico de armas. Cuando los autos ya están legalmente del lado mexicano, los envían a Guerrero en madrinas, una a la semana. No supo decir a qué grupo delictivo estaban destinadas. La casa de Altabrisa fue rentada a un hombre de nombre Delio Morales Loya de 36 años, a su nombre el registro vehicular tiene un Ford truck Explorer blanco 1996 que fue asegurado el 11 de enero de 2011 por la PEP, lo conducía Felipe de Jesús Vaquero Amilpa, quien fue consignado por delincuencia organizada. Las áreas de inteligencia del grupo Coordinación, relacionan el presente decomiso con otro realizado el 22 de enero de 2014 en la calle Granizo de la colonia Magisterial en Tijuana, donde fue detenido Manuel Alejandro Zúñiga García y fueron incautados: – 03 armas largas de fuego calibre 7.62×51 marca sig. SIG SAUER inc. – 05 cargadores de plástico color negro marca SIG SAUER para fusil 7.62×51 – 2369 cartuchos útiles calibre 7.62×39 metálicos color gris – 01 cargador metal color negro – 02 mecanismos de disparo con culata retráctil de arma de fuego – 09 cajas cada una con 50 cartuchos útiles calibre .40 mm marca Remington – 04 cajas cada una con 50 cartuchos útiles calibre .357 marca Remington – 01 caja con 20 cartuchos útiles calibre 5.56 mm marca Winchester – 01 caja con 20 cartuchos útiles calibre 380 marca Federal – 01 caja con 45 cartuchos útiles calibre .32 marca Federal. El otro cateo También como parte del trabajo coordinado, la policía detuvo en la zona de Otay el 14 de diciembre, a dos hombres y dos mujeres en posesión de 2 kilos 650 gramos de crystal e involucrados en la manufactura de cristal, quienes dieron la dirección de una casa que usaban como almacén y laboratorio de drogas en la colonia Independencia en Tijuana. La PGR solicitó y le otorgaron una orden de cateo el 18 de diciembre, este martes 23 de diciembre emitieron un boletín informando de los resultados: “Como resultado de un cateo autorizado por un Juez Especializado, el agente del Ministerio Público de la Federación adscrito a la Delegación en Baja California, en coordinación con elementos de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), lograron el aseguramiento en un domicilio en la colonia Independencia en Tijuana de 354 kilos, 332 gramos y 500 miligramos de clorhidrato de metanfetamina, 31 kilos 380 gramos de acetona y 1 litro 50 mililitros de ácido clorhídrico”. “De esta manera, la PGR reitera su compromiso de combatir delitos federales con todos los recursos que le provee la ley, y exhorta a la ciudadanía a denunciar las 24 horas los 365 días del año al teléfono del Centro de Denuncia y Atención Ciudadana (CEDAC): 01 800 00 85 400, o al correo electrónico”, concluye el comunicado.