Tratándose de seguridad, al gobierno encabezado por Enrique Peña Nieto le urge mejorar su imagen, al interior del país, sobre todo, donde más le importa a la administración priista: en el extranjero. Por ello el Presidente empeñó los esfuerzos de sus instituciones en la captura de enemigos comunes, acciones que antes le han traído felicitaciones y reconocimientos públicos de gobiernos foráneos. El candidato ideal en este momento es Ismael “El Mayo” Zambada García, el líder visible del Cártel de Sinaloa, mafia señalada del control criminal en 27 de las 32 entidades federativas mexicanas, de tener operación criminal en por lo menos cinco estados de la Unión Americana y controlar más de 40 rutas aéreas, terrestres y marinas a lo largo de Centro y Sudamérica; además de mantener presencia en dos continentes, delinquiendo en naciones europeas y países africanos. Tras los señalamientos públicos y reclamos internacionales manifiestos ante la ausencia del Estado de Derecho, evidenciado al máximo en las 22 ejecuciones extrajudiciales cometidas por el Ejército en Tlatlaya, Estado de México el 30 de junio y los homicidios y desaparición de normalistas en Ayotzinapa, en Guerrero, el 26 de septiembre, el nombre de Enrique Peña Nieto y de su gobierno quedó “por los suelos” en el ámbito internacional, señaló el 7 de noviembre José Miguel Vivanco, directivo de Human Rights Watch (HRW). En este contexto, que incluye marchas nacionales, manifestaciones, caravanas, tomas de casetas de cobro, centros comerciales, del Aeropuerto de Guerrero y la quema de oficinas de gobiernos y partidos en Guerrero y Michoacán, la mañana del miércoles 12 de noviembre de 2014, mientras el Ejecutivo federal desarrolla una criticada gira internacional, elementos de la Secretaría de Marina iniciaron operativos de búsqueda en Culiacán, Sinaloa. Desde febrero de 2014, tras la captura del Joaquín “El Chapo” Guzmán, autoridades de las Fuerzas Armadas y de la Procuraduría General de la República (PGR) declararon ante medios nacionales que continuarían los operativos en Sinaloa hasta detener a otros delincuentes como “El Mayo”, de quien sabían, estaba en Culiacán. Es en contra de Ismael Zambada García que existen cargos y expedientes abiertos, por información que lleve a su captura. Ofrecen recompensas de 5 millones de dólares en Estados Unidos y de 30 millones de pesos en México. Su hijo, el recién detenido “Mayito Gordo” es una ganancia, otro eslabón que permitirá a la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO) obtener información para cerrar el círculo y detener al objetivo primario de los operativos: “El Mayo”. Incluso, datos extraoficiales indican que el 12 de noviembre, el capo pudo haber huido de El Salado, población de Culiacán, Sinaloa, dado que algunos de los hombres capturados ese día en compañía de su hijo Ismael Zambada Imperial, son presuntamente cercanos al líder mafioso. Ninguna autoridad confirmó la supuesta fuga. La detención de personas del primer círculo de “El Mayo” se evidencia como la estrategia para acorralarlo, similar a la seguida en febrero para detener a “El Chapo” Guzmán, obteniendo de sus socios criminales la ubicación de sus escondites y los números telefónicos de sus cercanos para intervenirlos y rastrearlos. La captura de su vástago -más allá de su consignación o liberación- demuestra que están cada vez más cerca del cabecilla. Otro hijo capturado Según reportó oportunamente el semanario Ríodoce, el miércoles 12 de noviembre, un grupo especial de las Fuerzas Armadas se desplegó en la zona de El Salado, dominada históricamente por Ismael Zambada. Desde temprano los residentes del poblado habían observado movimiento inusual de tropas del Ejército en el Aeropuerto Internacional de Badiraguato, sin que se supiera a qué se debía el operativo. En la zona de Eldorado, también bajo control del Cártel de Sinaloa, los residentes reportaron actividades de la Marina Armada de México, donde helicópteros de esa dependencia sobrevolaron la zona. Por la tarde-noche del mismo miércoles, de manera extraoficial, el General retirado Moisés Melo García, coordinador estatal de Seguridad en Sinaloa, confirmó a Ríodoce el operativo en la zona de El Salado, también que hubo varios detenidos. Los reportes que habían llegado a la prensa fueron que habían capturado a Ismael Zambada Imperial “El Mayito Gordo”, pero el miércoles, García respondió que él no tenía confirmado ese dato. De acuerdo a información recabada por el semanario sinaloense, “El Mayito Gordo” fue apresado en el poblado La Estancia de los Burgos, perteneciente a la sindicatura de El Salado, municipio de Culiacán, y trasladado al aeropuerto alrededor de las 10:00 pm de a la ciudad de México, junto con un grupo de escoltas y gente del pueblo, quienes también fueron detenidos. El domicilio donde presuntamente fueron aprehendidos, es una casa sin lujos, en un predio resguardado por barda perimetral solo en una porción de la propiedad, en su mayoría expuesta tras un pequeño cerco de alambre de gallina, sin medidas de vigilancia o seguridad aparentes. Desde la Ciudad de México, ZETA recibió la confirmación de la captura del joven de parte de la Marina y de su comparecencia la mañana del 13 de noviembre ante el Ministerio Público de la SEIDO. A las 10:34, tiempo de Baja California, llegó el primer boletín del Gobierno Federal, invitando: “El Comisionado Nacional de Seguridad, Monte Alejandro Rubido García, ofrecerá hoy, jueves 13 de noviembre, un mensaje a medios, a las 14:30 horas, en la Sala de Conferencias de la Dirección General de Comunicación Social de esta dependencia”. Treinta y siete minutos después, recularon: “Se informa que el mensaje a medios, que ofrecería el Comisionado Nacional de Seguridad, Monte Alejandro Rubido García, hoy, jueves 13 de noviembre, no se va a llevar a cabo en los términos como se informó en la invitación anterior”. Sin cargos Sin embargo, está no es la primera vez que el treintañero Zambada Imperial ha sido detenido. Tenía 16 años cuando fuerzas castrenses lo retuvieron tras ser ubicado en el mismo poblado; el entonces adolescente fue liberado. Adicionalmente, en noviembre de 2013, cuando su hermano Serafín Zambada Ortiz fue aprehendido en la garita de Concini Nogales en Arizona, acusado por tráfico de droga, ZETA consultó el expediente abierto en contra de Serafín en la fiscalía de California y el de su otro medio hermano, Vicente Zambada Niebla, en la Procuraduría de Chicago. En ninguno de los expedientes de las acusaciones formales, se incluía a Ismael Zambada Imperial. Pero en el caso de Zambada Ortiz, las autoridades estadounidenses sellaron una parte de las acusaciones, las cuales serán abiertas en mayo de 2015, y que podrían contener otros nombres, incluidos los de algunos de sus medios hermanos. Del lado mexicano, el año pasado, la fiscalía de Sinaloa también informó que no tenía expedientes en contra de “El Mayito Gordo”, ni de su padre, y mientras la Procuraduría General de la República tampoco reportó expediente alguno contra el hijo del capo, a la fecha no hay reporte público de acusación en su contra. El expediente que se conoce con hijos de Zambada como sospechosos, es el AP/UEIORPIFAM/AP/037/2007 de la SIEDO en contra de María Teresa Zambada Niebla, media hermana, en calidad de socia de la guardería Estancia Infantil del Niño Feliz, en Culiacán, Sinaloa, según la lista del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) abierta hace siete años para determinar si existía el delito de operaciones con recursos de procedencia ilícita. Después que se aplazó la conferencia del Comisionado Nacional de Seguridad, será necesario esperar para saber si la SEIDO tiene algún expediente sellado o nuevo, abierto en contra de Zambada Imperial, ya que las autoridades no han informado siquiera si fue detenido en flagrancia delictiva, en posesión de drogas o armas. Actividades mafiosas El hecho de que no existe una averiguación abierta o publica, no significa que las autoridades municipales, estatales o federales en México, ignoren la complicidad criminal de los hijos de “El Mayo” con su padre, la cual han evidenciado al presumir en redes sociales los lujos que compran y la opulencia en la que viven. “El Mayito Gordo” y sus hermanos han sido ligados a las actividades del violento grupo de “Los Ántrax”, quienes son los supuestos responsables de la seguridad del joven y del asesinato de Francisco Arellano Félix, ocurrido el 18 de octubre de 2013. Incluso, uno de los principales matones de esta célula homicida, Eliseo Castro-Imperial y/o Imperial-Castro “El Cheyo Ántrax” – existen versiones no confirmadas de su posible muerte-, comparte uno de los apellidos con el joven heredero y es ubicado como su primo, mientras “El Chavo Ántrax”, de apellido Félix, ha sido identificado como su cuñado. Conforme a los archivos bajacalifornianos, los hijos de “El Mayo” entraron criminalmente y abrieron rutas para su droga en Baja California y Baja California sur desde el año 2000, a través de su hermano, Vicente Zambada Niebla. Protegido por Cenobio Flores y/o Luis Fernando Castro Villa “El Checo” (prófugo) y Alfonso Arzate “El Aquiles” (prófugo), según las áreas de inteligencia del Grupo Coordinación de Baja California, la droga de Ismael Zambada Imperial “El Mayito Gordo” cruza por toneladas a Baja California Sur y por las entidades bajacalifornianas, de Culiacán a Los Cabos, Tijuana o Mexicali. Los Zambada en Baja California Más allá de los expedientes delictivos que registran los inicios de la actividad criminal de los jóvenes Zambada, el Registro Público de la Propiedad de Baja California reporta sus nombres en documentos oficiales de esta entidad. El primero fechado en 1984, acredita a Vicente Zambada Niebla, de entonces 14 años, como dueño de un predio de cuatro hectáreas en la colonia Castro en Mexicali. En el proceso de compraventa fue representado por sus padres, Ismael Zambada García y Rosalía -así se lee- Niebla de Zambada. En 1997, ya con 22 años, Vicente compró 18 hectáreas en el poblado cachanilla Nuevo Paredones, ubicado a un costado de otro lote de 20 hectáreas que junto a tres de sus hermanas, recibió en “sucesión testamentaria de María Elena Cardoza Núñez (abuela), junto a su madre, Rosario Niebla Cardoza. Entre 1989 y 1992, “El Mayo” y su esposa compraron para sus otras tres hijas, otros tres terrenos aledaños al heredado: uno de 12 hectáreas para Mónica del Rosario, otro de 19 hectáreas para Teresa y uno de medidas similares para Midiam Patricia. En la misma zona, la madre tiene otras 18 hectáreas. En el municipio de Tecate, una hermana de “El Mayito Gordo” tiene dos terrenos, uno de 650 metros cuadrados en la Zona Centro, y otro de 130 metros cuadrados. Mientras que en Tijuana, el RPPC indica: un hermano de “El Mayo” es propietario de un terreno de 30 mil metros cuadrados en el Rancho Las Rosas; “El Vicentillo” tiene 13 hectáreas en el Rancho Socorro; los hermanos Zambada Niebla son copropietarios de una casa localizada en un predio de 300 metros cuadrados sobre la calle del Risco en la zona Jardines de Playas de Tijuana; y la joven Zambada Imperial posee 200 metros cuadrados en el fraccionamiento El Mirador. Los detenidos Jesús Vicente Zambada Niebla, hijo de Ismael “El Mayo” Zambada, se encuentra bajo la custodia de Estados Unidos desde febrero de 2010, pero cuando firmó un acuerdo con la Fiscalía Federal y se declaró culpable de traficar heroína y cocaína, en abril de 2014, su nombre desapareció de la base de datos de reos federales de la Unión Americana. “El Vicentillo” fue detenido en marzo de 2009 en la Ciudad de México, bajo los cargos de delincuencia organizada como mando del Cártel de Sinaloa. Fue extraditado el 18 de febrero de 2010 a Chicago, Illinois, por tráfico de drogas y lavado de dinero. Después de cuatro años de juicios pospuestos, el mexicano de 39 años de edad, se declaró culpable del primer cargo; a cambio la Fiscalía desistió de acusarlo del segundo. Ante el juez Rubén Castillo, el día de su audiencia, Vicente Zambada admitió ser mando del Cártel de Sinaloa en operaciones, logística, cobros por distribución y trasiego de drogas, y hasta ser mensajero de su padre con lugartenientes. En su acuerdo con la Fiscalía, Zambada Niebla aceptó cooperar con el gobierno estadounidense “con testimonios e información completa y verdadera en cualquier investigación y preparación previa a juicios en casos criminales, civiles y administrativos”. Juicios como el que la Fiscalía Federal abrió en contra de Joaquín Guzmán Loera “El Chapo”, Ismael “El Mayo” Zambada García, Alfredo “Alfredillo” Guzmán Salazar, entre otros y en los cuales se le relaciona. Podría recibir una sentencia máxima de cadena perpetua y una mínima de diez años, la cual dependerá de su nivel de cooperación con la Fiscalía y será determinada hasta que su participación ya no sea requerida. Además, entregó 1.4 billones de dólares a Estados Unidos a través de bienes a su nombre. También procesado por la justicia estadounidense, Serafín Zambada Ortiz, medio hermano de Vicente y de Ismael, se declaró culpable ante la Corte Federal de San Diego, California, por tráfico de cocaína y marihuana a Estados Unidos, el 26 de septiembre de 2014. Al igual que Vicente, Serafín, de 24 años, aceptó entregar 250 mil dólares de sus ganancias por narcotráfico, al gobierno estadounidense. El acuerdo de admisión de culpabilidad fue presentado en la Corte a diez meses de que fuera detenido, el 21 de noviembre de 2013, en la frontera entre México y Arizona. Serafín admitió, entre otros delitos, comprar más de 100 kilogramos de cocaína y una tonelada de marihuana en Culiacán, Sinaloa, así como el tráfico de droga de México a Estados Unidos por la frontera de California. Al igual que su hermano, podría enfrentar de diez años en prisión a cadena perpetua. Desde el día que aceptó su culpabilidad, su nombre tampoco aparece como uno de los reos federales de Estados Unidos en sus bases de datos. Será el 22 de mayo de 2015 cuando Serafín regrese a la Corte para escuchar un reporte de su pre-sentencia.