— Mamá, dame 15 pesos, en la calle hay un pobre hombre gritando desesperado… “Toma Pepito, qué buen corazón tienes, ¡así me gusta!”. Al rato la madre pregunta: “Por cierto, ¿qué gritaba ese señor?”. — Nieveees… ¡ricas nieves! Va Pepito con su madre al cine, y ven un cartel que dice: “Los menores de seis años no pagan”. La mujer le advierte: “Cuando te pregunten, di que tienes cinco años…”. Se dirigen a la taquilla y a Pepito le preguntan: — ¿Cuántos años tienes, niño? “Cinco…”. — ¿Cuándo cumples los seis? “¡Cuando salga del cine!”. — ¡Mamá! ¡Quiero que me regales un iPhone! “No Pepito, tú ya tienes un celular”. — ¡Pero mamá, quiero un iPhone! ¡Todos mis amigos lo tienen! “Y si todos tus amigos se tiran por la ventana, ¿tú te tirarías con ellos?”. — Claro que no… ¡me quedaba con sus iPhones! Pepito le dice al profesor: — Profe, necesito que me diga algo bonito para decirle a una chica que me gusta mucho… “¡Claro que sí, Pepito! Mira, le puedes decir esto: tienes el pelo dorado, unos ojos que alumbran mi corazón, un cuerpo perfecto y una sonrisa celestial”. — ¡Muchas gracias, profe! En eso va Pepito corriendo a donde está la chica, y le declara: — ¡Tienes el pelo quemado, unos ojos que alumbran mi camión, un cuerpo recto y una sonrisa de animal! Autor: Pedrito