Un subjefe y cuatro inspectores de la Dirección de Inspección y Verificación de Tijuana fueron removidos por pérdida de confianza, derivada de las quejas expuestas esta semana por vendedores de mercados sobre ruedas. Aún no son dados de baja en forma definitiva, pero ya el secretario de gobierno, Bernardo Padilla Muñoz, los removió de sus cargos en tanto se da continuidad a una investigación interna efectuada por la dependencia a su cargo. Una vez concluida la indagatoria, el caso será turnado a la Sindicatura Procuradora para que deslinde responsabilidades. “Recibimos quejas del actuar de estos servidores públicos y, tras una investigación interna, descubrimos que era mejor separarlos de sus cargos por pérdida de confianza, a fin de que otras instancias municipales realicen una investigación formal de derive en responsabilidades”, informó Padilla Muñoz en un comunicado. En días pasados comerciantes de distintos tianguis que operan en Tijuana plantearon al secretario de gobierno una serie de irregularidades de las que se dicen objeto, una de ellas fue el trato que reciben de personal de Inspección y Verificación, del cual dieron nombres y apellidos. La baja, hasta el momento temporal, del subjefe de reglamentos y de los cuatro inspectores, éstos últimos adscritos a distintas delegaciones, es una manera de demostrar que el gobierno de la ciudad busca brindar “un trato digno a la población”, subrayó el funcionario.