El 20 de abril de 2014, la Procuraduría General de la República (PGR) en Tijuana recibió en calidad de detenido, por el delito de portación de armas de fuego de uso exclusivo del Ejército, a David Jonathan García Elizalde, diputado suplente de Felipe Mayoral, quien llegó al Congreso gracias a la coalición entre los partidos Acción Nacional y Estatal de Baja California. Luego de salir bajo fianza, García Elizalde acusó públicamente a la Policía de Rosarito -corporación que lo detuvo- y a su director, Eduardo Montero, de haber “sembrado” las armas, de haber sido allanado en su domicilio, ultrajado frente a su familia, arrestado ilegalmente y bajo falsedades. El parte policiaco -en manos de ZETA- fue entregado a la PGR, e indica que la detención se dio después de una denuncia en la central de la Policía Municipal. Se reportó a un hombre armado y amenazando a un joven de 22 años (se emite su nombre por seguridad). Según el parte, luego de recibir el reporte, los uniformados se dirigieron detrás del establecimiento McDonald’s a un terreno baldío, a un costado del Bulevar Benito Juárez en Rosarito, el cual se sabe, es propiedad de la familia del detenido. El documento oficial detalla que una vez que los policías se entrevistaron con el afectado, éste les describió las amenazas e insultos y la vestimenta de García, quien momentos antes se había dirigido a la playa. “Se implementó un operativo de búsqueda con apoyo de las unidades en servicio, localizando metros más adelante a una persona que coincidía con las características dadas por el reportante, quien llevaba cargando entre sus manos una bolsa color gris con la leyenda PRADA, por lo que fue interceptado”, describe el parte policiano Número 0450. El texto también indica que el denunciante tiene grabada en su teléfono la agresión de su victimario. El oficio redactado por los oficiales encargados de su detención, describe los calibres de dos armas de uso exclusivo del Ejército, un revólver calibre 38 color negro, y otro revólver calibre 357 Magnum. Según la versión -no consignada en el parte- de un agente, al darse cuenta de la presencia policiaca, García Elizalde intentó darse a la fuga corriendo, pero fue detenido y esposado. Dos días después, en la página de Facebook, el pebecista publicó: “Las armas que me adjudica la Policía Municipal no son de mi propiedad, ni tampoco las tenía en mi posesión, tampoco es cierto los hechos que se me imputan, ya que ese día domingo 20 de abril, yo me encontraba en mi casa celebrando el Domingo de Pascua con mi esposa, padres e hijos, cuando me percato que la Policía Municipal estaba violando el candado de mi reja”. El diputado suplente aseguró que interpondrá una denuncia penal en contra de los oficiales y de Eduardo Montero. Por su parte, Felipe Mayoral explicó en entrevista que quienes conocen a su compañero de fórmula dudan de lo que se le acusa, pues es un hombre bien y entregado a su trabajo. Dijo que “puede ser” cierta la versión de que Montero y sus policías lo arrestaron en forma de represalias por las posiciones políticas y críticas que han vertido sobre la inseguridad en Rosarito. Antes del cierre de edición, el reportero se comunicó con García Elizalde para conocer los detalles de su supuesta denuncia y su versión de los hechos. Pero el del PEBC cambió la estrategia. “Mis abogados -justificó García- me recomendaron que hasta ahorita no podemos decir ninguna declaración, te pido comprensión, yo lo voy aclarar en su momento, eso es seguro, yo lo voy aclarar, nada más déjame arreglar esta situación”.
Con armas diputado suplente: de acusador al silencio
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