Tan pronto de ya, se dio el primer caso ventilado y público de corrupción y extorsión. La mina de oro ya empieza a ser saqueada, en tan apenas 4 meses de nuevo gobierno municipal. Les quema las manos, el dinero transforma y ataranta. Las mochadas en varias del ayuntamiento son el pan de cada día. Pero la voracidad destapa, ventila y todo se sabe. Qué vergüenza para los tijuanenses honrados que se dé esto en este gobierno democrático, que por unos vivales manchan y ponen de manifiesto la corrupción sigue, trienio tras trienio y no cesa. La vorágine de corrupción y extorsión no debía ser. Pues apenas el 7 de julio votamos por algo mejor y más democrático y parece ser que de nada sirvió ni sirve. Y el esfuerzo de ir a votar, el esfuerzo de estar en la casilla más de 12 horas, se va a la basura con estos actos pillezcos, gangsteriles, corruptibles, transas, mochadas, etcétera. Así cómo quiere que uno cumpla si sacan el cobre, antes de que empiece a fluir la corriente eléctrica y el cable ya se descobijó. Pobre Tijuana y de sus gobernados, nos están engañando y eso no es correcto. Esperamos mucho más, creo yo. ¡Sí! Esto apenas es el principio, introducción, prólogo, etcétera. P.D. Cumplimos, pero corresponden mal. Leopoldo Durán Ramírez Tijuana, B. C.