En Oregon hay un auténtico gato endemoniado. Resulta que el lunes, el minino blanco y negro, de raza Himalaya y con 22 libras de peso –léase unos 10 kilitos– EN ZERIO! atacó a un bebé y atrapó a la familia, con todo y perro, en su casa de Portland. Las víctimas del felino que, según se reporta tiene un “historial de violencia”, fueron rescatadas por la policía, luego de que lograron someter y capturar a la mascota. Según testimonios, la trifulca comenzó cuando el gato rasguñó al niño en la cara, el padre entonces pateó al gato en el trasero y eso despertó tremenda furia en el animal que los persiguió a todos hasta que lograron meterse a una recámara, cerrar la puerta, y llamar al número de emergencia 911. Cuando los rescatistas llegaron al lugar de los hechos vieron al gato entrar a la cocina y lo encontraron arriba del refrigerador. Luego de meterlo a una jaula se lo entregaron a la familia que, a la fecha, no sabe qué hará con el mal genioso huésped de cuatro patas.