En merecido ascenso

En la actualidad, cumplir con una promoción desmedida y un rango de edad maduro, no son requisitos obligados para que un artista consiga público. Basta que el efecto viral de Internet esté a su favor y, si de resultados gratos se trata, se sume a la premisa donde el talento es lo que pesa. De esa forma, en los últimos meses varios fueron los adolescentes que se catapultaron fuera de su país, propiciando una competencia orientada hacia la calidad en voces. Con solo 17 años, un EP y el lanzamiento de su primer álbum de estudio, “Pure Heroine”, la neozelandesa Lorde encabeza la lista de los artistas revelación. Conquistó Estados Unidos durante 2013 y comienza el nuevo año con el reto de hacer lo propio en Latinoamérica, al visitar Chile, Argentina y Brasil mediante el festival Lollapalooza. De largo cabello alborotado y facciones duras que no logran ocultar del todo su corta edad, Lorde se transforma rápido con un poco de maquillaje, casi siempre en tendencia hacia un estilo gótico sin ser grotesco, pues irónicamente, realza su feminidad. El mismo camuflaje resguarda dentro de ella una voz con poderío que apenas se abre puertas en el Occidente, pero lo hace a paso firme.   Nacida bajo el nombre Ella Yelich-O’Connor, Lorde debe su descubrimiento a una competencia de talentos escolar, donde hace cuatro años la conociera un representante del departamento de Universal Music en Nueva Zelanda. De ahí que rápido se concretara un contrato con el sello. Certificados en Platino y Oro por 60 mil copias vendidas de su EP “The Love Club” (2012), que incluye los éxitos “Royals” y “Bravado”, aceleraron su incursión en este lado del mundo y el gestar un primer álbum. Fue así como presentó “Pure Heroine” con diez canciones que mezclan lo inédito y conocido, teniendo una tesitura que se presta para jugar con diferentes tonos y temas simples, pero frescos, que retratan su forma de ver y vivir la vida, incluido su repudio hacia lo mercantil y las falsas aspiraciones que venden los artistas actuales. Catalogarla en un solo género sería negar el abanico que ofrece su voz, pero para fines de acercarla a algún extremo, su versátil voz puede rozar hacia un tono  parecido al de Adele, aunque sin tanto trabajar y más grave. O bien, por arreglos y ritmo en ciertas canciones, una comparación con M.I.A no ha sido tan descabellada. En el opuesto también se ha ganado que la asimilen con Lana del Rey, pero la diferencia es abismal, pues Lorde sí canta. La suma de todas esas características ya puso en aprietos a las jóvenes cantantes en Norteamérica, que en contraste a ella, recurren a exhibirse más físicamente que en talento. Después de todo, muy a su forma compensan carencias. Sin ese último problema en contra, Lorde solo tiene que comenzar a cantar para dar prueba de por qué se merece incursionar en un nuevo mercado. Con “Royals”, en los últimos meses del año desbancó por nueve semanas a Miley Cyrus del top de Billboard y arremetió contra Selena Gómez por las líricas en las que retrata a la mujer como un objeto, pues otra de las cualidades de la joven neozelandesa, es su sinceridad desmedida. Reconoce que triunfar en Estados Unidos no les ha resultado del todo bien a las nativas de su país, pero tiene en claro que no necesita seguir la misma fórmula que ellas. “Swingin’ Party”, “Million Dollar Bills”, “Biting Down” y “Tennis Court”, son otros de los temas con los que se abre camino, aceptando su influencia por Metric, Sleigh Bells y Kanye West, por mencionar algunos. Como parte de su promoción en Estados Unidos durante 2013, Lorde visitó programas como el de Ellen DeGeneres y Jimmy Fallon, y fue parte del soundtrack de la cinta “The Hunger Games: Catching Fire” con “Everybody Wants to Rule the World”, para cerrar el año lanzando el sencillo “No Better”. Si bien, el cartel de la edición 2014 del festival Coachella, a celebrarse en abril, todavía no es dado a conocer, la participación de Lorde puede ser posible, ya que en semanas previas fue confirmada para las sedes del festival Lollapalooza en Chile, Argentina y Brasil. Otra historia de éxito Como trama escrita con sumo cuidado para terminar gratamente, la vida de Jake Bugg pinta para seguir dándole sorpresas por su talento. Él es el lado varonil semejante a Lorde. Pese a tener dos años más que ésta, su juventud sigue destacando cuando se recapitulan los logros que ha obtenido de 2011 a la fecha. Comenzando por ser invitado al escenario introductorio del festival de Glastonbury  de aquella jornada, saltar de ahí al interés de Mercury Records -derivado deUniversal Music-, hasta firmar contrato con ellos y ser convocado por Noel Gallagher para abrir sus conciertos en 2012. Pero su recorrido apenas comienza fuera de Europa, donde fue telonero de The Stone Roses y The Killers. Nacido en Clifton, Inglaterra, hace 19 años, un folk roquero lo está llevando alrededor del mundo con temas como “Broken”, “Two Fingers”, “Country Song” y “Taste It”, parte de su álbum homónimo que en 2013 llegó a Estados Unidos. Nombrado por la revista Rolling Stone como uno de los mejores nuevos compositores, en octubre pasado Jake arribó a México para tocar en el festival Corona Capital, además de protagonizar una sesión acústica con sus fanáticos. El mismo mes se disputó entre grandes como David Bowie el Mercury Prize, que terminó ganando James Blake. Finalmente, en noviembre lanzó su segundo disco, “Shangri La”, producido por Rick Rubin (Tom Petty/Weezer), del que ya promociona el sencillo “What Doesn’t Kill You”. De mirada desorientada y rasgos claros de la adolescencia, el adicto a los cigarros y desenfadado joven, no da trasfondos profundos a sus letras, pero el tono de su voz pone la balanza a su favor. Fresca y sin ayuda de fondeos electrónicos trabajados, su guitarra acústica lo mantiene al margen de lo orgánico. Verlo físicamente es recordar a los hermanos Gallagher (Oasis), pero también referenciarlo musicalmente a Bob Dylan, The Beatles y Johnny Cash, de quien tiene sello en apariencia y bases sonoras. Autodidacta en el dominio de su instrumento, en los próximos meses Jake Bugg visitará Estados Unidos, Europa y Canadá, como parte de una gira que lo mantendrá ocupado hasta febrero de 2014. La oportunidad más cercana de que los fronterizos lo escuchen en vivo, será el 24 de enero, cuando visite Los Ángeles, California, para ofrecer un concierto en The Wiltern. Músico completo Desde la trinchera de los solitas, un británico más usó el año que recién terminó como un trampolín para probar suerte fuera de su territorio. Se trata de John Newman, cantante de 23 años que dosificó su entrada a la música mediante colaboraciones con el grupo electrónico Rudimental. “Feel the Love” y “Not Giving In”, fueron las contribuciones que durante 2012 lo pusieron en la mira de los escuchas y la crítica europea. Posteriormente, su talento le fue abriendo el resto de las puertas, hasta que en octubre de 2013 lanzó su álbum debut, “Tribute”. Escénico, carismático, bailarín, con aspecto formal y un prominente copete caracterizado por un mechón rubio, son elementos que lo distinguen de forma superficial, entre el resto de sus nuevos colegas. Sin embargo, en cuestión de talento también tiene un factor que lo separa de ellos tajantemente: su tesitura. Pese a todo el esquema publicitario de un popero, Newman posee una voz que se pasea entre el soul y el R&B, sin problema alguno. Consigue rangos difíciles y marca su sello en cada canción, no solo por los géneros en los que se desenvuelve, sino porque escribe, compone y produce cada tema que presenta. Así que además de ser un novel talento, también tiene algo de empresario. De momento, “Love Me Again” y “Cheating”, son los dos sencillos en promoción de su primer disco,  pero con ellos ha conseguido estar en los primeros puestos de popularidad de Reino Unido y conseguir altos números de reproducciones en sus videos almacenados en YouTube. Un reflejo preciso de su fama en la red, es que en países hispanohablantes, consiguió ser de las búsquedas más consultadas durante 2013. Nada mal si se toma en cuenta que apenas comienza su difusión en forma. El próximo martes 15 de enero, John Newman tocará en el teatro El Rey de Los Ángeles, California. Para tomar en cuenta La tendencia de quiénes serán los cantantes que, gracias a su talento y convocatoria entre la gente, sigan siendo protagonistas de la nueva música juvenil, está marcada. Solo falta tiempo para que así lo confirmen, como también otros solistas lo intentarán a lo largo de 2014. Por mencionar algunos, no está de más seguirle la pista a MNEK (19), Sam Smith (21), Ella Erye (19) y Chlöe Howl (17), que entre el pop melódico y una facha que no pasa desapercibida, son dos apuestas masculinas y dos femeninas de los nuevos sonidos británicos. En lo que respecta a Estados Unidos, las opciones incluyen el R&B angelino de Banks (25) y el de Kelela, quizá la promesa con mayor edad, al tener 30 años.  Todos los mencionados entraron por la puerta grande de la música, mediante la consideración de la BBC como artistas prometedores, así que tienen el reto de justificar el anticipado nombramiento que asignan más de 150 involucrados en la industria musical. El hip-hop de Chance The Rapper, las baladas de George Ezra y el rock de Royal Blood, son otros de los candidatos en la lista que años anteriores dio espacio acertado a figuras como Adele, Keane y 50 Cent. Talento y negocio  Mientras el mundo tiene una nueva ola de cantantes, que seguramente darán más noticias gracias a su popularidad y talento, los ya posicionados desde hace años reafirman su lugar en la música, además del rol que tienen como piezas rentables en la industria. Como prueba de ello, la revista Forbes capituló cuáles fueron los artistas mejor pagados de 2013, basándose en el dinero que éstos generan por sus conciertos, mercancía oficial y discos, principalmente. Las cifran corresponden al período del 1 de junio de 2012 al 1 de junio de 2013, y ponen en el puesto número uno a la “Reina del Pop”, Madonna, quien con 55 años de edad, ha editado una docena de álbumes en su carrera. El género que la ha convertido en un ícono de la música, es también el más redituable, según datos de Nielsen SoundScan, la Asociación de Industria Discográfica de Estados Unidos y PollStar. Hasta la segunda mitad de la lista, comprendida por veinte lugares, otras divisiones como el rap y electrónica figuran. Enseguida, los puestos más destacados. ARTISTA INGRESO 01. Madonna 125 millones de dólares 02. Lady Gaga 80 mdd 03. Bon Jovi 79 mdd 04. Toby Keith 65 mdd 05. Coldplay 64 mdd 06. Bruce Springsteen 62 mdd 07. Justin Bieber 58 mdd 08. Taylor Swift 55 mdd 09. Elton John 54 mdd 10. Beyoncé 53 mdd