La Unidad Orgánica de Homicidios Dolosos de la Subprocuraduría Contra Delincuencia Organizada, informó el esclarecimiento de dos homicidios cometidos los días dos y tres de diciembre del presente año. El primer caso, se suscitó el 2 diciembre. Los hechos ocurrieron en la calle España entre General Ferreira y bulevar Fundadores, en contra de Gabriela Vallejo Rivera, quien murió a consecuencia de los golpes contusos que recibió en la cabeza y cuello con un arma blanca. De acuerdo con las investigaciones, se identificó al homicida que lleva por nombre Juan Francisco Muñoz, 37 años, quien era compañero de trabajo de la mujer y sostenían una relación extramarital, ya que se encontraba separada de su marido. Cuando Vallejo Rivera quiso poner fin a la relación, Muñoz la llevó a un lugar y quiso abusar de ella, la bajo del vehículo y la golpeo con una piedra. Una vez que observó que ya no se movía se retiró del lugar hurtando su bolsa de mano, misma que posteriormente tiró, no sin antes sustraer su teléfono celular y una tarjeta bancaria. Por lo anteriormente expuesto se ejercitó acción penal en contra del indiciado antes mencionado por el delito de homicidio calificado, solicitándose la respectiva orden de Aprehensión Urgente al Juez de Primera Instancia de lo penal en Turno, la cual fue obsequiada por el Juez Tercero de lo Penal. En el segundo caso, se trata del homicidio del joven Luis Daniel Quesada Reyes de 17 años de edad; quien fue victimado en el Ejido Matamoros, por el de nombre Jorge Edgar Lomelí Ramos de 36 años de edad. Los hechos ocurrieron cuando Quesada Reyes y Lomelí Ramos discutieron, y el indiciado lo golpeó con un objeto contuso. El cuerpo de la víctima fue localizado en un camino vecinal de terracería entre la colonia Altiplano y Ejido Matamoros de esta ciudad. Luego de una serie de diligencias efectuadas por el agente del Ministerio Público, logró determinar su presunta responsabilidad de Lomelí Ramos, al ser delatado por su esposa; por lo que solicitó a la autoridad judicial la orden de aprehensión en su contra, misma que fue cumplimentada. Durante las investigaciones diversos testigos manifestaron que el día 3 de diciembre aproximadamente a las once de la noche caminaban por un camino vecinal de terracería, ya que se dirigían a recoger un carrito de juguete, el cual habían visto tirado sobre dicho camino, al momento de retirarse del lugar se percataron de que se acercaba hacia ellos un vehículo tipo pick up. El conductor de dicho auto, apagó las luces principales y empezó a maniobrar dándose en reversa para después descender del pick up y dirigirse hacia la caja de éste, una vez que abrió la caja, volvió al volante para acelerar, mientras los testigos observaron que había tirado un bulto. En ese momento decidieron acercarse, percatándose que lo que había caído era el cuerpo de una persona del sexo masculino. Ante tales hechos los Agentes de la Policía Ministerial asignados a la Unidad Orgánica de Homicidios Dolosos, lograron dar con el paradero de Jorge Edgar Lomelí Ramos, a quien que se le ejercitó acción penal el 19 de diciembre del presente año por el delito de homicidio calificado, solicitándose la respectiva orden de Aprehensión Urgente al Juez de Primera Instancia de lo penal en Turno, la cual fue obsequiada por el Juez Quinto de lo Penal. Avances en el caso “Hacho” Kaloyán La Unidad Orgánica de Homicidios Dolosos de la Subprocuraduría Contra Delincuencia Organizada dio avances del caso de “Arturo “Hacho” Kaloyán, quien fue asesinado la noche del lunes 16 de diciembre. En el informe se señaló que de acuerdo en los videos de las cámaras de seguridad, en el homicidio participó un vehículo de color obscuro tipo vagoneta de cuatro puertas. Además se tiene registrado la intervención de otros tres vehículos, sin embargo no han sido identificados por los testigos “pudo haber sido un auto puntero o esperando el recorrido del occiso”, declaró la subprocuraduría. En el informe presentado a los medios se dijo que de acuerdo a la trayectoria de balística, el vehículo agresor se emparejó del lado izquierdo del funcionario y detonó el arma “por las lesiones y posición del cadáver. Fue cuestión de segundos directo y sorpresivo”, acotó el funcionario de la PGJE.