24.6 C
Tijuana
miércoles, octubre 2, 2024
Publicidad

Cuentahíloz

CANAL. El omnipotente ex coordinador de Gabinete de Carlos Bustamante, Antonio Cano, junto con Martha Saldívar, dama encargada del Departamento de Comunicación Social del XX Ayuntamiento de Tijuana, se vendieron como los iluminados ideólogos para que el pasado gobierno tuviera su propio y aburrido canal de televisión. Prometieron echarlo a andar sin costo alguno, pero terminó costando millones de pesos; un gran proyecto que perduraría a través de los tiempos. En 2011, año del gran lanzamiento, un muy optimista Cano pudo decir: “Es un canal para la ciudad, que quede para Tijuana”. Pero una de las decisiones del alcalde Jorge Astiazarán, incluso antes de tomar protesta como tal, fue desechar de una vez y por siempre el mentado canal. Eso, sin contar que luego se toparon que dicho proyecto está en la lista de irregularidades que tendrá que deslindar la actual administración. Qué lejos quedaron los alardes de aquellos visionarios y desatinados funcionarios. YA LE GUSTÓ. Si el gobierno se compadeciera de ellos, los políticos sin quehacer deberían tener un seguro de desempleo. Si fuera así, Javier Urbalejo Cinco podría cobrar el suyo. El priista terminó su administración como alcalde de Tecate y no le alcanzó para más. Hoy desquita su tiempo de ocio en convertirse en el dirigente del PRI a nivel estatal, y de ahí, claro está, aspirar a un cargo de mayor pelaje. La sorpresa es que el ex presidente municipal es defendido y empujado por un reducido y superviviente equipo castrotrentista. El cargo con el que sueña Urbalejo también lo quieren David Saúl Guakil y Carlos Barbosa. Y mientras estos tres se promocionan por todos lados, al estilo, el Comité Ejecutivo Nacional del PRI prepara la imposición irrebatible desde el despacho en la capital.  DESVIELADO. En los niveles de sospechas y paranoias que se manejan en Rosarito, el equipo del presidente municipal, Silvano Abarca, piensa que el ex alcalde Javier Robles Aguirre dejó a su sucesor no solo sin dinero y con muchas deudas, sino desprotegido, literalmente. Silvano no ha podido transportarse en la única camioneta blindada para uso de la Presidencia. Resulta que “Tito” se la heredó con el motor inservible y con las balatas destrozadas. El vehículo se adquirió en la administración de Hugo Torres y no ha salido del taller. Mientras eso no se arregle, el alcalde del quinto municipio se paseará sin la Suburban anti-ataques. PINTOR DE BROCHA GORDA. Omar Sarabia, regidor de Tijuana, se ha ganado en pocos días diversas quejas de empleados del ayuntamiento. Lo describen como prepotente y muy engreído. A pesar de que proviene del PRD, el partido -según- de los humildes, ha intentado servirse como rey, a decir de quienes se le acercan. Ya en el cargo, creyó que merecía más. Cercanos al edil saben que Sarabia preguntó si podía obtener recursos para remodelar su oficina. Pero el plan de austeridad del ayuntamiento se lo impidió. Brillante, el muchacho se puso su overol de pintor y, con una cubeta de color en base de aceite, pintarrajeó sus cuatro paredes. No hay que ser un genio para saber que, si la pintura es de aceite, hay que diluirla con solventes químicos, que el olor es fuerte y que su uso es únicamente para exteriores o lugares ventilados. El jueves 12 de diciembre, el personal de regidores tuvo que desalojar el edificio por el fuerte y penetrante olor del aferrado pintor de brocha gorda.

Autor(a)

Redacción Zeta
Redacción Zeta
Redacción de www.zetatijuana.com
- Publicidad -spot_img

Puede interesarte

-Publicidad -

Notas recientes

-Publicidad -

Destacadas