Fue una llamada histórica. El teléfono de Elena Poniatowska en su casa de la Ciudad de México sonó “un poquito antes de las 7:00” de la mañana, el martes 19 de noviembre. En Madrid, España, eran nueve horas más, alrededor de las cuatro de la tarde. La célebre escritora todavía estaba descansando. Contó a ZETA que tuvo que levantarse y correr a contestar porque el aparato telefónico no estaba en el buró, sino en otra habitación. Era el presidente del Jurado del Premio de Literatura en Lengua Castellana “Miguel de Cervantes”, que le anunciaba que había ganado semejante galardón, también conocido como el “Nobel español”. Los medios de comunicación de todo el mundo empezaron a esparcir la noticia, principalmente en la parcela virtual. Obviamente, el teléfono de Poniatowska no dejaba de timbrar, eran los reporteros que solicitaban entrevista y sus colegas intelectuales o amigos que llamaban para felicitarla. Las llamadas saturaron la línea telefónica de la familia Poniatowska, tanto que la escritora prefirió pactar una rueda de prensa en la Librería del Fondo de Cultura Económica (FCE) “Rosario Castellanos”, en la colonia Condesa de la Ciudad de México, al medio día. Ahí los reporteros tuvieron oportunidad de preguntar cuanto quisieran a una sonriente Poniatowska que aprovechó para dedicarles el galardón: “Éste es un premio para los periodistas”, ofreció ante una librería “Rosario Castellanos” abarrotada de reporteros, fotógrafos y camarógrafos. Pero terminó la rueda de prensa y la casa de Elena Poniatowska no dejó de recibir a periodistas mexicanos y corresponsales de medios de todo el mundo, mientras amigos e intelectuales continuaban llamándole por teléfono. No era para menos, pues se trata de la única escritora mexicana en recibir el Premio Cervantes del “territorio de la Mancha”, como describía Carlos Fuentes al mundo hispanohablante. La voz del Jurado El fallo del Jurado del Premio de Literatura en Lengua Castellana “Miguel de Cervantes” 2013, fue dado a conocer por el ministro de Educación, Cultura y Deporte de España, José Ignacio Wert, el martes 19 de noviembre. De acuerdo con el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, el Jurado concedía el Premio Cervantes 2013 a Elena Poniatowska “por una brillante trayectoria literaria en diversos géneros, de manera particular en la narrativa y en su dedicación ejemplar al periodismo. Su obra destaca por su firme compromiso con la historia contemporánea”. El Jurado literario complementó: “Autora de obras emblemáticas que describen el Siglo XX desde una proyección internacional e integradora, Elena Poniatowska constituye una de las voces más poderosas de la literatura en español de estos días”. El Ministerio de Cultura informó también que el Jurado estuvo integrado por 11 miembros: José Manuel Caballero Bonald, galardonado en la edición 2012; José Manuel Blecua Perdices, miembro designado por la Real Academia Española; Renée Ferrer a propuesta de la Academia Paraguaya de la Lengua Española; María Pilar Celma Valero, por la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE); Diego Valadés Ríos, por la Unión de Universidades de América Latina (UDUAL); María Dolores López Enamorado por el director del Instituto Cervantes; Fernando Rodríguez Lafuente, por el ministro de Educación, Cultura y Deporte; José Luis Rodríguez García, por la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE); Ana María Hernández Vallen, por la Federación Latinoamericana de Periodistas (FELAP); y Nagwa Mehrez, por la Asociación Internacional de Hispanistas. El máximo galardón de las letras en castellano había sido obtenido solo por tres mujeres: Las españolas María Zambrano (1988) y Ana María Matute (2010); y la cubana Dulce María Loynaz (1992). Incluso, los únicos mexicanos en recibir el Premio Cervantes han sido Octavio Paz (1981), Carlos Fuentes (1987), Sergio Pitol (2005) y José Emilio Pacheco (2009). El Ministerio de Cultura detalló que el Cervantes será entregado por los Reyes de España a Poniatowska el 23 de abril de 2014 (aniversario luctuoso de Miguel de Cervantes), en el Paraninfo de la Universidad de Alcalá de Henares, territorio natal del autor de “El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha”. Seis décadas de producción literaria Elena Poniawtoska nace en París, Francia, el 19 de mayo de 1932, aunque desde los nueve años vive en México; es hija de la mexicana Paula Amor de Ferreira Iturbe, y del francés de origen polaco Jean Evremont Poniatowski Sperry. A la edad de nueve años, la niña Elena tuvo que migrar con su mamá a México, mientras su papá participaba en la Segunda Guerra Mundial al lado de los franceses, más tarde las alcanzaría. Después de estudiar en Estados Unidos, a partir de 1953 México se convirtió en tierra fértil para su periodismo literario: “Yo quería ser algo, yo no sabía ni qué iba a suceder, yo me inicié de periodista pero no sabía que me iba a quedar toda la vida. Es mi oficio, es lo que yo ejerzo; yo no digo que soy buena o mala periodista, lo que digo es que es mi oficio”, diría Poniatowska en alguna de las diversas entrevistas concedidas a este Semanario. Lo demás es historia que desemboca en el Premio Cervantes: la narradora ha heredado a la literatura universal más de 40 títulos, desde entrevista y crónica, hasta cuento y novela, empezando por el libro de cuentos “Lilus Kikus, México: Los Presentes” en 1954, hasta la biografía sobre Guillermo Haro, “El Universo o Nada” (Seix Barral, 2013). Entre algunos de sus títulos, destacan “Hasta No Verte Jesús Mío” (1969, Premio Mazatlán), “La Noche de Tlatelolco” (1971, Premio Xavier Villaurrutia, rechazado), “Querido Diego, te Abraza Quiela” (1978), “La Flor de Lis” (1988), “Tinísima” (1992, Premio Mazatlán), “Paseo de la Reforma” (1996), “La Piel del Cielo” (2001, Premio Alfaguara de Novela), “El Tren Pasa Primero” (2007, Premio Rómulo Gallegos) y “Leonora” (2011, Premio Biblioteca Breve). En su acervo figuran también los libros “Palabras Cruzadas” (1961), “Domingo 7” (1982), “Todo México” (1990) y “Todo México Vol. II” (1994). Su obra incluye los títulos de cuentos reunidos en “De Noche Vienes” (1979) y “Tlapalería” (2003). En 1978, Elena Poniatowska recibe el Premio Nacional de Periodismo en México, y el Premio Nacional de Lingüística y Literatura 2002. Su obra ha sido traducida a más de 15 idiomas. “Siempre, yo creo que se toma menos en cuenta a las mujeres” Por la tarde del día 19 de noviembre, después de la conferencia de prensa en la Ciudad de México, Elena Poniatowska aceptó, generosa como siempre, platicar para Semanario ZETA. — ¿Cómo han sido estas horas luego de saber que ganó el Premio de Literatura en Lengua Castellana “Miguel de Cervantes”? “Estoy muy emocionada, mucha emoción, mucha gente que ha llegado a la casa, estoy muy contenta”. — ¿Cómo le informaron que había ganado el Premio Cervantes? “Me habló creo que es el presidente del Jurado, me habló muy temprano, en la mañana, me despertó casi, y me dijo que yo lo había ganado. Para mí fue muy sorprendente, no me lo esperaba”. — ¿Todavía estaba descansando? “Todavía estaba acostada cuando me llamó, pero el teléfono no está junto a la cama, corrí a otro cuarto, pero no sabía yo para qué era, yo creía que era para otra cosa que había yo hecho mal”. — ¿Qué hora era cuando le dieron la noticia? “Eran un poquito antes de las 7:00”. — El Premio Cervantes es propuesto por diversas instituciones al Jurado. ¿Sabe quién la propuso? “No, la verdad no sé, varias gentes, yo creo que varias instituciones”. — El Cervantes es un premio que casi siempre ha sido entregado a hombres. ¿Qué siente Usted al saber que es la única mexicana y la cuarta mujer en recibir semejante galardón? “Bueno, para mí es una sorpresa enorme, y me da mucho gusto, pero pues ya tengo 81 años, entonces, espero poderlo disfrutar durante unos cuantos años”. — ¿Por qué cree Usted o a qué aduce que en sus 38 ediciones, desde 1976, el Premio Cervantes ha sido entregado a 34 escritores (en realidad 35, porque en 1979 correspondió a Jorge Luis Borges y Gerardo Diego) y solo a cuatro escritoras? “Siempre, yo creo que se toma menos en cuenta a las mujeres, pero ojalá ya ahora hablen más de las mujeres y las tomen más en cuenta”. — ¿Esta disparidad significa que no han sido reconocidas tanto como los escritores? “No. Pero espero que se abra el camino también para las mujeres”. — ¿Qué significado especial tiene para Usted recibir el premio más importante de la lengua española?