Hoy quiero ser abrazado por el viento que sopla en las alturas del azul celeste llamado cielo y sentir el sutil vuelo del ave que me inspira plenitud. Pero te espero. No porque no tenga otra opción, sino porque de tanto pensarte, te amo; y de tanto amarte ya te necesito desesperadamente Ven pronto. Por favor en mis sueños solo sé que tu pelo negro y es el más hermoso cabello que mis manos han tocado… Te pienso mucho. Pero entre tantos placeres, me conformo con la brisa que te toca y te envuelve, para así poder llegar con caricias a tus dulces labios… Ahora recuerdo. Fue cuando entonces en mi desesperación te soñé. Te abracé y por fin te tuve entre mis brazos y sentí tu tibio, cálido y frágil cuerpo. Te amo. ¡Sí, te amo! Te amo después de cada día, cada sonrisa, cada beso intenso, cada sueño húmedo. Después de cada abrazo por la noches lluviosas en las que mi mente nunca deja de pensar en ti. Recordaba que todas las historias terminan con un final feliz, y yo quiero tener mi final contigo. Te extraño… sólo una última petición… cuando salgas de mis sueños, no te olvides de visitarme, ven por aquí, sólo un momento, para saber que estás bien, lo necesito saber para seguir respirando por ti… Aquí estaré yo siempre cerca de ti, llamando a gritos a la dueña de mi alma y tratando de encontrar a la única mujer en el mundo que me pertenece… y me hace inmensamente feliz en mis sueños y en mi vida. Tú. Moisés Tapia Correo: moises.218@hotmail.com