Luego de ser liberado del reformatorio del Estado de Morelos, la madrugada del 26 de noviembre, Édgar Jiménez Lugo “El Niño Sicario”, fue trasladado a Estados Unidos por autoridades migratorias mexicanas y elementos de la Procuraduría General de la República (PGR). Tras cumplir una sentencia de tres años de tratamiento por el delito de delincuencia organizada, el menor, de ahora 17 años de edad, egresó a las 2:30 am del Centro de Ejecución de Medidas Cautelares para Adolescentes (CEMPLA) de Cuernavaca. De nacionalidad estadounidense, el también conocido como “El Ponchis” fue trasladado inicialmente a la delegación del Instituto Nacional de Migración en la entidad morelense, y de ahí, al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México. Partió hacia San Antonio, Texas, donde lo esperaba la organización cristiana Outcry in the Barrio, la cual se hará cargo de su custodia y de un tratamiento de readaptación a la sociedad, antes de ser reunido con su madre, quien vive en San Diego, California. Édgar fue detenido en diciembre de 2010, a los 14 años de edad, por su participación en diversos crímenes, entre ellos cuatro homicidios por decapitación, pero solicitó al Consulado de Estados Unidos en México ser protegido y llevado a su país de origen, tras ser liberado. Desde los 11 años, según contó el menor a las autoridades mexicanas, trabajó bajo las órdenes de la organización criminal de los hermanos Beltrán Leyva, hasta ser interceptado en el Aeropuerto de Xochitepec, Morelos, cuando intentaba abordar un vuelo hacia Tijuana en compañía de sus dos hermanas, con la intención de reunirse en San Diego con su madre. Casi tres años después, luego de su anticipada liberación por considerar “la buena conducta” del menor, Édgar finalmente llegará a San Diego, ciudad donde nació y donde familiares esperan su llegada.
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