“Estudio 164”, un espacio multifacético

El surgimiento de una galería siempre será noticia. En esta ocasión, luego de una extensa trayectoria como artista, Nuria Benítez se anima a abrir una galería estudio en Tijuana junto a otros artistas bajacalifornianos. “Yo siempre había trabajado sola, ya sentía yo que era momento de armar un buen equipo”, expresó a ZETA la reconocida artista el viernes 20 de septiembre, día en que inauguró el recinto Estudio 164. Para empezar, el nombre deriva precisamente del número de la casa donde se localiza la ahora galería. Se trata de un inmueble que hace unos meses tenía el letrero “se renta”: Javier Mina número 164, Colonia Hipódromo. Subiendo por la Avenida Hipódromo, en la calle Zitácuaro, doblar hacia la derecha; después de cuatro cuadras, se encuentra precisamente la calle Javier Mina, otra cuadra a la diestra conduce hasta el número 164 de la galería estudio. Se trata de una casa que ahora alquilan Nuria Benítez y su equipo. En el primer piso de la casa-habitación, las paredes sirven para exhibir obra. Igualmente, en la segunda planta, un amplio pasillo con sus respectivas paredes y tres recámaras funcionan ahora como galería-estudio. “El propósito de reunirnos artistas de trayectoria internacional y artistas emergentes, es integrar la experiencia y la creatividad. Crear un espacio de trabajo que facilite al espectador el contacto directo con el artista y su proceso creativo, abriendo las puertas de nuestro espacio de trabajo, convirtiéndolo en un espacio alternativo para mostrar y vender arte”, refiere a ZETA la artista. La primera colectiva reúne a artistas de Rosarito y Tijuana, la mayoría publicados en el libro “The Baja California Art Book. 16 Contemporary Masters” (Casa Valencia Galería Baja, San Diego, 2002) y los artistas de casa que conforman el proyecto Estudio 164, entre ellos Nuria Benítez Álvarez del Castillo (Nuria Bac), Antonio Proa (Proarte), Bernardo Jaramillo, Búho Villamil, Lalo Saavedra (Burro Gracia) y Luna de La Torre. Entre los artistas invitados figuran también David Silvah (Rosarito-Baja Gallery), Juan Gastélum (Rosarito), Alejandra Cordero (Rosarito), Aida Valencia (Casa Valencia Tijuana- San Diego), Rosa Camacho (Tijuana-Uniarte) y Nelson Ortega Toscano (Colombiarte – Colombia). Más que una galería Nubia Benítez cuenta a este Semanario cómo surge la posibilidad de abrir una galería estudio en Tijuana: “Era importante para mí conseguir un espacio donde pudiéramos convivir varios artistas y  donde todos tuvieran la intención y capacidad de estar abiertos a ese contacto con el público, que hay otros artistas que al contrario, buscan la soledad para producir; los compañeros y yo que estamos aquí no tenemos ese pensamiento, nos gusta más el intercambio con la gente, nos nutre más”. Benítez aclara que el espacio es más que una galería: “Más que galería, queremos tener los talleres abiertos para que la gente conozca también el proceso del artista, lo vea trabajar, de esa manera vas logrando una mejor conexión con tus clientes, con tu espectador, y entienden el porqué de lo que haces. Se sienten parte de lo que haces, ven tu trabajo de principio a fin, y valoran más las piezas que se llevan con ellos”. Ante todo son artistas antes que galeristas: “Nosotros no somos galeristas, no somos promotores de arte. Todos hemos promovido nuestro trabajo en algún momento dado, pero no somos historiadores de arte, no somos curadores, no somos museógrafos; somos personas que producimos arte. Entonces nos parece interesante crear un vínculo con la gente, obviamente nos interesa la venta y promoción de nuestra obra”. Como todo proyecto de esta importancia, Nuria Benítez sostiene que una primera etapa del proyecto consiste en involucrar y formar público para sus propuestas artísticas: “Queremos crear una necesidad de venir a visitarnos independientemente de los motivos, no es necesario que nos visiten en un opening, no es necesario que nos visiten el día que haya una exhibición individual de un artista reconocido, sino que pueden venir en cualquier momento: Va a haber arte, va a haber clases, va a haber artistas aquí adentro; entonces, mantenerlo así dinámico es nuestra primer etapa”. Después, a mediano y largo plazo, uno de los planes es incluir residencias: “Estamos en el paso cero -acepta Benítez-. Hay muchas cosas que preparar antes, pero estamos estudiando la posibilidad de empezar a funcionar también como residencia, es decir, en mi caso, que expongo en el exterior, empezar a crear contactos e invitar gente de fuera para poderles dar asilo, que vengan. La situación de las residencias es invitar a artistas de afuera, recibirlos, tenemos lugares donde pueden quedarse a dormir y a donde puedan venir para realizar su obra aquí con nosotros y después exponerlo, ésa sería como nuestra última etapa”. Eso sí, el futuro también dependerá de las posibilidades de la demanda: “También vamos a dejar abierto lo que pueda suceder: Finalmente, de alguna manera el público decide si te vas especializando más como talleres, clases, o si te vas especializando más como residencia o como galería”. Cambia leyes por la pintura Nuria Benítez nace el 2 de octubre de 1973 en México, aunque desde 1974 radica en Tijuana. Estudia Licenciatura en Derecho en la Universidad Autónoma de Baja California (UABC). Pronto cambia las leyes por la pintura. Al concluir sus estudios en Derecho, viaja a Alemania para dedicarse por completo a las artes visuales, donde exhibe su talento, así como en Italia, Bélgica, Inglaterra, Austria y Luxemburgo. Posteriormente viaja a Santiago de Chile para participar en varios eventos colectivos y colaboraciones con muralistas de la región. Aunque exhibe por primera vez en esta ciudad hasta 2002, con la colección “… Y Vos?”, en Avalon Tijuana. Autodidacta, sagaz e intuitiva, su obra fauvista y expresionista tiene un estilo latino con formas orgánicas donde abundan colores primarios. Conocida principalmente por el autorretrato, su trabajo va desde lo gráfico con una línea suave y simplificada de la figura humana; hasta la complejidad del ser y la sensibilidad que explota con un agresivo uso de color. Su trabajo es totalmente orgánico y libre, además de que su obra es prácticamente creada con las yemas de sus dedos. Actualmente su obra está siendo reproducida para venta en Canadá, Estados Unidos, Europa y México. Fue elegida como uno de los 16 clásicos contemporáneos de Baja California publicados en el libro “The Baja California Art Book. 16 Contemporary Masters”. A finales de 2013 exhibirá su obra en España.