Más de 100 mil anuncios del Gobierno Federal mexicano son transmitidos cada año por estaciones de radio norteamericanas con antenas en Baja California, que emiten programación en inglés dirigida al público del sur de California. Estos anuncios oficiales difunden programas públicos o mensajes electorales a una audiencia que no vive en México ni le corresponde oír sobre sus asuntos políticos y sociales. Ese tiempo aire no le cuesta al Gobierno de México, es parte de los tiempos oficiales administrados por la Secretaría de Gobernación que por ley deben reservar en su programación. Si embargo ese tiempo aire tendría un costo anual a los anunciantes particulares de 27 millones de dólares, o 337.5 millones de pesos. Informados por los propietarios de las empresas radiofónicas, grupos empresariales de la Entidad, consideran que ese valioso tiempo aire, podría ser aprovechado para promover a Baja California entre la audiencia del sur de California, en materia turística, comercial y de mejoramiento de la imagen. Por lo que han integrado esta iniciativa en una propuesta de “agenda única de desarrollo” creada por el Consejo Coordinador Empresarial de Tijuana. Para que esta propuesta sea aplicable es necesario modificar los lineamientos federales para el uso de los tiempos oficiales, lo cual depende de la Secretaría de Gobernación, ése es el primer objetivo de los inversionistas, pero en la experiencia de los funcionarios turísticos locales ésa es una meta muy difícil de alcanzar. La Ley es la Ley Desde el aparato de radio se escucha en inglés el siguiente diálogo. — “Y por eso yo no se si ir a votar o no. De cualquier manera hacen lo que quieren, ¿cómo podemos asegurarnos de que la decisión de mi voto será respetada?”, pregunta una mujer joven, en un anuncio de radio en inglés transmitido en una estación norteamericana con audiencia en Tijuana y San Diego. — “Para eso está la Corte Electoral del Estado de Baja California, ellos protegen nuestro derecho” le responde otra joven. — “¿Cómo?” le cuestiona. Para este momento a los radioescuchas les resulta imposible saber por qué estas mujeres discuten sobre las votaciones. — “Ellos revisan que todo se haga legalmente en el proceso electoral”, afirma la joven número dos. — “¿En verdad, ellos vigilan a la autoridad?”, cuestiona la número uno, aparentemente escéptica de la legalidad con la que se conducen las autoridades bajacalifornianas. — “Sí, ellos hacen que se respete la ley”, le responden. — “Entonces sí voy a participar”, afirma la mujer uno. — “Ah, ¿ya ves?”, la refuerza su interlocutora. — “¿Cómo está la carne?” Pregunta la joven uno. — “Ya casi está buena”, finaliza su amiga. Antes concluir el anuncio de 30 segundos en inglés escuchamos a ambas diciendo a coro: “Corte electoral del Estado de Baja California”. Es entonces que los radioescuchas nos damos cuenta que se trata de un anuncio gubernamental mexicano; que habrá elecciones en Baja California; que las instituciones gubernamentales no son lo suficientemente confiables, por lo que requieren de un organismo externo para que “no hagan lo que quieran” y que ambas están cocinando carne. Este es solo uno de los 100 mil o más anuncios gubernamentales que cada año deben transmitir las cinco estaciones de radio estadounidenses que tengan sus antenas en suelo bajacaliforniano, porque se rigen bajo los mismos lineamientos federales de la Secretaría de Gobernación que el resto de las estaciones mexicanas. Debido a que su programación es completamente en inglés, los anuncios se transmiten en el mismo idioma, sin embargo son dirigidos a una audiencia mexicana, por lo que carecen de trascendencia para los estadounidenses, y en ocasiones hasta carecen de sentido, porque se traducen casi de manera directa, textual, con errores porque no se interpreta de acuerdo al contexto. Pero la ley es la ley, y deben cumplir con lo que establece el Artículo 59 de la Ley Federal de Radio y Televisión: 30 minutos diarios de transmisión gratuita disponibles en todas las estaciones de radio y canales de televisión abierta, así como la transmisión de la Hora Nacional todos los domingos. Cuando se trate de transmitir información de trascendencia para la nación, todas las estaciones de radio y televisión del país estarán obligadas a encadenarse para darle difusión, según establece el Artículo 62 de la Ley Federal de Radio y Televisión. Lo anterior constituye un tipo de “pago en especie” de impuestos federales que deben realizar las estaciones comerciales de radio y televisión que operan al amparo de concesiones gubernamentales, por hacer uso del espacio aéreo mexicano para difundir sus señales. Esto significa que estas estaciones de radio cuya audiencia principal está en Estados Unidos, deben difundir anuncios de programas del gobierno mexicano, que van desde las advertencias de no construir viviendas en los lechos de los ríos para evitar accidentes en temporada de lluvias, hasta los comerciales que invitan a los alumnos de primaria a participar en la olimpiada nacional de matemáticas. “La ropa sucia se lava en casa” En febrero de este año Armando Carrasco, presidente del Comité de Turismo y Convenciones de Rosarito, acudió a un evento de motociclismo en el estadio Petco de San Diego. Ahí coincidió con un amigo que maneja la publicidad la estación The Walrus (105.7 FM), una de las emisoras fronterizas con antenas ubicadas en Tijuana, pero con estudios en San Diego y programación en inglés. El Publicista invitó a Carrasco a reunirse en las oficinas de la Estación porque quería hablar de radio. “Al principio pensé que me iba a tratar de vender anuncios de radio y pues la verdad ahorita no tenemos presupuesto para publicidad, pero fui de todas maneras”, explicó el Presidente de Cotuco Rosarito. Cuando llegó a la reunión se encontró con un grupo de directivos de la empresa Broadcast Company of the Américas, propietaria de las cinco emisoras fronterizas de la región Tijuana/San Diego: XEPRS-AM (1090 AM) estación deportiva conocida como The Mighty 1090. XHPRS-FM (105.7 FM) estación de hits clásicos conocida como The Walrus. XETRA-FM (91.1 FM) estación de rock alternativo conocida como 91X. XHITZ-FM (90.3FM) estación de éxitos rítmicos conocida como Jammin' Z90 XHRM-FM (92.5 FM) estación de hits urbanos clásicos conocida como Magic 92.5 “Yo me sentí como en el banquillo de los acusados. Todos comenzaron a decirme que por qué estábamos haciéndoles transmitir anuncios del gobierno mexicano que no le interesaban a su audiencia, y que además eran traducciones literales que ni siquiera tienen congruencia”. Carrasco les explicó que era el Gobierno Federal el que decidía cómo utilizar esos tiempos oficiales, no las autoridades locales y mucho menos los grupos empresariales. Los radiodifusores se sinceraron y le dijeron: “Armando, estás tirando el dinero a la basura cuando pagas publicidad para que vayan a comer tu langosta u hospedarse en tus hoteles, cuando tenemos que pasar media hora de comerciales que además de que no tienen sentido, están diciéndote que el gobierno está capturando a narcotraficantes que cortan cabezas o disuelven cuerpos en ácido”. Lo que más les preocupaba era que tuvieran que estar transmitiendo comerciales de las campañas electorales en los que los partidos políticos acusaban a sus contrincantes de corrupción, enriquecimiento ilícito y hasta nexos criminales, creando una imagen deplorable de la política mexicana y los funcionarios de gobierno. “Ese tiempo no solo se está desperdiciando, está afectándonos, sobre todo cuando (los partidos políticos) empezaron a sacar sus trapos sucios, y como dicen, la ropa sucia se lava en casa. Los americanos no tienen que estarse enterando de si alguien promete acabar con la corrupción o cosas de ésas”, sostuvo Carrasco. Antes de concluir la reunión el Presidente de Cotuco Rosarito les pidió que contabilizaran cuánto equivalía el tiempo aire utilizado por el Gobierno Federal mexicano. Días después recibió un reporte que lo dejó sin aliento: 27 millones de dólares es el valor comercial del tiempo aire que cada año deben destinar las cinco estaciones fronterizas al tiempo oficial. “Me dolió mucho saber que mientras yo estoy peleando un presupuesto total de operación del Cotuco de un millón 800 mil pesos anuales, podría utilizar aunque sea unos cuantos de esos spots de radio para una campaña promocional para el público del sur de California”. “Ésas son estaciones que ya tienen su auditorio cautivo norteamericano, son clientes potenciales muy atractivos para los que estamos en el ramo turístico. Podríamos utilizar los tiempos oficiales para promover los eventos que tenemos como paseos ciclistas, festivales de playa, muestras gastronómicas, ofertas de hoteles, un sinfín de cosas”. Carrasco pensó que cambiar la forma en la que se utilizan estos tiempos oficiales dependía solamente de la voluntad del Gobierno Federal, por lo que no debía ser un proceso complicado. Tremendo error el suyo, muy pronto se dio cuenta de que sería necesario que todo el sector empresarial de Baja California creara todo un proyecto integral de desarrollo económico para lograr ser escuchado por el Gobierno Federal. Proyecto integral Aunque dijo no conocer sobre la reunión de Armando Carrasco con los empresarios estadounidenses ni su interés por cambiar la forma en que se utilizan los tiempos oficiales, Juan Manuel Hernández Niebla, presidente del Consejo Coordinador Empresarial de Tijuana (CCE), dijo estar totalmente de acuerdo con él. “Hemos visto que se utilizan estos espacios para campañas que denuestan y otras que al ser dobladas al inglés hasta pierden significado. Uno, la ropa sucia se lava en casa, y dos, el americano espera una mejor traducción porque no va a entender de qué estamos hablando”. La idea de modificar el uso de los tiempos oficiales forma parte de una agenda única conjunta de desarrollo creada por los 16 organismos que componen el CCE, en la que cada sector productivo propuso temas que para ellos eran coyunturales y se formaron cuatro categorías: desarrollo económico; seguridad; transparencia y rendición de cuentas y desarrollo social. Dentro de desarrollo económico se integraron propuestas para mejorar la imagen turística de Tijuana y Baja California, entre ellos el solicitar a las autoridades federales el uso de los tiempos oficiales de radio para la promoción turística. Esta propuesta la presentó el CCE al Gobernador y su gabinete en una junta de trabajo que sostuvieron en junio de este año, hay una reunión pendiente con los legisladores federales para plantear esta agenda conjunta que incluye la modificación del uso de los tiempos oficiales. Esta propuesta se define como una regionalización de los tiempos oficiales, para que los anuncios tengan un mejor impacto de acuerdo a las necesidades específicas de cada región del país. Esto debe ser aprobado por la Dirección General de Radio, Televisión y Cinematografía, entidad dependiente de la Secretaría de Gobernación. El largo camino burocrático En marzo de 2013, el diputado federal Juan Manuel Gastélum Buenrostro presentó ante el Congreso una iniciativa de Ley que hace eco a las propuestas de COTUCO Rosarito y del Consejo Coordinador Empresarial. Consta en reformar el Artículo 59 de la Ley Federal de Radio y Televisión, que establece, “las estaciones de radio y televisión deberán efectuar transmisiones gratuitas diarias, con duración hasta de 30 minutos continuos o discontinuos, dedicados a difundir temas educativos, culturales y de orientación social”, además, “de promoción turística”. También propone agregar el siguiente párrafo: “En los casos que dichas transmisiones se realicen en un idioma distinto al español, el vocabulario que se emplee en las traducciones, será de conformidad con la semántica y sintaxis correspondiente a cada idioma o dialecto, según se trate del lugar que cubra dicha transmisión”. El 30 de abril de este año, el diputado Gastélum solicitó a integrantes de la Comisión de Turismo un informe por escrito para conocer los avances, y le reportaron que su iniciativa está detenida. “Dicen que está para estudio, que está para equis, que está para ye. Que según está caminando, pero no me dicen para cuándo”. Ahora lo que teme es que su iniciativa quede archivada porque no se estudió en el periodo legislativo. “Pero si esto sucede yo los voy a exhibir, por eso están las cosas como están, porque se meten en dinámicas que no tienen nada que ver con el beneficio colectivo y nomás andan metidos en grillas”, afirmó Juan Manuel Gastélum. Se le preguntó al secretario de Gobierno del Estado de Baja California, Francisco García, si el proyecto ya había sido presentado en la federación, pero de su oficina respondieron que no tenían información respecto del proyecto, que habían preguntado a la particular del gobernador José Guadalupe Osuna Millán, pero tampoco pudieron dar razón. De igual manera, se habló con el diputador federal por Baja California, Chris López, secretario de las comisiones de Radio y Televisión y la de Gobernación en el Congreso de la Unión, quien manifestó que la propuesta de regionalizar los tiempos oficiales no ha llegado su escritorio, pero indicó: “El planteamiento suena lógico y productivo, es cuestión de revisarlo, pero no veo la razón de no apoyar; contactaré a los proponentes, porque eso puede avanzar”.