Protegido de Alcides Beltrones, ex funcionario de primer nivel en el gabinete del ayuntamiento de Tijuana, Alberto Macedo Sánchez, Coordinador General de Jueces Calificadores, por fin pudo ser echado de la nómina. El despido fue hace unos días. Primero, la versión de la destitución fue a razón de los tantos y tantos escamoteos que acumuló detrás de su escritorio. Pero en el gobierno de Bustamante por eso no se corre personal. Ahora se sabe que el director Jurídico, Roberto Ordorica, ya le “tenía ganas” y no pudo hacerlo hasta que Beltrones se fuera de los poderes del municipio. Pero Macedo no se conformó apoyado con una mujer de su familia, juntó a “líderes” del distrito 8 donde él radica. Y los motivó para que en bola amagaran al PRI, de que si no le devuelve el trabajo al pobre juez “tronarán” las brigadas del tricolor. La promesa por parte del partido-gobierno fue que pasando las elecciones el despedido podría recuperar su silla y sus privilegios de ser el juez de jueces.
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