El Congreso del Estado de Baja California aprobó la inversión de recursos públicos de los ayuntamientos de Tecate y Playas de Rosarito para la construcción de una planta generadora de energía eólica en La Rumorosa, proyecto encabezado por la empresa estadounidense Cannon Power Group, que pretende abastecer de electricidad a los sistemas de alumbrado público de ambos municipios, y vender el resto a maquiladoras extranjeras con tarifas inferiores a las establecidas por la Comisión Federal de Electricidad (CFE). Mediante un contrato irrevocable a 21 años, los gobernantes municipales y legisladores locales aprobaron la creación de una asociación público-privada que compromete a los siguientes siete ayuntamientos, a abastecerse de energía exclusivamente de la planta denominada Rumocannon. Este proyecto ecológico ha inquietado a funcionarios estatales y municipales, ya que de no cubrir con el pago puntual del consumo de electricidad, se solventará por medio de aportaciones federales que reciben ambos municipios. De igual manera, ha consternado a ambientalistas bajacalifornianos, quienes han interpuesto acciones legales en contra de otros proyectos de energía eólica en la región, pues temen, pueda tener un impacto negativo sobre la flora endémica de la región y sitios arqueológicos protegidos. Estos conflictos potenciales no fueron impedimento para la aprobación y desarrollo del proyecto, el cual va viento en popa. Particulares producen electricidad La producción privada de energía eléctrica comenzó a partir de las reformas al Artículo 27 de la Constitución Mexicana, efectuadas en 1992, durante el sexenio de Carlos Salinas de Gortari, facultando a particulares la producción de electricidad para uso propio, para venta a empresas o entidades gubernamentales, y para la exportación de energía generada en territorio nacional. Con el paso de los años y el desarrollo de diversas tecnologías para la generación de electricidad, la participación de empresas nacionales y extranjeras fue aumentando. Actualmente el 25 por ciento de la electricidad producida a nivel nacional, proviene de productores independientes, de acuerdo con la Comisión Estatal de Energía. La primera planta de producción de energía eólica en el estado fue construida en el poblado de La Rumorosa por el Gobierno del Estado de Baja California, con recursos estatales y federales. El proyecto, inaugurado en 2010, tuvo un costo de 350 millones de pesos y cuenta con cinco generadores que producen un total de 10 megawatts, energía suficiente para mantener el funcionamiento del sistema de alumbrado público de Mexicali, así como un excedente que se destina a los hogares más pobres de esa ciudad. El segundo proyecto de este tipo en ser aprobado en la entidad, es encabezado por la trasnacional estadounidense Sempra Energy, bajo el nombre Energía Sierra Juárez. Esta planta eoloeléctrica contará con 52 turbinas que generarán 156 megawatts, suficientes para abastecer alrededor de 65 mil hogares. Como su nombre lo indica, se ubicará en el sistema montañoso de la Sierra de Juárez, entre los municipios de Ensenada y Tecate. La energía generada por esta planta será destinada exclusivamente para exportación al vecino Estado de California. Rumocannon es el tercer y más reciente proyecto eólico en recibir la aprobación para instalarse en Baja California. Una iniciativa de Cannon Power Group, empresa estadounidense con sede en San Diego, California, que ha realizado más de 30 proyectos de energía renovable alrededor del mundo, que generan un total de 4 mil 150 megawatts. La idea inicial para esta planta eólica surgió en 2004, con el objetivo de producir electricidad para el mercado californiano. Con el tiempo los planes cambiaron, y Cannon decidió entrar en el mercado mexicano bajo el esquema de autoabastecimiento, que consiste en asociarse con compañías privadas o entidades gubernamentales que consumen grandes cantidades de energía eléctrica para formar una asociación comercial, con el fin de generar su propia electricidad. El 2 de diciembre de 2010, Rumocannon obtuvo el título de permiso de autoabastecimiento de energía eléctrica E/873/AUT/2010, por parte de la Comisión Reguladora de Energía, entidad federal responsable de la evaluación y aprobación de proyectos energéticos. En este documento de nueve páginas, se establece que son dos las empresas que aprovecharán la energía generada: Nellcor Puritan Bennett México, S. A. de C. V. y Especialidades Médicas Kenmex, S. A. de C. V., ambas de capital extranjero. La planta proyectada estará conformada por 36 aerogeneradores con capacidad de 2 megawatts cada uno, sumando una capacidad total de 72 megawatts. En un comunicado emitido por Cannon Power Group, la empresa manifestó su intención por expandir gradualmente su capacidad hasta los 300 megawatts. Desde el inicio del proyecto, el gobierno municipal de Tecate mostró interés en sumarse a la lista de socios de Rumocannon. Durante la gestión del alcalde Donaldo Peñalosa Ávila se analizó la posibilidad de apegarse al esquema de autoabastecimiento, pero fue el XX Ayuntamiento el que aprobó y autorizó la instalación de la empresa energética en el Ejido Gustavo Aubanel Vallejo, muy cerca de la planta eólica del Gobierno del Estado. Dos años después, el 20 de diciembre de 2012, el Congreso de Baja California aprobó el Dictamen 207, que permite la conformación de una asociación público-privada entre Rumocannon, el municipio de Tecate y Playas de Rosarito, entidad pública que se sumó al proyecto electroeólico para abastecerse de electricidad para su sistema de alumbrado público y sus edificios e instalaciones públicas, con tarifas inferiores a las establecidas por la CFE. La aprobación del Congreso local fue requerida porque el contrato entre los municipios y Cannon excede los 21 años, lo que equivale a tres administraciones municipales, además, porque el convenio requería de una garantía de pago, en caso de que los ayuntamientos en turno no cuenten con la liquidez suficiente para cubrir el importe de la energía eléctrica consumida. En este caso se determinó establecer las aportaciones federales como una fuente alterna de pago. El Artículo 2 del Dictamen, del cual ZETA obtuvo una copia, establece: “Se aprueba la afectación del derecho y los flujos de recursos derivados de las participaciones presentes y futuras que en ingresos federales le correspondan a los municipios de Tecate y de Playas de Rosarito, necesarios para cumplir con las obligaciones de pago que deriven de los Contratos de Asociación Público-Privada que se celebren al amparo del proyecto eólico, hasta por un monto equivalente del consumo de energía eléctrica de los municipios de Tecate y de Playas de Rosarito, a la Comisión Federal de Electricidad en la tarifa 5A durante el año anterior”. Los riesgos del proyecto Para el director general de la Comisión Estatal de Energía, David Muñoz Andrade, el proyecto de Rumocannon tiene el potencial de ser un detonador de la producción particular de energía eólica en la zona de La Rumorosa, ya que de ser un éxito, motivaría a otras empresas a invertir en este corredor privilegiado, por sus fuertes corrientes de viento. Pero a la vez existe el riesgo de que no sea bien implementado, y un fracaso sería un gran detractor del desarrollo de energía renovable, ya que otras empresas no tendrán la certeza de que sus proyectos pueden funcionar. Muñoz recuerda que cuando el Gobierno del Estado planeaba la construcción de su parque eólico, la Comisión a su cargo realizó un análisis de oportunidades y riesgos, evaluando minuciosamente los factores que podrían llevar al proyecto al éxito o al fracaso. A pesar de su experiencia, la Comisión de Energía no fue consultada por funcionarios de los ayuntamientos de Tecate ni de Playas de Rosarito, antes de someter el proyecto a aprobación. “No se acercaron con nosotros ni siquiera para pedir una opinión”, lamentó Muñoz Andrade, quien tiene a su cargo un equipo de ingenieros especializados en energía eólica, dispuestos a colaborar con los organismos públicos que así lo requieran. “Es muy desafortunado que estén desaprovechando ese conocimiento” agregó. Afortunadamente, el Congreso del Estado incluyó en la recientemente promulgada Ley de Energía Renovable, la obligatoriedad de solicitar a la Comisión Estatal de Energía un dictamen técnico antes de expedir una licencia de construcción. Ese requisito podría marcar la diferencia entre un proyecto exitoso y un fracaso económico. Muñoz citó una serie de ejemplos de parques eólicos fracasados en países como España y Alemania, así como en estados del vecino país, como Texas y California, incluso proyectos recientes en Oaxaca que han presentado problemas en su diseño, o que constituyen un riesgo para la población, al establecerse cerca de viviendas o carreteras. Asimismo, manifestó que el predio donde se instalará Rumocannon se encuentra ubicado dentro del Parque Nacional Sierra de Juárez, que alberga sitios arqueológicos y es hogar para flora y fauna protegidas, por lo que deberá acatar los lineamientos federales establecidos en el Manifiesto de Impacto Ambiental aprobado por la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales. Ambientalistas de la asociación ciudadana Terra Peninsular, comparten la preocupación del Comisionado de Energía y han interpuesto una denuncia ante el Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa, solicitando la nulidad del Manifiesto de Impacto Ambiental que SEMARNAT aprobó a Energía Sierra Juárez, proyecto de Sempra Energy. Los motivos por los que se solicitó la nulidad del manifiesto, son porque, consideran, se otorgó sin contar con “información y elementos técnicos suficientes para evaluar el impacto ambiental del proyecto Energía Sierra Juárez, y mucho menos para autorizar al mismo”. Horacio González explicó que se tiene la misma incertidumbre ante el proyecto Rumocannon, ya que se instalará en una zona cercana al predio de Sempra. Funcionarios defienden proyecto Para el coordinador de gobierno de la Secretaría General de Playas de Rosarito, Héctor Huerta, el proyecto de autoabastecimiento de energía eólica es una doble ventaja para la población, ya que además de ser una alternativa ecológica, representará ahorros cada vez más cuantiosos. De acuerdo con sus estimaciones, el ahorro inicial podría ser del 4 por ciento del consumo anual durante el primer año del proyecto, e ir aumentando gradualmente hasta ahorrar del 13 al 14%, lo que representaría un ahorro aproximado a 1.30 millones de pesos. El ahorro estimado para Tecate sería del 12 al 13% de su consumo anual, que equivale a 1.13 millones de pesos. Cuestionado sobre la posibilidad de perder las participaciones federales por no contar con liquidez suficiente para efectuar los pagos de luz eléctrica, Huerta señaló que ése no es factor de riesgo para las finanzas municipales. “No vamos a gastar lo que no estamos consumiendo”, precisó. El funcionario rosaritense sostuvo que al ser el gobierno de Playas de Rosarito socio en Rumocannon, se podrá convenir un contrato flexible ante la posibilidad de que se retrase algún pago periódico, y de esa manera, no afectar las participaciones federales. Por su parte, el diputado Max García, legislador local que promovió la Ley de Energía Renovable, sostuvo que los proyectos de energía eólica representan “un gran avance”, y exhortó a la población a dejar de percibir el tema de la privatización de la producción de energía eléctrica como un tabú. “Yo en lo particular creo que ya se debe abrir al libre mercado la generación de energía, que haya más competencia, y no solo en el tema del autoabastecimiento”, precisó. La trayectoria de Cannon Power Group Compañía con sede en San Diego, California, Cannon Power Group desarrolló una serie de proyectos de energía eólica en el suroeste de los Estados Unidos durante la década de 1980, generando un total de 128 megawatts de electricidad en los cinco parques que construyó, operó y posteriormente vendió a la compañía Florida Power & Light. En 1993 construyó un parque electroeólico con capacidad de producción de 40 megawatts en la India; otro de 15 megawatts en Suiza, y un gran parque de 250 megawatts en Italia, el cual terminó vendiendo a un antiguo socio comercial. Durante esa década encabezó tres proyectos más en California, uno en España y otro en Turquía para otras empresas eléctricas privadas. En la década pasada continuó desarrollando parques eólicos en su país. Construyó dos de 41 megawatts en California que posteriormente vendió a la empresa Shell Wind Energy, y dos más en el Estado de Washington, con capacidades de 137 megawatts y 262 megawatts. Asimismo, desarrolló el proyecto para una planta de 250 megawatts en Polonia, pero terminó vendiendo sus derechos de desarrollo. En Baja California Cannon invirtió desde 1992 en el desarrollo de una planta de energía eólica en La Rumorosa, hasta que 15 años después, en 2007, vendió los derechos de desarrollo a la empresa Sempra Energy, proyecto ahora conocido como Energía Sierra Juárez.