Cada año en Tijuana se genera un promedio de 96 mil infracciones de tránsito. Registros de la Dirección de Tránsito Municipal dan cuenta que las principales razones para aplicar las sanciones son: Obstrucción de accesos peatonales, estacionarse en doble fila o en lugares indebidos, no usar cinturón de seguridad, conducir con aliento alcohólico, hablar por celular o bien, enviar mensajes en ese tipo de dispositivo. Por dicho concepto, en 2011 el Ayuntamiento captó 22 millones 248 mil pesos, mientras que a octubre del presente año, ha recabado 20 millones 715 mil pesos, según el recaudador de Rentas en el municipio, Luis Javier Covarrubias Hays. De acuerdo a la Asociación Mexicana de Agentes, Seguros y Fianzas (AMASFAC), el 90 por ciento de los accidentes viales que se presentan en la ciudad tienen como base una violación al Reglamento de Tránsito y Control Vehicular Municipal, lo que representa un peligro constante para los conductores. Valga decir que el año pasado, Cruz Roja de Tijuana brindó 5 mil 855 servicios. De esa cifra, 5 mil 841 fueron atenciones por atropellamientos, volcaduras y choques. En 2012 la cifra se aproxima a la del año anterior, con 5 mil 216 atenciones hasta el mes de noviembre. ZETA hizo un recorrido por las principales vialidades de la ciudad. Se detectó que las infracciones más comunes que cometen los tijuanenses, son hablar por radio o teléfono celular, enviar mensajes de texto al conducir, hacer cambios intempestivos de carril, e ir a exceso de velocidad. Mientras que los choferes del transporte público no solo hablan por teléfono y conducen a la vez; se estacionan en lugares indebidos y hacen dobles fila, obstruyendo el tránsito vial y hasta el peatonal. Por otro lado, los fines de semana que la Secretaría de Seguridad aplica el alcoholímetro, la Comandancia Regional “Margarito Saldaña” (Libramiento Salvador Rosas Magallón) atiende a 200 personas diarias, mismas que son remitidas por tener aliento alcohólico. La multa por manejar en estado inconveniente es de 3 mil 740 pesos, más el costo del certificado médico, que es de 2 mil 026 pesos, a los que se adhieren 400 pesos del remolque de la unidad, para un total de 6 mil 166 pesos. Testimonios Son las 10:00 horas del miércoles 21 de noviembre y un ciudadano ya acudió a la Comandancia Regional “Margarito Saldaña” a pagar una multa que le aplicaron por conducir y hablar por teléfono a la vez. “Fue ayer cuando me multaron, iba hablando por teléfono, venía sobre el Bulevar Simón Bolívar e iba a tomar la Vía Rápida cuando estaba por terminar la llamada. En el carril contrario se encontraba un agente en su motocicleta y me detuvo. Me pidió la licencia y tarjeta de circulación, me explicó que había cometido una infracción por utilizar el móvil”, detalló a ZETA. La persona prosiguió con su relato, para después alejarse del lugar: “La juez me explicó que la multa no era por ir hablando por teléfono, sino por no sostener el volante con ambas manos. Que esa infracción tenía una multa de aproximadamente 300 pesos, pero que haría una consideración y pagué como 140 pesos”. El reportero se acercó con la cajera del lugar, quien expresó que las multas por el uso del celular al conducir, rondan los 900 pesos; pero si la persona va escribiendo textos, entonces sube a 2 mil 700 pesos. La empleada municipal fue más allá, y dijo que los fines de semana, cuando las autoridades municipales instalan el alcoholímetro, a las instalaciones llegan hasta 200 personas diarias con aliento alcohólico. “La infracción por ebriedad tiene un costo de 3 mil 740 pesos, y el costo del certificado médico 2 mil 26 pesos, lo que da un total de 5 mil 766 pesos; aparte hay que pagar el remolque de la grúa, 400 pesos más. Muchas personas no traen dinero, van y sacan dinero de Elektra, Coppel o esos lugares que les prestan sin mucho problema”, apuntó. Fuera de las instalaciones, el corresponsal tuvo la oportunidad de conversar con un agente vial sobre el tema, quien aseveró que en el caso de las llamadas telefónicas, la mayoría de las veces los conductores ven a la autoridad y no cuelgan la llamada, por lo que se procede a la infracción. “Se ponen en una actitud de reto, y cuando les preguntamos por qué razón no dejan el teléfono, responden que solo porque sí. Es entonces que se extiende la boleta”, finalizó. Lo más violentado De acuerdo a información de la Secretaría de Seguridad Pública, los artículos más violentados son el 59, fracciones I, II, III, IV. Se prohíbe estacionar vehículos en los siguientes lugares: Dobles filas; prohibiciones de estacionamiento; entrada y salida de vehículos; entrada de bomberos; ascenso y descenso; vías de circulación; lugares donde se obstruya la visibilidad de señales de tránsito; sobre cualquier puente; en arenas de cruce de transeúnte; en zonas tarifarias; en zona de carga y descarga; sentido contrario; simulando fallas mecánicas; así como a la de guarniciones pintadas de color rojo. Artículo 93, fracciones II y III, por no respetar los señalamientos gráficos. Además del Artículo 95, que hace referencia a que los peatones y conductores de vehículos deberán obedecer las indicaciones de los semáforos. Miles mueren por accidentes Según información de la Cruz Roja en Tijuana, anualmente se atienden más de 5 mil accidentes viales, siendo el choque y atropellamiento los más comunes. En el mundo cada año mueren más de 1.2 millones de personas por dicha situación; 35 millones más de conductores sufren lesiones en las vialidades. Acorde con el Informe Mundial sobre la Seguridad Vial, publicado por Organización Mundial de la Salud en 2009, el 62 por ciento de las defunciones por accidentes de tráfico a nivel mundial ocurren en diez países, donde México ocupa el séptimo sitio. “Los accidentes viales son la primera causa de muerte en jóvenes mexicanos entre los 15 y 29 años de edad. Más de 24 mil personas mueren al año en México por los accidentes de tránsito, de los cuales 8 mil son jóvenes (CENAPRA 2008); 16 mil 852 son por accidentes de vehículo; 7 mil 269 atropellados. Es la segunda causa de orfandad. Es la décima causa de muerte en el país”, establece la Cruz Roja en su portal de internet. La institución pronostica a nivel internacional y para 2020, que los choques ocuparán el tercer lugar en la tabla de muerte e incapacidad, por debajo de infartos y por arriba de la tuberculosis, guerras e infecciones respiratorias. Cabe mencionar que de acuerdo a la Delegación Regional del IMSS en Baja California, el Servicio de Urgencias del Hospital General Regional Número 1 reportó que de enero a octubre de 2012 se atendió de diversas lesiones a 668 pacientes, por accidentes en vía pública. Aunque las estadísticas del Instituto no especifican si los accidentes en vía pública son atropellamientos, choques, volcaduras, caídas o lesiones en asaltos, cabe recordar que el nosocomio en cuestión se encuentra ubicado en la Tercera Etapa del Río, punto cercano al Bulevar 2000 y las vías rápidas Oriente y Poniente, zonas donde, según el Consejo Estatal para la Prevención de Accidentes y Lesiones de Baja California, se registra un elevado número de accidentes vehiculares. Como ejemplo, en febrero de 2011 hubo 3 mil 063 incidencias en dichas vías, incluida la Avenida Internacional, Calle Segunda y accesos a Playas de Tijuana. Pocos con seguro vial Para Óscar Bolaños, director del Distrito Pacífico Norte de la Asociación de Agentes de Seguros y de Fianzas, invariablemente cuando se presenta un accidente vehicular, existe una violación al reglamento: “Hubo algún descuido, exceso de velocidad, pero siempre hay una infracción”. Agregó que como mexicanos no se tiene una conciencia de contratar un seguro en caso de que se presente una eventualidad al conducir. “Las personas que adquieren una póliza lo hacen por obligación, por ejemplo las personas que contratan un seguro básico y a la vez adquieren la póliza para cruzar a Estados Unidos, lo hacen porque del otro lado es obligatorio; mientras que aquí no es así y entonces lo dejan de lado. El consultado complementó: “Tener un servicio de este tipo que cubra por lo menos los daños a terceros, te va a apoyar a la hora de un accidente. La gente debería tomar conciencia y ver que en realidad no es un gasto, sino una inversión, porque dependiendo de la cobertura serán los servicios que se tengan. Por ejemplo, contarían con defensa jurídica y la atención de los afectados”. Miles de sanciones Por su parte, el jefe de Tránsito Municipal, José Raúl Meléndrez Meléndrez, externó a ZETA que en promedio levantan 2 mil multas por diversas violaciones al reglamento municipal a la semana. “Las infracciones que nos interesa mucho combatir son las relacionadas con el no uso del cinturón de seguridad, el exceso de velocidad, así como hablar por teléfono celular al conducir. Al hacerlo podemos prevenir accidentes”. De hecho, dijo, el reglamento contempla una sanción desde el momento en que no se llevan las dos manos al volante, por ejemplo, al abrazar a una persona se va cometiendo una infracción, igual sucede si el conductor va cambiando de estación de radio. Los costos de las multas más comunes van de 1 (63.33 pesos) a 15 (949.95 pesos) salarios mínimos, en tanto que las penas especiales, como hablar por teléfono o textear, oscilan entre 15 y 45 (2 mil 849 pesos) salarios mínimos, dependiendo la gravedad del asunto. “Implementamos un grupo vial con cuatro oficiales, y tan solo en el mes de octubre registramos 304 boletas por uso del teléfono y generamos mil 813 boletas por falta de uso del cinturón. El teléfono es recurrente, pero no es fácil detectar a las personas porque cuando los ve el oficial, esconden el aparato, mientras que el cinto es muy obvio. A lo largo del año implementamos operativos especiales para abatir estas faltas”, declaró Meléndrez. Según información de la dependencia y como resultado de la aplicación del programa de alcoholimetría (noviembre de 2011), 12 mil 760 conductores fueron sometidos a examen de alcoholemia en Tijuana para detectar los niveles del alcohol en la sangre. De ese total, 8 mil 156 manejaban con aliento alcohólico pero no tuvieron sanción administrativa, mientras que 4 mil 604 (en estado de ebriedad) se canalizaron al Ministerio Público del Fuero Común. El reporte de la autoridad da cuenta que en las primeras 33 semanas de 2011, en comparación con el mismo periodo en 2012, se observó una disminución del 49 por ciento en accidentes relacionados con el alcohol (de mil 243 a 627); en tanto, las personas turnadas por ebriedad reflejaron una reducción en 46 por ciento (de 268 a 144), a la vez de disminuir las muertes en accidentes de tránsito relacionadas con alcohol en un 63 por ciento.
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