Debido al incremento de consumo de drogas en Baja California Sur, la delegación de la Procuraduría General de la República ha implementado, en coordinación con la Secretaría de la Defensa Nacional, un operativo aéreo antidroga. El objetivo es vigilar de cerca las ciudades y zonas agrícolas cercanas, y buscar sembradíos de droga, así como distinguir actividades ilícitas desde el aire. La Procuraduría cuenta con un helicóptero que sobrevuela a baja altura por las diferentes colonias donde se han detectado irregularidades; también se inspeccionan zonas vulnerables donde se puede ingresar droga al estado como son las zonas costeras. José Bernal Romero, delegado de la PGR en Baja California Sur, comenta que el trabajo no lo hacen solos, sino coordinados con la tercera zona militar. “Ese helicóptero está integrado a la Procuraduría General de la República, tiene como finalidad supervisar las áreas más conflictivas del estado conjuntamente con SEDENA, estamos llevando a cabo la supervisión de algunos lugares donde la topografía no permite que los carros puedan llegar,” resaltó el delegado. Bernal mencionó que recientemente en el municipio de Mulegé –específicamente en la localidad de Guerrero Negro– se detectó un plantío de marihuana en una zona no apta para cultivo, esto gracias al operativo aéreo. A partir del 25 de julio iniciará, junto con la SEDENA y Secretaría de Marina Armada de México, un operativo de supervisión y detección de droga en toda la geografía en el estado que va desde Guerrero Negro hasta el municipio de Los Cabos.
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