La primera presea mexicana fue obtenida por los sanfelipenses Roberto Ahumada y José Ignacio Navarro, con bronce en la final de doble par de Remos cortos varonil. Luego siguió Diego Camacho en relevo 4x100 metros libres mixto, y Adriana Castillo con par de preseas en Tiro con arco. La canoísta Nicol Guzmán “va por cuatro oros”.
Con 97 años posicionados en Baja California, la familia Cetto ha sabido balancear entre tradición e innovación, y un legado que data desde Trento, Italia, ahora en manos de generaciones que abogan por un vino al alcance de todos, “llegar al punto en el que no importa en qué parte del mundo estés, si tú preguntas por un vino mexicano, piensen automáticamente en alguno de L.A. Cetto”
“La violencia siempre es una posibilidad en mi obra, pero también en la vida. Ahora mismo puede alguien terminar con mi vida si tiene un arma y tiempo libre”, expresó a ZETA el autor de “Una cabeza rodando en el desierto”