Desde la madrugada del 21 de agosto, cuando se incendió el yate de lujo “Fortius” en el Área de Protección de Flora y Fauna Balandra, la autoridad manejó con total hermetismo el incidente. Incluso, el Gobierno de Baja California Sur trató de justificar el daño ecológico como “un accidente que le puede pasar a cualquiera”.
Desde la madrugada del 21 de agosto, cuando se incendió el yate de lujo “Fortius” en el Área de Protección de Flora y Fauna Balandra, la autoridad manejó con total hermetismo el incidente. Incluso, el Gobierno de Baja California Sur trató de justificar el daño ecológico como “un accidente que le puede pasar a cualquiera”.