Traía toda la barba pintada de lipsticks de tonos diferentes, huellas de fugaces o bien plantados besuqueos. Su camisa antes blanca, parecía como de mecánico, toda chamagosa y arrugada por tanto y tantas simpatizantes apasionadas que lo tocaron y abrazaron. Pero eso sí, sudada y desabotonada dejando ver su pelo en pecho. Como quiera se […]