El refuerzo con elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), Secretaría de Marina Armada de México (Semar) y de la Guardia Nacional (GN), se dio durante la primera semana de marzo, tras registrarse feroces balaceras entre grupos delincuenciales, ataques a representantes de autoridad, muertes y alardes de poderío de miembros del crimen organizado.