El verdadero género oprimido Trabajaba en una tienda de ropa y una señorita me preguntó: “Por qué la falda cuesta 10 y el calzón 30?”. Yo le respondí: si gusta le subo la falda y le bajo el calzón… ¡y zas! A la delegación por acoso. Fui a McDonald’s a desayunar y le pregunté a […]