“Pero vaya, con el alboroto de la elección interna de Morena, las elecciones estatales en el Estado de México y en Coahuila en el 2023, y la propia y adelantada sucesión presidencial que en Morena tiene un reguero de corcholatas, tener de nueva cuenta a Enrique Peña Nieto como el némesis de Morena, puede, como en el 2018, resultar redituable en términos político electorales”.