El hombre sin vida encontrado en el fraccionamiento San Marcos, en Mexicali, el lunes 24 de noviembre, murió por tuberculosis y no por una sobredosis o cirrosis, como lo había informado la fiscal general del estado Ma. Elena Andrade Ramírez.
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El director del Servicio Médico Forense, César González Vaca, detalló que la víctima se trataba de un masculino de entre 45 a 50 años de edad, mismo que no contaba con huellas de violencia a simple vista y que, tras la necropsia correspondiente, se pudo determinar que el hombre falleció por un choque séptico derivado de la tuberculosis.
“En el tórax es donde encontramos datos importantes sobre todo en los pulmones; en los pulmones encontramos edema pulmonar, los pulmones están inflamados y también inician indicios de neumonía y una franca tuberculosis; todo esto nos llegó a determinar como causa determinante de muerte un choque séptico, es una infección generalizada por mal cuidado de heridas o, en este caso, un proceso infeccioso como es la tuberculosis”.
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Por otro lado, dijo que, cuando se le aplicó el examen toxicológico, salió positivo a varias sustancias nocivas; sin embargo, ninguna de estas le provocó la muerte.
Hasta el momento, el hombre sigue en calidad de desconocido; no obstante, cuenta con diversos tatuajes que podrían servir como señas particulares para su futura identificación.
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Fue el pasado martes 25 de noviembre que la fiscal general del estado Ma. Elena Andrade Ramírez comentó que la víctima había fallecido por cirrosis o una sobredosis, asegurando que dicha información se la había compartido el Servicio Médico Forense.
Derivado de esto, después de meses, SEMEFO salió a brindar atención a los medios de comunicación para aclarar la situación con el cuerpo encontrado en el fraccionamiento San Marcos.
