El gobierno mexicano busca que Estados Unidos financie la mitad de la ampliación de la planta de tratamiento de agua residual de San Antonio de Los Buenos, cuya inversión requerida aún se desconoce.
La intención de duplicar la capacidad de la planta -de 800 a mil 600 litros por segundo- fue anunciada por Alicia Bárcena, secretaria del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat); quien calificó como prioritario el proyecto, aunque no está contemplado en el Acta 328, ni en el Memorando de Entendimiento México-EUA para la atención sanitaria en Tijuana-San Diego, el cual se firmó apenas el 24 de julio de 2025. Contempla 13 proyectos estratégicos de infraestructura hídrica y de saneamiento, con una inversión binacional de 693 millones de dólares en los próximos dos años.
Estados Unidos ya ha dado dinero para completar obras del Fondo de Infraestructura Ambiental Fronteriza (BEIF por sus siglas en inglés), Recursos de la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA) “que han financiado obras del Acta 328 y con eso se pretende que se financie parte de la ampliación de la planta de San Antonio de los Buenos”, indicó la Semarnat a ZETA.
Si bien, la dependencia federal no estimó el año en que comenzaría la ampliación de la planta de tratamiento, señaló que ese trabajo se realizará cuando se autoricen los estudios técnicos. “Podría concluir en 10 meses y empezar a funcionar en 13”.
La planta de tratamiento de San Antonio de Los Buenos, en el sur de Tijuana, comenzó a operar hace aproximadamente mes y medio, luego de que fue rehabilitada por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), y la inversión pública federal del proyecto subió de 650 a 800 millones de pesos por obras complementarias.
Ya se llevó a cabo la entrega-recepción de la Sedena a la Conagua. “Ahorita Conagua está en la parte concluyente de la estabilización y de la entrega a la CESPT, aunque nosotros ya tenemos personal operando la planta”, dijo Jesús García Castro, director de la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana (CESPT), quien detalló que todavía falta concluir la entrega-recepción del predio para que pueda ser susceptible de recibir recursos federales.
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Con los compromisos hechos por la secretaria Bárcena se hará un segundo módulo, para poder tener una cobertura del 100 por ciento del saneamiento de Tijuana y Rosarito. Lo que se tiene ahorita es como una primera fase y que es “un gran paso” en el saneamiento de las playas de Tijuana y Rosarito, y obviamente del sur de California, aseguró el funcionario.

Sin embargo, la puesta en operación de la planta de tratamiento todavía no se refleja en una reducción constante de la contaminación en el Océano Pacífico en el punto de descarga de las aguas tratadas, pues los niveles de enterococos (materia fecal) siguen excediendo lo permitido, según el monitoreo de la organización civil Proyecto Fronterizo de Educación Ambiental.
Desde el 23 de mayo, ese punto identificado como Playa Blanca tuvo en tres ocasiones niveles más bajos de materia fecal de los regularmente registrados:
El 13 de julio tuvo 683, Número Más Probable (NMP) de enterococos por 100 mililitros; el 17 de julio, 414 NMP; y el 24 de julio 650, NMP. Mediciones que exceden por mucho el límite de 200 NMP permitido por la norma; y en el último muestreo disponible del 31 de julio, se registraron 10 mil 462 NMP de enterococos.
Aun cuando la rehabilitación de la planta a 800 litros por segundo fue hecha por Sedena conforme a lo establecido en el Acta 328, organizaciones civiles ya habían alertado que la capacidad era insuficiente.
Rosario Norzagaray, gerente de residuos marinos en Costa Salvaje, consideró que el recurso y el tiempo en que se proyectó la rehabilitación en el sexenio pasado delimitó la capacidad de la planta para que quedara en 800 litros. Esa capacidad, dijo, es inferior a los mil 200 litros contemplados en el diseño original de finales de la década de 1980, cuando Tijuana tenía una población cercana a los 900 mil habitantes.
A propósito, Margarita Díaz, directora de Proyecto Fronterizo de Educación Ambiental, recordó que cuando inició la rehabilitación de la planta de San Antonio de Los Buenos en la administración pasada, se argumentó que quedaría en 800 litros porque se duplicaría la capacidad de la planta de tratamiento internacional ubicada en suelo estadounidense.
Tal argumento plantea la necesidad de que México tenga que construir una infraestructura para regresar y bombear el agua tratada para su reúso. “¿México tiene dinero para hacer eso?”, o Estados Unidos la va a limpiar y luego nos la venderá, interrogó la activista, quien expresó dudas sobre los criterios de tiempo en la planeación del gobierno mexicano.

11 PROYECTOS DE LADO MEXICANO ESPERAN FINANCIAMIENTO
Del Memorando para atender la contaminación de aguas residuales en Tijuana-San Diego, firmado por la titular de Semarnat, Alicia Bárcena, y el administrador de la EPA, Lee Zeldin, destacan 11 proyectos pendientes por hacer del lado mexicano, por un monto global de 93 millones de dólares, que recibirán financiamiento hasta 2026 y 2027.
Para el próximo, año se contempla asignar 46 millones de dólares para la construcción de la rehabilitación del Colector Insurgentes, de las PB Matadero y Los Laureles 2, del Interceptor Poniente, del Interceptor Oriente, del Colector Carranza; y el suministro de energía de respaldo a la PB-1.
En 2027, se asignarán 47 millones de dólares para hacer mejoras a las plantas de tratamiento Arturo Herrera y La Morita; la fase II del Colector Internacional; la rehabilitación de la tubería de impulsión Antiguo; el cárcamo de Bombeo y Línea de Impulsión del Cañón del Sainz a la Planta Arturo Herrera; y el entubamiento del canal abierto entre PB-1 y PTAR SAB, según informó Semarnat.
El director de la CESPT, Jesús García Castro, y el subdirector técnico de la paraestatal, José Díaz Verdugo, detallaron que la Comisión ya hizo el diseño, el presupuesto y el proyecto técnico en la rehabilitación del Colector Insurgentes que tendrá un presupuesto de 24.81 millones de dólares (mdd); de Los Laureles 2 -ubicado por el Cañón de los Alacranes- y la modernización de la planta del Matadero (6.95 mdd); del Interceptor Poniente (1.4 mdd) y del Interceptor Oriente (3.4 mdd). Con esos trabajos su avance es del 10 por ciento y se está a la espera de que el gobierno federal envíe los fondos para su construcción.
Igualmente, la fase 2 del Colector Internacional en el que se cambiará un tubo que data de 50 años, “ya está el proyecto ejecutivo, está validado en Hacienda y nada más estamos en espera de que lleguen los 9.34 mdd para ejecutarlo”, indicaron.
A decir de Díaz Verdugo, el agua residual tratada en las plantas de La Morita y Arturo Herrera cumple con la nueva norma ambiental. El proyecto para retirar esa agua tratada del Río Tijuana costará 24 mdd, de recursos no reembolsables del NADBank, la EPA y el gobierno estatal, y lleva 30 por ciento de avance. En este proyecto también se rehabilitará el cárcamo del Cañón del Sainz, por el orden de 4.45 mdd, con recursos del Bono Verde y de la CESPT.
El director de la CESPT aseguró que la institución a su cargo tiene “capacidad sobrada” técnica y operativa para llevar a cabo las obras pendientes del Acta 328, una vez que se cuente con el recurso federal. “Hay la experiencia y el personal capacitado para hacerlo, realmente lo que tenemos de contratiempo es el que nos asignen los recursos”, aseveró.
Margarita Díaz expresó dudas sobre si la CESPT y Conagua cuenten con el suficiente personal técnico y los materiales para hacer todas las obras antes de la fecha límite, que es el 31 de diciembre de 2027. El proceso en que la CESPT envía información a la Conagua para validar los proyectos y se gestionen los recursos lleva mucho tiempo.
Se desconoce si habrá sanciones para México si no cumple con los proyectos del Memorando. Los americanos van cumpliendo sus fechas, incluso las adelantaron de forma impresionante, mientras “nosotros vamos atrasados”, señaló.

Según el Memorando, cada cuatro meses la CILA se reunirá para revisar el cumplimiento de los acuerdos, y se creará una nueva minuta a más tardar el 31 de diciembre de 2025, en la que se sumarán acciones como: la construcción de un emisario submarino en Tijuana, crear un sistema binacional de monitoreo en tiempo real del flujo y calidad del agua, así como la ampliación de la planta de San Antonio de Los Buenos.
Rosario Norzagaray confió en que el gobierno mexicano cumplirá con los trabajos al ser un acuerdo binacional, y al haber una sociedad civil que esté exigiendo resultados.
SEGUIRÁN ESCURRIMIENTOS
Ambas activistas consideraron positiva la firma del Memorando al considerar que es la ruta correcta para reducir la contaminación, sin embargo, advirtieron que el problema no quedará resuelto del todo si persisten los escurrimientos de agua residual al Río Tijuana, por la falta de planeación en el crecimiento de la ciudad.
Además del problema del agua residual, la cuenca del Río Tijuana arrastra residuos sólidos urbanos y de manejo especial, como plásticos de todo tipo, particularmente llantas.
“Son tres puntos muy claros que hay que atender, y tengo entendido que en este Memorando de entendimiento uno de los puntos es ponerse de acuerdo cada cuánto tiempo se va a limpiar la canalización”, que es el reflejo de las condiciones de nuestra ciudad y que amerita una verdadera coordinación entre los gobiernos municipal, estatal y federal, declaró Rosario Norzagaray.
Respecto a los escurrimientos, Díaz Verdugo admitió que en época de sequía escurren en promedio mil 300 litros por segundo al Río Tijuana, de los cuales alrededor de 600 litros corresponden a agua residual.
Los otros 700 litros por segundo son agua freática, agua limpia de las plantas de tratamiento Arturo Herrera y La Morita, agua que viene de Tecate y de las plantas de Coca Cola, Hyundai y Samsung. Con las obras del Acta 328 la intención es que se reduzcan 550 litros por segundo de escurrimientos; es decir, 90 por ciento de los 600 que escurren por las compuertas.
“Es imposible que lo deje seco, porque al final del día tienes muchos usuarios que de repente están tirando al río. Eso se tendrá que habilitar un programa para ir detectando ya los problemas donde están descargando, pero ya serían gastos mucho muy manejables que no nos deben de dar ningún problema y para los cuales estamos preparados en la planta de bombeo PB CILA, para poderlo meter de vuelta al colector y que dejen descubrir hacia el lado americano”, reconoció Díaz Verdugo.
AVANZA AMPLIACIÓN DE PLANTA INTERNACIONAL
La ampliación de la capacidad de tratamiento de la Planta Internacional de Tratamiento de Aguas Residuales de South Bay (a cargo del gobierno estadounidense) está en proceso.
Se espera que para diciembre de 2027 pase de mil 095 a dos 190 litros por segundo, con una expansión intermedia a mil 533 litros por segundo, para finales de agosto de 2025.