Han pasado 15 días del feminicidio de Destiny Cervantes, de 18 años, quien fue privada de la vida a las afueras de su hogar en Lomas Taurinas, sin que hasta el momento su homicida haya sido detenido. Por ello, la tarde de este 24 de mayo, sus familiares y amigos se sumaron a la protesta masiva en Palacio Municipal para extender el alcance del grito por justicia.
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“Pedirle a la fiscalía que hagan lo correspondiente, ya tienen suficiente para hacerlo y pues solamente estamos esperando eso y tratando de seguir haciendo ruido para que no quede en el olvido. Que se haga lo necesario, que las personas responsables paguen por lo que hicieron. Es todo lo que pedimos”, enfatizó su hermana, Diana Melissa Olide Guillén, durante la manifestación.
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Una joven dulce, alegre y con muchos sueños, a quien le arrebataron la oportunidad de cumplirlos. Así es como sus seres queridos recuerdan a Destiny, quien, tras graduarse, ya se encontraba trabajando para Amazon.
Fue la madrugada del 9 de mayo, alrededor de la 1:45 horas, cuando perdió la vida en la calle Benito Juárez, después de que un hombre disparara contra ella y huyera a bordo de un vehículo conducido por un cómplice.
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Fue a través de redes sociales que sus familiares responsabilizaron a su expareja como el principal sospechoso del ataque.
“Estamos tristes, todos destrozados, pero como lo digo, tenemos que estar fuertes para que se logre. Tenemos fe de que la fiscalía va a hacer lo correspondiente, que muy pronto esperamos que hagan lo que tienen que hacer, ya saben que tienen que hacer lo necesario”, recordó.
Señaló que, en busca de mayor alcance y visibilidad, se unieron a la “Carnita Asada Masiva en Contra de Marina del Pilar e Ismael Burgueño”, buscando ejercer presión sobre las autoridades, pues, ante el asesino de su hermana libre, no pueden descansar por la incertidumbre de su paradero.
“Hay miedo porque lleguen a tomar represalias. Yo temo por mi vida, porque si al quitarle la vida no le tembló la mano, pues ¿qué se espera para el resto? ¿Qué le va a importar? Si ni ella le importaba”, compartió.
Entre consignas de “¡El feminicida sigue libre!”, “¡Ni una más!” y “¡Nos falta Destiny!”, alrededor de 70 personas —hermanas, padres, tías, tíos, amigos y amigas de Destiny— se unieron para amplificar el grito, en busca de lograr que el crimen contra la joven no quede en la impunidad. Junto a ellos se solidarizaron los cientos de asistentes al evento, quienes protestaron a su lado con diversas luchas, pero con el mismo objetivo.
