El Gobierno de Estados Unidos habría aumentado su vigilancia a los cárteles del narcotráfico mexicanos, a través de aviones espías que realizaron al menos 18 misiones, durante un periodo de dos semanas, sobre la frontera con EE. UU. con México y el espacio aéreo internacional, alrededor de la península de Baja California, según informó, el 10 de febrero de 2025, la cadena estadounidense CNN.
Los vuelos se realizaron durante un periodo de 10 días, entre enero y febrero de 2025, y representaron una considerable escalada de actividad, según funcionarios de EE. UU. citados por la cadena de noticias estadounidense.
Por ejemplo, un ex oficial militar dijo a CNN que el Pentágono realizaba históricamente una sola misión de vigilancia al mes en la frontera entre EE. UU. y México, por lo general para buscar recopilar información sobre otras prioridades de seguridad.
Sin embargo, según datos recopilados por CNN, en el periodo citado, al menos 11 vuelos alrededor de Estados Unidos habían sido realizados por aviones P-8 de la Marina estadounidense. Además, el 3 de febrero de 2025, un vuelo de casi seis horas fue realizado por un avión espía U-2, uno de los aviones de reconocimiento más importante del Ejército de EE. UU.
Las rutas de vuelo cubrieron la frontera de Estados Unidos con México, con misiones en California, Arizona y Texas. Además, CNN identificó al menos una misión que dio la vuelta a la península de Baja California y pasó cerca de Sinaloa, a inicios de febrero de 2025.
La Secretaría de la Defensa Nacional (DEFENSA) confirmó, la tarde del 3 de febrero de 2025, que una aeronave de la Fuerza Aérea de Estados Unidos sobrevoló aguas internacionales, a 83 kilómetros al suroeste de Cabo San Lucas, en Baja California Sur.
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A través de su cuenta de la red social X, la institución de las Fuerzas Armadas de México detalló que a las 13:41 horas del 3 de febrero de 2025, el Centro de Control de Área Mazatlán informó al Centro Nacional de Vigilancia y Protección del Espacio Aéreo (CENAVI), que detectó un vuelo, fuera del espacio aéreo mexicano, sobre aguas internacionales.
Según registros de la plataforma digital Flight Radar 24, que se encarga de monitorear en tiempo real los vuelos, el Boeing de la Fuerza Aérea de Estados Unidos había efectuado hasta en dos ocasiones dicho recorrido.
La aeronave partió de la Base de la Fuerza Aérea Offutt, que es de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos, ubicada cerca de las localidades de Omaha y Bellevue, en el condado de Sarpy, del estado de Nebraska.
Hasta las 19:20 horas del 3 de febrero de 2025, la aeronave había recorrido desde la altura de Culiacán de Rosales y Los Mochis, en Sinaloa, así como Ciudad Obregón y Guaymas, en Sonora. Dio vuelta frente a la Reserva Especial de la Biosfera Cajón del Diablo, en territorio sinaloense, y retomó la misma ruta por la que ingresó al Golfo de California, de regreso a Estados Unidos.
La aeronave de reconocimiento altamente especializado tiene como característica, recopilar, analizar y geolocalizar señales electromagnéticas, además de proporcionar inteligencia crítica para la selección de objetivos y la prevención de amenazas.
El modelo de avión que sobrevoló en “aguas internacionales” es un Boeing RC-135V Rivet Joint, con un aeronáutico de reconocimiento, fabricado por la compañía estadounidense y que opera en la Fuerza Aérea de EE. UU.
Este avión se encarga de recoger información en vuelo dentro del área donde se encuentra desplegado, además de que tiene la capacidad de proporcionar dichos datos, casi en tiempo real, para su análisis, recopilación y difusión. Para ello, el modelo cuenta con distintas antenas y sensores instalados a lo largo del fuselaje.
Asimismo, entre sus características destaca que es capaz de reabastecerse de combustible en el aire. Con una capacidad de hasta 27 personas, incluidos los pilotos, este avión militar ha sido desplegado en guerras como la del Golfo, Irak y Afganistán, al igual que en Medio Oriente.
Según la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar, todo Estado “tiene derecho a establecer la anchura de su mar territorial hasta un límite que no exceda de 12 millas marinas medidas a partir de líneas de base determinadas de conformidad con esta Convención”.