Las autoridades de Estados Unidos arrestaron a 538 “inmigrantes ilegales” y deportaron a “cientos”, durante los primeros días que iban de la segunda Administración del presidente Donald Trump, según lo informó, la noche del 23 de enero de 2025, Karoline Leavitt, titular de la Secretaría de Prensa de la Casa Blanca.
“HOY: La Administración Trump arrestó a 538 inmigrantes ilegales criminales, incluido un presunto terrorista, cuatro miembros de la pandilla Tren de Aragua y varios ilegales condenados por delitos sexuales contra menores”, escribió la portavoz presidencial estadounidense, en su cuenta de la red social X.
“La Administración Trump también deportó a cientos de inmigrantes ilegales criminales a través de aviones militares. La mayor operación de deportación masiva de la historia ya está en marcha. Promesas hechas. Promesas cumplidas. Han comenzado los vuelos de deportación”, enfatizó Leavitt.
“El presidente Trump está enviando un mensaje fuerte y claro al mundo entero: si ingresa ilegalmente a los Estados Unidos de América, enfrentará severas consecuencias”, indicó la vocera presidencial de EE. UU., en otra publicación de X.
Además, Leavitt anexó dos fotografías de algunos migrantes, haciendo fila para subir a un Lockheed C-130 Hércules, un enorme avión de transporte táctico militar, propulsado por cuatro motores turbohélice.
Según diversos medios estadounidenses el Pentágono -sede del Departamento de Defensa de EE. UU.-, se preparaba para enviar aún más tropas a la frontera sur con México, incluidas las de élite de la división Aerotransportada 82 del Ejército.
Funcionarios estadounidenses dijeron a la agencia británica Reuters, que el Ejército se estaba preparando para enviar una segunda oleada de tropas a la frontera con México, tan pronto como la próxima semana, que probablemente incluiría tropas de la división Aerotransportada 82.
El 23 de enero de 2025, Ras Baraka, alcalde de la ciudad de Newark, Nueva Jersey, comentó, en un comunicado, que agentes del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés), “allanaron un establecimiento local deteniendo residentes indocumentados y también a ciudadanos, sin presentar una orden judicial”.
El mismo día, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo afirmó que los centros de atención a migrantes mexicanos, deportados de Estados Unidos, continuaban instalándose en los estados colindantes con la frontera con EE. UU. y esperaba que estuvieran listos durante fin de semana.