El presidente Donald Trump impondrá nuevos aranceles del 25 por ciento a México y Canadá, el sábado 1 de febrero de 2025, dijo la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, afirmando que el magnate neoyorquino se apegaría a su fecha límite, para los nuevas tarifas.
“Puedo confirmar que mañana, la fecha límite del 1 de febrero que el presidente Trump estableció con una declaración hace varias semanas, continúa”, confirmó Leavitt, durante una conferencia de prensa, llevada a cabo en la Casa Blanca.
La vocera presidencial estadounidense detalló que los aranceles ascenderían a un 25 por ciento sobre México y Canadá, así como un 10 por ciento para China “por el fentanilo ilegal que han obtenido y permitido distribuir en nuestro país, que ha matado a decenas de millones de estadounidenses”.
“Estas son promesas hechas y promesas cumplidas por el presidente”, enfatizó Leavitt, quien, sin embargo, se negó a dar más detalles respecto a los nuevos aranceles, incluyendo si los mismos se aplicarían a las importaciones de petróleo o si se incluirán exenciones adicionales.
No obstante, la portavoz de la Casa Blanca calificó como falso un reporte de la agencia de noticias británica Reuters, respecto a que la entrada en vigor de los aranceles a México y Canadá sería hasta el 1 de marzo de 2025.
“Vi ese reporte y es falso. Estuve con el presidente en la Oficina Oval y puedo confirmar que mañana, siguiendo la fecha límite que teníamos del 1 de febrero”, insistió la vocera de la Casa Blanca.
Según personas familiarizadas con el asunto, Reuters señaló que los aranceles entrarían en vigor el 1 de marzo de 2025, pero incluirán un proceso para que los países buscaran exenciones específicas para ciertas importaciones,
Más temprano, el mismo día, Justin Pierre James Trudeau, primer ministro de Canadá desde el 4 de noviembre de 2015, advirtió a los canadienses que podrían enfrentarse a tiempos difíciles por los aranceles impuestos por Trump.
“No lo endulzaré: nuestra nación podría enfrentarse a tiempos difíciles en los próximos días y semanas […] Sé que los canadienses pueden estar ansiosos y preocupados, pero quiero que sepan que el Gobierno Federal y, de hecho, todas las órdenes de Gobierno, les cubren las espaldas”, dijo el primer ministro de Canadá.
“Estamos preparados con una respuesta: una respuesta decidida, contundente pero razonable e inmediata. No es lo que queremos, pero si avanza, también actuaremos”, abundó Trudeau, en declaraciones televisadas, añadiendo que todas las opciones estaban sobre la mesa.
El mismo 31 de enero de 2025, la agencia calificadora HR Ratings advirtió que, dependiendo de las medidas y la duración en que el Gobierno de Estados Unidos aplicara aranceles a las exportaciones de México, las tarifas comerciales tendrían un impacto severo en la producción nacional, que podrían derivar en un estancamiento total de la actividad económica mexicana.
“Suponiendo que los aranceles duren todo el año, esto podría resultar en un deterioro en el crecimiento económico de México. Estimaciones preliminares suponen un nulo avance en la variación real anual para 2025, lo que contrasta con la estimación de 1.3 por ciento previa con cifras ajustadas por estacionalidad. Esta estimación preliminar considera que el sector más afectado por los aranceles sería el manufacturero, como resultado de la desaceleración en las exportaciones y por los efectos que esto tendría en el resto de la economía”, indicó HR Ratings, en un análisis.
Bajo el escenario en que se aplicaran aranceles de manera permanente a productos mexicanos, y que el Gobierno mexicano no tomara represalias, HR Ratings prevé que el primer impacto sería un aumento en los precios de los todos los productos provenientes de México que se consumen en Estados Unidos, es decir más inflación, si bien seguramente no en un 25 por ciento, porque parte del costo inicial sería absorbido por las empresas.
“Para México, este escenario se traduciría en menores exportaciones, lo cual afectaría principalmente al sector manufacturero y especialmente al sector automotriz, debido a que la principal venta de México hacia Estados Unidos es de partes y accesorios de vehículos automotores. Aproximadamente el 35 por ciento de toda la manufactura que se exporta son productos automotrices”, precisó la calificadora estadounidense.
En el mediano plazo, agregó HR Ratings, esta imposición de aranceles se traduciría en una disminución en las transacciones comerciales entre ambos socios, lo que terminaría perjudicando a los dos países. Lo anterior cobra relevancia, ya que actualmente México es el principal socio comercial de Estados Unidos, con una participación en sus importaciones del 15.4 por ciento, incluso superando a China y a Canadá.
Al considerar un escenario en que se impusieran aranceles a México solo por un par de meses, se prevé un menor impacto para ambas economías.Por último, y con la posibilidad de que se dieran aranceles de 25 por ciento a un número reducido de exportaciones mexicanas, el impacto sería todavía menor, especialmente si las tarifas se enfocaran en productos que no afectaran directamente a las cadenas de producción de ambos países.
“En el caso de Estados Unidos, el traspaso de precios al consumidor sería prácticamente nulo, a medida que los empresarios norteamericanos absorben los costos y disminuyen sus ganancias por un par de meses. Mientras que para México, las exportaciones tampoco se verían tan perjudicadas, debido a que las empresas estadounidenses no tendrían que buscar un nuevo proveedor de materiales, sino simplemente absorber el impacto de mayores precios por un par de meses”, expuso HR Ratings.
“Lo más conveniente para ambas economías sería lograr un acuerdo antes del 1 de febrero para evitar la entrada de aranceles. Lo más prudente sería unificar y fortalecer el bloque comercial de Norteamérica para maximizar la competitividad, crear cadenas de suministro eficientes y enfrentar desafíos globales de manera conjunta”, finalizó la calificadora estadounidense.
El mismo día, el banco de inversión JPMorgan estimó que el peso mexicano sufriría una caída cercana al 12 por ciento, si Estados Unidos impusiera al país aranceles comerciales del 25 por ciento. Sin embargo, destacó que esperaba que tal medida se pospusiera.
Los analistas del banco inversión estadounidense dijeron que fijar tarifas generales a México “probablemente sería percibido como una táctica de negociación temporal” del presidente Trump, “para iniciar las discusiones desde una posición de fuerza”.
JPMorgan agregó que un aplazamiento de los aranceles podría hacer que la moneda mexicana se apreciara un 2.8 por ciento, a 20.15 por dólar, desde 20.72 unidades.