Ante la amenaza de su homólogo Donald Trump, de imponer aranceles del 25 por ciento a productos mexicanos, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo afirmó, el 31 de enero de 2025, que su Gobierno tenía varios planes para responder a esa medida.
Durante su conferencia de prensa matutina, la titular del Poder Ejecutivo Federal reiteró que se debía tener “cabeza fría” para tomar esas decisiones, pero advirtió que había un “plan A, B y C”, como parte de una estrategia que, según ella, se había venido trabajado desde meses atrás.
“Siempre vamos a mantener el diálogo, es fundamental en la relación entre México y el Gobierno de los Estados Unidos y hay esta mesa de diálogo y tenemos plan A, plan B, plan C, para lo que decida el Gobierno de los Estados Unidos”, dijo la mandataria nacional.
“Pero es muy importante que sepa el pueblo de México que siempre vamos a defender la dignidad de nuestro pueblo, que siempre vamos a defender el respeto a nuestra soberanía y un diálogo como iguales, como siempre lo hemos mencionado, sin subordinación.
“Vamos a esperar, como siempre dicho, con la cabeza fría, tomando las decisiones, estamos preparados y mantenemos este diálogo”, insistió Sheinbaum Pardo.
Asimismo, la presidenta aseguró que su Administración mantenía un canal de diálogo abierto con el Gobierno estadounidense, por diversos temas de interés binacional. También comentó que había comunicación diaria, en el marco de la confianza y respeto a la soberanía.
“Voy a iniciar comentándoles que por lo que sale hoy en los medios y la declaración de ayer del presidente Trump e informarle al pueblo de México, a ustedes, que tenemos una mesa de diálogo con el Gobierno de Estados Unidos, en donde hemos tratado distintos temas y se acuerda todos los días”, indicó Sheinbaum Pardo.
“Por ejemplo, en el tema de migración con respeto a nuestra soberanía y a los derechos humanos, hay acuerdos para la repatriación de nuestros connacionales. Si es el caso de la llegada de alguna persona de otra nacionalidad, todo el tiempo hay acuerdos y hay una mesa permanente”, agregó la titular del Poder Ejecutivo Federal.
“En el tema también de la seguridad, se mantiene permanentemente comunicación en el marco de cuatro principios que son los principios fundamentales en esta materia, que es la responsabilidad compartida, la confianza mutua, la colaboración y el respeto a nuestra soberanía”, abundó la mandataria nacional.
Por su parte, Marcelo Luis Ebrard Casaubón, titular de la Secretaría de Economía (SE), afirmó que imponer aranceles a México afectaría económicamente a millones de familias en Estados Unidos, por lo que calificó las eventuales tarifas como un “error estratégico”.
Explicó que en automóviles, la aplicación de aranceles afectaría a 12 millones de familias estadounidenses, pues los consumidores pagarían un monto adicional de 10 mil 427 millones de dólares, causando presiones inflacionarias.
“Esto es lo que estimamos el impacto de un día al otro para que tengamos una percepción de por qué es un error estratégico una tarifa de 25 por ciento.. Conviene tenerlo claro. El principal impacto millones de familias en Estados Unidos, tendrán que pagar 25 por ciento más”, enfatizó el funcionario federal.
Según el titular de la SE, en automóviles, la aplicación de aranceles afectaría a 12 millones de familias de EE. UU., debido a que los consumidores pagarían un monto adicional de 10 mil 427 millones de dólares, causando presiones inflacionarias.
En computadoras mexicanas, afectarían a 40 millones de familias estadounidenses, que tendrían que pagar 7 mil 104 millones de dólares. En pantallas y televisiones, afectaría a 32 millones de familias de EE. UU. que tendrían que pagar 2 mil 397 millones de dólares adicionales.
Respecto a los refrigeradores, 5 millones de familias estadounidenses estarían afectadas. La aplicación de tarifas a estos productos representa un desembolso adicional de 817 millones de dólares. Además, los consumidores enfrentarían precios más altos en supermercados, entre ellos los de productos como frutas, verduras, carne y cerveza.
También en autos y camionetas con impacto en concesionarios y refacciones. Además de productos electrónicos y electrodomésticos, así como equipo médico. Según Ebrard Casaubón, el impacto sería mayor en estados fronterizos de EE. UU. y en entidades con “alto consumo de productos mexicanos”, como California, Texas, Florida y Arizona.
Un día antes, Édgar Amador Zamora, titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) señaló que en caso de que las finanzas públicas enfrenten eventualidades externas derivadas de aplicación de aranceles por parte de EE. UU., el Gobierno mexicano contaba con una bolsa preventiva de 100 mil millones de pesos.
El funcionario federal expresó que a pesar del discurso amenazante del presidente Trump, el Gobierno mexicano contaba con estrategias como el Plan México, para hacer frente a los choques externos. Dijo que el buen manejo de la deuda pública y el gasto al cierre de 2024 les permitió reconstituir los fondos.
El Fondo de Estabilización de Ingresos Presupuestarios (FEIP) es una bolsa de ahorro para enfrentar emergencias externas, ayudar a mantener la estabilidad económica y compensar la caída de los ingresos estimados, según explicó Amador Zamora.