Camillo Magoni nació en Morbegno, Italia, frontera con Engadina, Suiza, donde su familia comenzó a dedicarse a la vid y a la elaboración del vino desde principios de Siglo XX. Se formó en la Escuela de Viticultura y Enología de Alba, justo en la región del Nebbiolo en Piemonte, donde concluyó sus estudios en 1962. Tres años después llegó a Baja California por invitación a Angelo Cetto e inició su carrera, que le ha dado a México y al mundo vinos excepcionales.
En Tijuana formó su familia y, en el Valle de Guadalupe, en Ensenada, trabajó la tierra para cultivar el fruto. Han transcurrido más de 50 años del comienzo de una historia de dedicación, espíritu innovador y amor por la vid y el vino.
Pero la crónica de vida de don Camilo Magoni no termina aquí. Ha sido, también cónsul honorario de Italia en Tijuana. En 2007 recibió La Stella al Mérito del Lavoro en grado de Comendore, el más alto reconocimiento que su país natal otorga a sus ciudadanos, además, se ha dedicado al rescate de las misiones en esta entidad y en 2009 publicó el libro “Historia de la vid y el vino en la península de Baja California”.
Luego de una larga y muy destacada labor como enólogo de L.A. Cetto, don Camilo se comprometió con un proyecto personal: Bodegas Magoni.
La casa productora se oficializó en 2012, con el tiempo compró 115 hectáreas en el Valle de Guadalupe y en San Vicente; ahora, entre ambas, suma el cultivo de 120 tipos de uva comerciales y experimentales. El resultado: aproximadamente 20 etiquetas con distinta personalidad, cuyo primer descorche fue en 2013.
A sus 83 años, Camilo Magoni ha forjado un camino de perseverancia, creatividad y prosperidad como un hombre de familia, un investigador brillante, un enólogo ejemplar desde Italia hasta Baja California, México y el mundo. Razones sobran para nombrarlo Personaje Destacado 2024 de ZETA.