El líder de la oposición canadiense, Pierre Poilievre, declaró a medios locales que estaría dispuesto a negociar un acuerdo comercial con Estados Unidos, que excluyera a México, además de que agregó que haría lo posible por mantener la relación entre Ottawa y Washington.
“Canadá primero”, declaró el líder del Partido Conservador a medios, emulando el lema de campaña de Donald John Trump, presidente electo de EE. UU., de 78 años de edad, ex candidato del Partido Republicano y ex mandatario estadounidense, desde el 20 de enero de 2017 hasta el 20 de enero de 2021.
“Sólo me preocupa Canadá, quiero poner a nuestro país primero. Estados Unidos es responsable del 60 por ciento de nuestro comercio. Tenemos más comercio con Estados Unidos que con el resto del mundo combinado. Haré lo que sea necesario para preservar y proteger esa relación por encima de las otras”, señaló Poilievre.
El líder de la oposición canadiense podría convertirse en el primer ministro de Canadá el próximo año, ya que su partido aventaja por 20 puntos la intención de voto, contra el Partido Liberal, de Justin Pierre James Trudeau, quien ostenta dicho cargo desde el 4 de noviembre de 2015.
El mismo día, el ministro de Industria de Canadá, François-Philippe Champagne, declaró que Ottawa dejará claro a Washington que “no debería confundir la frontera mexicana con la canadiense”, ante la amenaza de aranceles del 25 por ciento anunciada por Trump.
“Somos muy conscientes que necesitamos proteger nuestra frontera. Lo estamos haciendo. Lo estamos haciendo de forma conjunta con Estados Unidos”, explicó Champagne, quien añadió que “lo más importante será defender los intereses de los trabajadores y la industria canadienses”.
Por su parte, Doug Ford, el jefe de Gobierno de Ontario, la provincia más industrial de Canadá, declaró, también el 26 de noviembre de 2024, que era un “insulto” que Trump mezclara a Canadá con México.
“Compararnos con México es lo más insultante que nunca he escuchado por parte de nuestros amigos [estadounidenses]”, declaró el jefe de Gobierno de Ontario.
El mismo día, Mao Ning, portavoz de la Cancillería china, indicó que dicho país asiático estaba dispuesto a trabajar con México para mantener la sana ecología de su cooperación económica y comercial bilateral, e impulsar el desarrollo de ambas naciones.
La vocera hizo estas declaraciones durante una rueda de prensa diaria, en la que respondió a una pregunta de medios de comunicación respecto a los recientes comentarios de la presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum Pardo, sobre las exportaciones chinas a México.
Mao expresó que la cooperación comercial de China con otros países se basaba en las normas internacionales y los principios del mercado, siendo el beneficio mutuo la esencia de dicha cooperación. También sostuvo que no sería favorable a los intereses de ninguna de las partes, politizar los asuntos económicos y comerciales.
China y México son buenos amigos que confían el uno en el otro y buenos socios que persiguen el desarrollo común, indicó Mao, señalando que las importaciones de China habían desempeñado un papel importante en el desarrollo de la industria manufacturera de México, habían mejorado la competitividad de su comercio exterior y habían aportado beneficios tangibles al pueblo mexicano.
“Mantener unas relaciones económicas y comerciales estables y saludables sirve a las expectativas comunes de ambas partes y a los intereses a largo plazo de todas las partes”, sostuvo la portavoz de la Cancillería china.