Un contenedor casi vacío que transportaba gran cantidad de pacas de cocaína marcadas con el símbolo infinito en blanco y negro, fue interceptado por un oficial de Comercio Exterior y Aduanas en Ensenada.
El cargamento, que sería propiedad del Cártel de Sinaloa y dividido en 300 paquetes con un peso aproximado a 350 kilogramos, estaba vinculado a una empresa naviera identificada por su etiquetado rosa y el logotipo ONE, como tantos que a diario transitan por el puerto.
La intervención de ese cargamento ocurrió poco antes de la medianoche del viernes 15 de noviembre en el buque Iquique Exprés, cuando agentes solicitaron apoyo de oficiales de la Segunda Región Naval, encargados de la seguridad del recinto portuario al que sólo tiene acceso personal autorizado.
Al inspeccionar el contenedor marcado con la matrícula TLLLU6022184 quedó claro que, una vez más, el recinto portuario fue escenario de un operativo de trasiego relacionado con grupos organizados a nivel internacional.
Los patios del puerto estaban abarrotados de cajas cargueras. De acuerdo con datos de la Autoridad Portuaria, hasta agosto de 2024 se había observado una dinámica compleja en el comercio internacional y la logística de Ensenada, lo cual se refleja en el flujo de mercancías. En los primeros ocho meses del año, el puerto movió un total de 283 mil contenedores.
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Según los primeros datos de la investigación de la Fiscalía General de la República (FGR), la mercancía, que provenía de Guayaquil, Ecuador, tenía como destino Ningbo, China, siguiendo una ruta comúnmente utilizada por los cárteles.
Se ha identificado que el cargamento era propiedad del Cártel de Sinaloa, el grupo armado con mayor presencia en la costa de Baja California, desde el Paralelo 28 hasta Tijuana, y que controlan parte el movimiento dentro del puerto.
La naviera ONE, que se dedica al transporte marítimo de mercancías a nivel global, se describe como una empresa que “mezcla y refina diferentes formas de pensar, culturas y habilidades” para crear soluciones óptimas en el transporte. Con presencia en los puertos de los cinco continentes, ONE asegura que afronta desafíos en colaboración con sus clientes y socios, buscando explorar el futuro del transporte marítimo en contenedores.
Como en otros casos dentro del puerto, hasta el momento no se han identificado sospechosos ni se han realizado detenciones relacionadas con este delito. La Secretaría de Marina Armada de México se encargó del traslado de la mercancía a la FGR, cuyos agentes serán los responsables de su destrucción, informó la corporación.
Este incidente no es el primero relacionado con el puerto de Ensenada. En febrero de 2024, autoridades de Ecuador informaron la detención de un cargamento de más de seis toneladas de cocaína con destino a Ensenada. El operativo, denominado Triste Amanecer, tuvo lugar en el puerto de Guayaquil, donde con la ayuda de perros entrenados, la Policía ecuatoriana localizó la droga oculta en un contenedor con polietileno de alta densidad de exportación.
EL LICO Y SINALOA, DETRÁS DEL TRÁFICO DE DROGAS EN EL PUERTO
La investigación preliminar sugiere que detrás del movimiento de droga en el puerto de Ensenada se encuentra un sujeto identificado como Ricardo Beltrán, conocido como El Lico, quien en el pasado colaboró con el grupo criminal de Jaime Daniel Gutiérrez García, apodado El Cachis y/o El Toro, ambos afines al Cártel de Sinaloa.
El 7 de enero de 2024, El Lico circulaba en una camioneta con su familia, esposa e hijo, cuando fue atacado a balazos, dejando como resultado a un menor de edad gravemente herido, quien murió momentos más tarde, al trasladarlo al hospital.
De acuerdo con las indagatorias, ese ataque fue producto de una rencilla entre El Cachis y su entonces socio El Lico en Culiacán, pero tuvo repercusiones en Tijuana, ya que en febrero, Gutiérrez fue blanco de una balacera.
Meses después, la Dirección de seguridad recibió un reporte en el que informaba la presencia de tres personas lesionadas por arma de fuego y la desaparición de un hombre identificado como Carlos Iván Luna Flores, conocido como El Gasero y/o El Tocino.
Los cuatro hombres se encontraban en el fraccionamiento Valle Dorado, propiedad de Manuel Padilla Murillo alias El Chatarras, traficante que controlaba la entrada y salida de droga y especies marinas protegidas a través del recinto portuario de Ensenada. En agosto de 2020 fue asesinado en un condominio de Ciudad de México.
Un día después, se difundió un video en el que El Gasero es obligado a leer una carta donde mencionó Minerva Pérez Castro, entonces titular de la Cámara Nacional de las Industrias Pesquera y Acuícola de Baja California (Canainpesca):
“El Cachis mandó matar al pastor Octavio Valdez, mientras que Minerva Pérez Orozco es esposa de Víctor, hermano del Toro, que es dueña de Mariscos Atenea y presidenta de Canipesca (sic) y que, con el apoyo de su cuñado, quiere controlar todo el marisco de Baja California”.
Es por eso que el asesinato de Pérez Castro está vinculado al conflicto criminal.
Previo a estos eventos violentos, varias propiedades del Cachis en Ensenada, como expendios de cerveza, restaurantes y un rancho, fueron atacadas con disparos de arma de fuego, incendios y conatos de incendio, aunque ninguno se denunció ante la Fiscalía General del Estado (FGE).
Entre los traficantes marítimos que operaban para El Lico Beltrán se encuentra Alonso Arámbula Piña, conocido como El Trébol, uno de los objetivos de la agresión armada ocurrida en mayo de 2023 en la delegación San Vicente, en Ensenada, durante el evento denominado El Cachanillazo. En esa emboscada, diez personas perdieron la vida.
EL PRECIO DE LA COCAÍNA EN EL MERCADO NACIONAL Y SU AUMENTO EN EU
El precio de la cocaína en el mercado nacional se ha estimado en millones de pesos, con un valor entre 10 mil 500 y 11 mil dólares por kilogramo en Tijuana, según informaron elementos de la Fuerza Estatal de Seguridad Ciudadana (FESC).
Sin embargo, una vez que la droga cruza a EU, su precio se dispara significativamente, alcanzando los 18 mil o 20 mil dólares por kilogramo “puesto en San Diego”, refirió un agente del área de Investigación Antidrogas.
El aumento en el valor de la droga refleja las complejas redes de tráfico y la logística detrás del comercio de sustancias ilícitas. Según fuentes consultadas, un cargamento de esas características costaría hasta 7 millones de dólares al grupo criminal encargado de la operación.
Fuentes federales revelaron a ZETA que el reciente hallazgo de cocaína es comparable con el aseguramiento de tres buques, incluido el Mol Majesty con bandera de Islas Marshall, ocurrido en 2020. En esa ocasión, marinos encontraron más de 3 kilogramos de cocaína lanzados al mar desde un portacontenedores hacia una lancha.
A tal aseguramiento le siguieron otros operativos exitosos, como la intervención de los buques NYK Lira y Happy Dover, en los cuales también se decomisaron cargamentos de droga.
A pesar de los esfuerzos para frenar el tráfico de drogas, el flujo de contenedores con sustancias ilícitas es una constante en el puerto de Ensenada. Según un oficial federal, “el trasiego no ha terminado, siguen pasando muchos contenedores a diario”, reflejo de la persistente actividad de grupos criminales que operan en la región.
