El Pleno del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de Venezuela certificó, el jueves 22 de agosto de 2024, la victoria de Nicolás Maduro Moros, luego de un peritaje formal a los resultados de los comicios presidenciales llevados a cabo el 28 de julio del mismo año.
Caryslia Beatriz Rodríguez Rodríguez, presidenta del máximo tribunal constitucional venezolano, indicó que, tras la comparecencia de los actores convocados y recolectados los instrumentos electorales, los magistrados de la Sala Electoral del Tribunal certificaron “de manera irrestricta e inequívoca” los resultados de los citados comicios.
El TSJ certificó “de forma inobjetable el material electoral peritado y convalida esta sala los resultados de la elección presidencial del 28 de julio del 2024, emitidos por el Consejo Nacional Electoral [CNE], donde resultó electo el ciudadano Nicolás Maduro Moros como presidente de la República Bolivariana de Venezuela para el período constitucional 2025-2031. Así se decide”, indicó Rodríguez Rodríguez.
La sentencia del TSJ venezolano se produjo 22 días después de que el propio Maduro Moros solicitara dicho proceso, a través de un recurso de amparo que nunca se conoció y por el que fueron convocados los diez ex candidatos presidenciales.
Rodríguez Rodríguez explicó que basó su decisión en un informe elaborado por expertos nacionales e internacionales “altamente calificados e idóneos”, cuyas identidades se desconocen, así como detalles de todo el proceso de validación, que se llevó a cabo sin presencia de representantes de la oposición mayoritaria, que denunció fraude electoral.
El Consejo Nacional Electoral de Venezuela anunció, el lunes 29 de julio de 2024, que el gobernante del país sudamericano fue reelecto para un tercer mandato de seis años, con 51 por ciento de los votos, frente a González Urrutia, con 44 por ciento de los sufragios. No obstante, la oposición sostuvo que tenía copia del 84 por ciento de las actas para demostrar un fraude.
Maduro Moros, presidente de Venezuela desde el 5 de marzo de 2013, pidió, el 31 de julio de 2024, cárcel para el candidato opositor, del partido Mesa de la Unidad Democrática, es Edmundo González Urrutia, así como para María Corina Machado Parisca, coordinadora nacional del partido Vente Venezuela.
El candidato oficialista, del Partido Socialista Unido de Venezuela, es Maduro Moros, de 61 años de edad, presidente de dicho país sudamericano, desde el 5 de marzo de 2013 y que busca su segunda reelección.
Antes, Maduro Moros fue titular del Ministerio de Relaciones Exteriores, entre 2006 y 2012, así como vicepresidente, desde 2012 al 2013, durante el Gobierno de Hugo Rafael Chávez Frías, a quien suplió como titular del Poder Ejecutivo Federal, tras fallecer.
Mientras que el candidato opositor, del partido Mesa de la Unidad Democrática, es González Urrutia, de 74 años de edad, quien fue embajador de Venezuela en Argelia, entre 1991 y 1993, durante la segunda Administración de Carlos Andrés Pérez, y, en Argentina, entre 1998 y 2002, durante los gobiernos de Hugo Rafael Chávez Frías y Chávez Frías.
González Urrutia fue elegido como candidato de la coalición opositora venezolana, tras la inhabilitación de María Corina Machado Parisca, coordinadora nacional del partido Vente Venezuela, desde 2012, quien también se desempeñó como diputada a la Asamblea Nacional de Venezuela, del 5 de enero de 2011 al 24 de marzo de 2014.
Antes de que el TSJ emitiera su fallo, González Urrutia, advirtió a través de su cuenta de la red social X, antes Twitter, que la decisión judicial “solo agravará la crisis” que vivía el país sudamericano. Además, auguró que el Tribunal favorecería al Gobierno, contrario a lo reiterado por Maduro Moros, que aseguró que dicha institución era “sólida”.
La oposición mantiene que su candidato de unidad ganó por amplio margen las presidenciales y publicó “el 83.5 por ciento de las actas electorales” para reforzar su reclamo, que fue respaldado por decenas de países y organizaciones nacionales e internacionales.
“Señores del TSJ: Ninguna sentencia sustituirá la soberanía popular. El país y el mundo conocen su parcialidad y, por ende, su incapacidad de resolver el conflicto; su decisión solo agravará la crisis. Los venezolanos no estamos dispuestos a renunciar a nuestra libertad ni a nuestro derecho a cambiar en paz para vivir mejor. #NoUsurparánLaVerdad”, escribió González Urrutia, también en X.