El presidente Andrés Manuel López Obrador calificó, el 23 de agosto de 2024, como “actos de falta de respeto a nuestra soberanía, como una declaración desafortunada e imprudente”, las declaraciones de Kenneth Lee Salazar, titular de la Embajada de Estados Unidos en México -desde el 2 de septiembre de 2021-, quien advirtió, un día antes, que la reforma al Poder Judicial de la Federación (PJF) -que envió, el 5 de febrero del mismo año, el político tabasqueño al Congreso de la Unión-, que incluyó “la elección directa de jueces”, representaría “un riesgo para el funcionamiento de la democracia y la integración de las economías”.
Durante su conferencia de prensa matutina -llevada a cabo desde el Salón Tesorería del Palacio Nacional-, el titular del Poder Ejecutivo Federal mexicano apuntó que el Gobierno de Estados Unidos aplicaba una “política injerencista” y reveló que hizo un extrañamiento, tras las declaraciones del diplomático estadounidense.
“Durante muchos años, Estados Unidos aplica una política injerencista en toda América desde que definen lo de la Doctrina Monroe, y sostienen que ‘América para los americanos’, entendiendo que América es Estados Unidos de América, no el resto del continente, desde hace mucho tiempo”, recordó el mandatario mexicano.
“Ellos decidían sobre las políticas en los países del continente, ponían, quitaban presidentes a su antojo, invadían países, creaban nuevos países, protectorados, nosotros ya lo hemos dicho y es de dominio público, fuimos invadidos dos veces de manera injusta, de forma prepotente, la primera vez fue un zarpazo que nos dejó sin la mitad de nuestro territorio, en la Guerra de Intervención”, expresó el presidente de México.
“Últimamente han habido, como tú lo señalas, actos de falta de respeto a nuestra soberanía, como esta declaración desafortunada, imprudente, del embajador Ken Salazar, pero ya se hizo una nota diplomática, un extrañamiento y desde luego sostengo lo que dio a conocer la Secretaría de Relaciones Exteriores [SRE], porque no aceptamos injerencismos, no aceptamos que ningún representante de gobiernos extranjeros intervengan en asuntos que solo nos corresponden resolver, dirimir, a los mexicanos”, afirmó López Obrador.
El reclamo fue entregado por la Cancillería mexicana, luego de que el representante diplomático estadounidense consideró que la reforma judicial que se discutía en el Congreso pondría en riesgo la democracia, la relación comercial bilateral e incluso permitir la infiltración del narcotráfico.
“La Secretaría de Relaciones Exteriores expresa su profundo extrañamiento por dicha declaración del Embajador Salazar sobre cuestiones internas y de plena soberanía nacional”, se indicó en el documento leído por el político tabasqueño.
“El Gobierno de los Estados Unidos Mexicanos se permite destacar que el objetivo principal de la iniciativa de reforma constitucional es fortalecer el Estado de Derecho mediante una reforma al Poder Judicial que se realiza a través de los procedimientos democráticos consagrados en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos”, destacó la SRE.
“El Gobierno de México está comprometido con un Poder Judicial que goce de verdadera independencia, autonomía y legitimidad, fortaleciendo así el Estado de Derecho y mejorando el acceso a la justicia para todos”, dijo la Cancillería mexicana.
“En tal virtud, la declaración del Embajador de los Estados Unidos de América expresando una postura sobre este tema, que es de carácter estrictamente interno del Estado mexicano, representa una acción inaceptable de injerencia, contraviene la soberanía de los Estados Unidos Mexicanos y no refleja el grado de respeto mutuo que caracteriza las relaciones entre nuestros gobiernos”, reclamó la SRE.