El presidente Andrés Manuel López Obrador rechazó, el 8 de agosto de 2024, la solicitud del Gobierno de Ucrania para que su homólogo de México, para detener al presidente ruso Vladímir Vladímirovich Putin, al cumplir con una orden internacional de detención, emitida por la Corte Penal Internacional (CPI), por presuntos crímenes de guerra, en que caso de que decidiera asistir a la toma de posesión de Claudia Sheinbaum Pardo, virtual presidenta de la República mexicana electa, prevista para el 1 de octubre del mismo año.
“Nosotros no podemos hacer eso, no nos corresponde [detener a Putin], nosotros estamos en contra de las guerras, estamos a favor de la paz y lo que hemos propuesto en el caso de la guerra de Rusia y Ucrania es acuerdos, que haya una intermediación”, dijo el mandatario mexicano.
“Hasta propuse en su momento que se convocara, primero, ministro de la India, [Narendra Damodardas] Modi, al papa Francisco y al secretario general de Naciones Unidas [António Manuel de Oliveira Guterres], para que establecieran comunicación, frenar la guerra y evitar que el pueblo siguiera sucediendo, tanto en Ucrania como en Rusia”, insistió el político tabasqueño.
Durante su conferencia de prensa matutina -llevada a cabo desde el Salón Tesorería del Palacio Nacional-, el titular del Poder Ejecutivo Federal mexicano justificó la invitación dirigida a Putin, tras reiterar que México convocó a los mandatarios y jefes de Estado de todos los países con los que mantenía relaciones diplomáticas.
López recordó que México rompió relaciones con Daniel Roy Gilchrist Noboa Azín -presidente de Ecuador desde el 23 de noviembre de 2023- y a Dina Ercilia Boluarte Zegarra, mandataria peruana, desde el 7 de diciembre de 2022.
“Ya lo explicó la presidenta electa, México tiene relaciones con casi todos los países del mundo. Ahora no hay relaciones con Ecuador, porque invadieron nuestra Embajada y tampoco hay buenas relaciones con el Perú. Pero en general son muy buenas las relaciones con todos los gobiernos”, señaló el político tabasqueño.
“¿Qué se hace? Se invita a todos y ya después los gobiernos van decidiendo si asisten, no asisten, así es, eso tiene que ver con la política diplomática de México”, enfatizó el titular del Poder Ejecutivo Federal mexicano.
Por su parte -durante una conferencia de prensa, llevada a cabo en su casa de transición, ubicada en la alcaldía Iztapalapa-, Claudia Sheinbaum Pardo, virtual presidenta de la República mexicana electa, detalló que la invitación a Putin se trató de una nota diplomática que el Gobierno de México envió con todos los países con los que existen relaciones diplomáticas y quienes estaban en libertad de decidir si asistían o enviaban a sus representantes.
“México tiene una visión, y además así está establecido en la Constitución, de búsqueda de la paz en todos los países. Entonces, vamos a seguir con esta política y ya vamos a ver quién confirma que vaya a venir a la toma de posesión el 1 de octubre”, respondió la ex titular de la Jefatura de Gobierno de la capital de la República.