A tres años de su arribo como cabecillas de células homicidas en el Cártel de Sinaloa en Tijuana, Franklin Ernesto y/o Eduardo Huezo Hernández alias El Ranchero ha armado y uniformado a quienes integran su sicariato con un chaleco balístico con las siglas FER, que, según ellos, significa Fuerzas Especiales del Ranchero, deducen autoridades en la Mesa de Seguridad debido a declaraciones de criminales detenidos.
“En la mayoría las balaceras ordenadas por la mafia de Sinaloa, las armas están saliendo limpias, lo que significa que las acaban de traer, son nuevas, por lo menos en el Estado. Y eso de sus fuerzas especiales ya lo hicieron antes, lo que ha llamado la atención es la cantidad de chalecos asegurados”, expuso un investigador estatal.
Las FER están atacando a operadores delictivos del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), principalmente del Cártel Arellano Félix (CAF), de manera particular, contra indecisos servidores del presuntamente recién escindido Brayan James Corona alias El Apache que controlan la venta de drogas al menudeo en colonias de las zonas Centro y Norte de Tijuana, que aún no definen si seguirán delinquiendo para el CAF o con la mafia sinaloense serán sus nuevos duelos de sus vidas y muertes.
En el afán de mostrar poder, realizan los operativos criminales a plena luz del día y en lugares públicos, por lo que la Policía Municipal de Tijuana ha capturado a varios de los responsables de las privaciones de la libertad y tiroteos de ambos lados, quienes han aportado información a las áreas de Inteligencia de la Mesa de Seguridad.
Como ejemplo de la semana, Leo, quien dijo a sus aprehensores: “Yo soy bataca del Ranchero, en el tiempo que tengo directamente no me he chingado a nadie, sólo los levanto y los entrego a otros morros, y ya ellos se encargan, van dos, uno lo levanté en Valle de las Palmas y el de aquí de Zona Centro. Mi patrón directo es El Gucci, pero hoy los policías le acaban de poner una putiza y fue el que nos puso, por eso nos agarraron, y aparte de levantar a quien me indican, pues soy tirador”.
Así lo manifestó Leonardo Martínez Rodríguez alias Cabo 23, tabasqueño de 31 años, cuando fue detenido el 28 de mayo en posesión de una bolsa con restos de sangre, armas y chalecos con la leyenda FER. Y lo reiteró al ser reaprehendido el 21 de julio, cuando finalmente quedó preso bajo proceso por posesión de arma.
Con un promedio de 5.5 homicidios al día durante julio en Tijuana, a una semana de concluir el mes, suma 137 muertes violentas y se proyecta como el más sangriento del año. Durante 2024, hasta las siete de la mañana del jueves 25 de julio, la incidencia reportó 106 muertes violentas en Mexicali; mil 085 en Tijuana; 78 en Ensenada; 64 en Tecate; 37 en Rosarito; 30 en San Quintín y 13 en San Felipe. En total, mil 413 muertes violentas en Baja California.
Más los muertos que no contabilizan en la estadística, como los restos humanos localizados el 23 de julio en dos escenas distintas, envueltos en sábanas, otros en maleta y en una caja, los fragmentos de una o varias personas fueron abandonados en Hacienda las Fuentes y en Santa María -colonias aledañas-. En este último caso, dejaron un mensaje escrito en cartulina: “Esto le va a pasar a todo aquel que trabaje con el Marcial”, criminal con operatividad en Zona Este de Tijuana y Tecate, cuyo nombre salió a relucir el 12 de junio, cuando hizo llegar la foto, vía celular, de una narcomanta a uno de los dos agentes estatales de Investigación de la Fiscalía General del Estado radicados en Tijuana que laboran en Tecate, a los que amenazó de muerte después que detuvieron a cinco presuntos sicarios al servicio del CAF.
Autoridades investigan si se trata de Marcial López Medina, identificado años atrás como parte de un grupo dedicado al tráfico de personas y drogas hacia Estados Unidos.
PRIVACIONES DE LA LIBERTAD Y SECUESTROS; CAF SE LLEVA A LOS DEL YONKE DAKOTA
El 17 de julio, a eso de las 09:30 horas, un grupo de tres hombres armados llegaron al Yonke Dakota y al lote de autos Benton Automotriz ubicados sobre Bulevar Federico Benítez y Bernardo O’Higgins de la colonia Guadalajara de Tijuana, para privar de la libertad de seis personas: dos empleados y tres cliente del yonke, así como a un trabajador del lote.
Eloy Saúl Bermúdez Madrigal, junto a otros dos sujetos a bordo de un auto Nissan gris, ingresaron a los negocios y amenazaron con sus armas a las víctimas identificadas con las iniciales RAG, AG, JG, PF, JES y BES para someterlos y quitarles celulares y carteras, robándole a uno de ellos 4 mil 800 dólares. Seguidamente los obligaron a subir en la parte trasera de un pick-up Dodge Ram doble cabina color morado, propiedad del establecimiento, el cual encendieron y enfilaron rumbo a una casa de dos pisos ubicada entre Calle 14 y el callejón García Naranjo de la colonia Libertad, identificada con el número 957, interior 2.
Los introdujeron a una habitación en la que estaban un hombre y una mujer, actualmente identificada como Brenda Byaney Reynoso Vázquez. Presuntamente son los otros dos delincuentes implicados. Éstos procedieron a atarles las manos y los pies con las cintas de sus propios zapatos, mientras uno de otro de los captores los amenazaba con asesinarlos y les cuestionaba quién de ellos era el hijo del dueño del yonke, pues aseguraba que solo él se salvaría.
Transcurridas unas horas en las que la Policía Municipal dio seguimiento a los criminales a través de cámaras de vigilancia y detuvo algunos cómplices, las seis víctimas fueron rescatadas por policías ministeriales, quienes momentos antes habían sido notificados de que agentes de la corporación municipal detuvieron a dos personas que circulaban a bordo de un auto Nissan gris sobre Calle Félix Parra de la colonia Libertad, descripción que coincidía con el vehículo en que llegaron los sujetos que privaron de la libertad a los empleados y clientes del yonke y lote automotriz, por lo que se trasladaron al lugar y montaron un operativo de búsqueda.
A través de la ventana del segundo piso, uno de los ministeriales alcanzó a ver a una de las víctimas, que se había logrado desamarrar, la cual movía las manos y pedía auxilio a gritos, indicando que eran seis personas, por lo que los oficiales ingresaron al inmueble para rescatarles, siendo asegurados en el lugar Eloy Saúl Bermúdez Madrigal, Brenda Byaney Reynoso Vázquez, Jesús Alejandro Corona Periañez, Ezequiel Anguiano García y Francisco Alfonso Gutiérrez Jacinto, vinculados a proceso por el delito de privación de la libertad agravada el 23 y 25 de julio, respectivamente.
Las áreas de Inteligencia identificaron a los victimarios detenidos como parte de una como parte de una célula del CAF. Originalmente al servicio del Apache, pero aún no saben si es de las que permaneció con la mafia de los Arellano o de los que se pasaron a Sinaloa.
ARMAS COINCIDEN CON TRES ASESINATOS Y SUSTRACCIÓN DE UN MENOR
Durante el aseguramiento del inmueble donde se hallaban las seis víctimas, se localizaron dentro de un colchón un arma tipo escopeta, dos armas largas tipo fusil, un arma corta y una Glock, ambas calibre 9 milímetros. Las dos últimas, según el dictamen de balística, coinciden con las utilizadas en un feminicidio y dos homicidios ejecutados en la misma zona, de acuerdo a lo informado por las autoridades:
* Una de las armas fue utilizada el 3 de julio a las 13:52 horas; una mujer fue asesinada a tiros mientras se encontraba en el interior de una vivienda construida con material reciclado en Avenida 76 y Calle Ceiba, Colonia Centro Urbano 70-76. La víctima quedó tendida en una habitación improvisada. No fue identificada, pero vestía blusa verde y pantalón de mezclilla azul.
* La segunda arma se usó en dos ocasiones: el 15 de julio en la colonia Libertad, donde criminales llegaron a un domicilio buscando a un hombre, pero no se lo pudieron llevar, entonces le dispararon y asesinaron al padre de su objetivo, llevándose además al hijo menor de 4 años, de su supuesto deudor. El niño estuvo privado de la libertad por un rato, porque minutos después, los criminales decidieron abandonarlo en una gasolinera donde la Policía Municipal lo localizó. De esta escena se robaron un auto, mismo que llevaron al siguiente asesinato cometido el 17 de julio, cuando dispararon en contra de un hombre y una mujer.
VICTIMARIOS DEL CÁRTEL SINALOA USAN APLICACIÓN ZELLO
La tarde del 14 de julio, en un domicilio en Calle Espadaña y Privada Ónix del fraccionamiento Villa del Sol en La Presa, fueron rescatadas dos víctimas de privación de la libertad por la Policía Municipal y cinco presuntos victimarios fueron detenidos.
De inicio, el área de Inteligencia ubicó a los criminales en el Cártel de Sinaloa.
“Venía con La Morena cuando miramos la unidad de la Policía Municipal, así que nos paniqueamos y corrimos para la casa, llegaron y tocaron, en eso unos empezaron a correr por atrás y fue que valió verga, empezamos a correr también”, explicó Miguel Ángel Obregón Santacruz, uno de los jóvenes capturados. “Fue cuando se nos salieron los batos que tenían ahí amarrados, yo chambeo como tirador para El Cristian, ese es mi jale, tirar en los topes sobre la calle Espadaña, esa casa es como una oficina que utilizamos todos para drogarnos y recoger el jale. De ahí mismo sacaron un fierro (pistola) que estaba ahí, a lo que sé, es que somos del Cártel de Sinaloa, yo salí ayer de la pinta dure 48 horas por delitos contra la salud me dejaron salir y me regresé para de nuevo chambear cuando llegaron los placas”.
Del modus operandi habló su cómplice Alberto Josué Becerra Pérez: “Tengo cuatro meses chambeando para el Cristian, no lo conozco y nunca lo he mirado, solamente nos habla por teléfono y nos arriman el jale, ahí donde nos agarraron donde estaban los batos amarrados, mi jale es como tirador y como bataca (pistoleros), pero aún no he pegado, el fierro (pistola) que teníamos es el que encontraron en el cantón (…) desde el día martes -9 de julio, cinco días antes de ser detenidos-, llevaron a estos morros yo me encargaba de darles de comer el Cristian aún no decía que es lo que iba hacer con ellos (…) el día que llegaron los morros, sé que los abordaron porque estaban en la birria bien sospechosos con una mariconera y que cuando los reviso la Morena con su bato, traían globos -eran competidores- azules y una pistola de plástico por eso es que los arrimaron para el cantón”.
Los narcomenudistas informaron que se comunican con su jefe criminal a través de la aplicación Zello -que emula walkie-talkies push-to-talk a través de redes de telefonía celular. De sus sueldos como vendedores de droga mencionaron: “Me pagan 150 pesos por tanda que vendo”.
De la experiencia, las víctimas detallaron : “… nos metieron nos amarraron y nos estuvieron golpeando, así con el puño y a patadas, ya hasta el día de hoy que salieron corriendo porque llegaron gritando que venía la Policía fue que nos pudimos salir como pudimos para pedirle ayuda a los oficiales, únicamente nos daban de comer las sobras que ellos dejaban, y nos llevaba al baño bien a la fuerza, nos teníamos que hacer del baño ahí sentados donde nos tenían, escuchaba más gente pero ya nos miramos, porque nos tenían tapados y amarrados”.
De acuerdo a la Ley, se cataloga como secuestro “… al que prive de la libertad a otro con el propósito de obtener rescate, algún beneficio económico, causar daño o perjuicio a la persona privada de la libertad o a cualquiera otra” y se penaliza “de cuarenta a sesenta años de prisión y de mil a tres mil días multa”.
Sin embargo, por mejorar sus estadísticas y reducir la incidencia de secuestros, cuando un criminal o matón es detenido después de llevarse por la fuerza y a punto de pistola a otro presunto delincuente, sea para torturarlo o matarlos “causarle daño” o cobrar una deuda de drogas o extorsión, “obtener un beneficio económico”, la Fiscalía General del Estado usualmente lo procesa por el delito de privación de la libertad, cuya sanción es “de uno a tres años de prisión y de cien a quinientos días multa”, con el beneficio de regresar a la calle porque tienen la posibilidad de ser judicializado en libertad.
FRAKLIN HUEZO ARMA A LAS FER
Ubicado en el organigrama criminal bajacaliforniano a través de un narcomensaje desde el 7 de septiembre de 2021, los primeros delincuentes a su servicio como operador de Cártel de Sinaloa en la célula de los hermanos Arzate datan de mayo de 2022. Era gente traída de otros estados para hacer una limpia contra el CJNG.
Públicamente, el primer reporte de un criminal a su servicio detenido en posesión de un chaleco balístico con la leyenda FER se hizo el 3 de julio de 2022 a Brayan Salvador Ramírez Solís alias El 5, identificado como vocero y operador principal del Ranchero, por delitos contra la salud.
Otro chaleco similar y un rifle, fueron asegurados por la Policía Municipal a una pareja el 31 de diciembre, lo mismo le decomisaron a Rafael N el 6 de enero, ambos casos en Tijuana.
Apenas el 23 de julio, la delegación de la Fiscalía General de la República (FGR) anunció la vinculación a proceso de dos adultos y tres menores de edad “detenidos con arsenal”, cinco carabinas y dos rifles y seis chalecos antibalas con logo de las FER.
Se trata de Alberto Granados y Uriel Maltos -quienes rechazaron los cargos-, capturados por la Policía Municipal el 12 de julio junto con Carlos y Kevin, de 17 años, y Antonio, de 16, en un domicilio de Calle Rubén Amaya, Colonia Lázaro Cárdenas de la delegación Playas de Tijuana.
Ante el juez se reservaron, pero antes, uno de ellos expuso: “Yo trabajo para el CDS, para El Ranchero, tengo una semana chambeando, me pagan 500”.
Se les había quedado tirada “… la CVR que no entraba el cambio, por eso es que fui, les estaba haciendo el paro cuando el más morrillo de 15 me dijo que me metiera rápido a la casa, me dijo ‘agáchate’ y ya estábamos agachados cuando en eso entraron los policías, a los demás no los conozco, no sabía lo que había en la casa hasta que entré y miré las armas, fui nada más a hacerles el paro porque de ese morro yo conozco su mamá, y en veces como me presta feria o me tira 200-300 pesos y globos de cristal, por eso fui a ayudarlo”, negó Granados.
“Me habló El Roy -en Facebook sale como Roy Contreras-, es un bato alto, delgado, de unos 25 a 28 años, con el cabello rojo y de un lado azul, me dijo que mi trabajo iba a ser cuidar la casa, ahí en la casa estaban los aparatos, me iban a pagar 500 pesos por día, llegué y ya estaban ahí estos morros, yo no jalo con ellos, pero por el dinero fue que me animé a cuidar la casa, por eso estaba ahí, a estos morros no los conozco, y es todo lo que voy a decir”, aseguró Maltos.
Uno de los menores dijo que lo había contratado para limpiar la casa y le iban a pagar mil 500 pesos. Otro de los adolescentes manifestó vivir en Rosarito, que su mamá necesitaba dinero porque está enferma del corazón, y su amigo Kevin lo invitó a cuidar la casa, por lo que les pagarían 2 mil pesos por noche.
REINCIDENTE LIBERADO, CABO 23 DEL CDS
Antes de eso, la Policía Municipal de Tijuana había detenido el 28 de mayo al ya mencionado Leonardo Martínez Rodríguez en la Zona Centro, junto con Ángel Torres García, José González de la Cruz y Bryan Armando Contreras Espinoza, de Tecate
“Sobre recorrido se observa un masculino con un chaleco balístico puesto y manipulando una bolsa negra de basura, y al observar la unidad se mete rápidamente a una propiedad con la bolsa en las manos, por lo que se le da seguimiento”.
La bolsa tenía restos y sangre y sus cómplices también portaban chalecos de las FER.
Tras reconocerse como gente del Ranchero, Cabo 23 dijo: “La sangre que está ahí es de un bato que se llama Oscar y lo único que le hicimos es ponerle unos putazos y lo hicimos porque estaba muy insistente preguntando por los puntos dónde se vende droga y pensamos que era contra por ello lo jalamos y lo madreamos, pero el bato ahí anda en la zona se la lleva por las maquinitas los chalecos nos lo dio el patrón”.
Torres manifestó: “Yo sólo estaba en mi cuarto fumando marihuana cuando llegaron los policías a romper la puerta y me sacaron, yo solo conozco a uno y a los otros dos que traían los chalecos”.
“Yo tengo poco trabajando para el ranchero, mi jale es de tirador tengo unos días que salí de la pinta me metieron por secuestro y un arma, pero sólo duré un día, a mí me dijeron que me quedara en esas cuarterías porque no tengo donde vivir”, expuso González.
Estos sujetos fueron evidentemente liberados porque Cabo 23 fue reaprehendido nuevamente el 21 de julio, la Municipal reportó “dos personas del sexo masculino abordo de una motocicleta quienes realizaban detonaciones a un grupo de personas” en la Zona Centro de Tijuana eran de nuevo Leonardo Martínez Rodríguez y Jorge Díaz, este último con antecedentes de narcomenudeo y reportado como víctima apenas el 3 de julio en la misma zona; le dieron un balazo en el tobillo.
“Tengo tres semanas trabajando para el señor Ranchero, ya antes trabajaba con él, pero en Tecate, pero se calentó el terreno y me tuve que abrir, así que caí acá al Centro, el motivo por el cual fuimos a pegar fue porque el lunes sentaron a un morro que trabajaba con nosotros, la raza del Arcángel, y pues así es esto”, reveló uno de ellos.
“…no nos metemos con Gobierno, el pedo es únicamente entre nosotros, a ustedes los respetamos, así como queremos que nos respeten”, aclaró el otro.
