¿Cómo se dice puerta en inglés?
Door.
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¿Y al que las vende, cómo se le dice en inglés?
Vende-door.
¿Y al que las compra?
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Compra-door.
¿Y al que le abrió las puertas del narco a México?
Obra-door.
***
Le pregunta Andrés Manuel López Obrador a Pepito:
— ¿Así que tú eres el de los cuentos?
— No señor, yo soy el de los chistes… el de los cuentos es usted.
Autor: mejor así lo dejamos.
En familia
Una mujer regañando a su hijo le dice:
— ¡¡Eres tan vago y tan sinvergüenza como tu padre!!
El marido que escucha aquello le dice a su esposa:
— ¡¡Oye, yo no soy vago ni sinvergüenza!!
La mujer le responde:
— Tú tranquilo… no estoy hablando de ti.
Autor: Anónimo, a propósito del Día del Padre.
Futuro yerno
El novio a su prometida:
— Me parece que a tu madre no le caigo bien.
— ¿Por qué?
— Porque me dijo que soy medio tonto.
— No te preocupes, eso es porque te conoce a medias.
Autor: Novio confundido.
Borrachos mexicanos
Un borracho le dice a su amigo después de la parranda:
— Compadre, ahora vámonos a encontrar un poco de romance.
Y el otro le pregunta:
— ¿Todavía traes dinero?
Y el borracho le contesta:
— Ay ¿¿¿a poco me vas a cobrar???
***
Van dos mexicanos ebrios de noche por la playa y le dice uno al otro:
— Mira compadre, la luna está llena.
Y dice el otro:
— ¿De qué?
***
Un mexicano le dice a un argentino:
— ¡En México somos todos machos!
El argentino le dijo:
— En Argentina somos machos y hembras y no sabes lo bien que la pasamos.
Autor: Un ché.
Número equivocado
— Oye, no sabes… el otro día llamé al número 1383474575391023040501928374757328123498123401234153423448357
029834750922176987610293497826340526945284375692873645102340
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87087698657656907698763.
— ¿Y qué te salió?
— Un callo en el dedo.
Autor: Un empleado de Telnor.
Adivinanza entre locos
— ¿A que no adivinas que tengo en la mano escondida a mi espalda?
— ¡Un autobús!
— ¡¡¡No se vale, amigo!!! ¡¡¡Viste!!!
Autor: Un psiquiatra.
La mula y el perro
Un señor va por el campo con su mula y su perro. La mula, muy cargada, no puede más y se para, hincando las rodillas en tierra, a punto de desplomarse. El hombre, cada vez más molesto e impaciente, comienza a azotar con una vara al pobre animal, hasta que la mula voltea y le dice:
— Antonio, ¿así me tratas después de todos estos años en los que te he ayudado fielmente, sin flaquear ni una sola vez hasta hoy, que estoy ya cansada y vieja?
El hombre se asusta y sale corriendo con el perro a su lado. Se detienen casi medio kilómetro más lejos, apoyándose en un árbol mientras intentan recuperar el aliento.
— ¡Híjole! —dice el perro—, ¡maldito susto nos metió la mula cuando se puso a hablar!
Autor: Un gato hablador.
Nerviosos
En el metro un tipo le dice al que está a su lado:
— Oiga, las uñas no se muerden.
— ¿Y a usted que le importa? Le responde el otro.
— Hombre, me importa porque… ¡me está mordiendo las mías!
Autor: Un terapista.
Justicia
Un ladrón roba una joyería. Lo arrestan, lo acusan, va a juicio y el juez dice:
— ¿Por qué lo niega si hay cuatro personas que lo vieron?
— ¿Y qué? Y yo puedo traer a miles que no me vieron.
***
Un juez le pregunta al ladrón:
— Usted, ¿por qué le robó el reloj a la señora?
— Yo no robé ningún reloj. Ella me lo dio.
El juez pregunta extrañado:
— ¿En qué momento ella le dio el reloj?
— En el momento que le mostré la pistola.
Autor: Un abogado.
Entrometida
Estaban dos niños, cada uno con un trompo y uno le dice a otro:
— Baila el trompo.
Y el otro le contesta:
— No sabo.
— ¡No se dice “no sabo”! ¡Se dice “no sepo”!
En ese momento una señora estaba escuchando la conversación de los niños y les dice:
— No se dice ni “no sabo” ni “no sepo”.
Los niños le preguntan:
— Entonces, ¿cómo se dice?
La señora les contesta:
— No sé.
Y los niños le dicen:
— Entonces, ¿por qué se mete en la conversación?
Autor: Un padre de familia.
