Las ciudadanas Aime Gómez e Irma Garrido, quienes atravesaron la pérdida de su hijo y un intento de asesinato, respectivamente, acudieron esta mañana al Cuartel General de la Segunda Zona Militar para solicitar ayuda al presidente Andrés Manuel López Obrador; sin embargo, no detuvo su camioneta.
El 23 de noviembre de 2022, Joshua Manuel Castro Gómez, quién trabajaba como auxiliar de recorrido para la empresa Seprobaja, fue asesinado por dos impactos de bala después del asalto al camión de valores dónde se encontraba; sin embargo, a casi un año del suceso, no se ha procedido con la investigación, explicó Aime Gómez, madre de la víctima.
“Que se de cuenta el presidente Andrés Manuel López Obrador, que aquí en Tijuana no hay avances en evitar la falta de apoyo en expedientes de cualquier tipo, no lo hay, yo le vengo a entregar al presidente el expediente de mi hijo para que el vea y corrobore que realmente no hay ningún apoyo, no hay líneas de investigación, no hay nada hacía nosotros”, comentó.
Asimismo, solicitó la ayuda de la empresa donde laboraba su hijo para esclarecer el asesinato de su hijo, ya que desde entonces no se ha pronunciado al respecto.
“No hay apoyo de las autoridades hacía nosotros, no creo ser la única, que ha perdido un ser amado y que no ha hecho nada”, agregó.
Por otro lado, Irma Garrido, directora de la fundación Reactiva Tijuana, señaló que desde el comienzo de la organización en trabajar sobre temas de migración ha recibido múltiples amenazas de muerte.
Relató que, en abril de 2021 sufrió un atentado donde estuvo 10 horas amarrada, además de ser golpeada y torturada, ante el cuál levantó una denuncia; a pesar de ello, ha sido empapelada, por lo que no se le ha dado seguimiento.
Además de ello, señaló que el 8 de febrero del 2022, después de una conferencia en Canaco, llegó un camión, presuntamente perteneciente al albergue Jardín de las Mariposas manifestándose, mientras pronunciaban “Muerte a Irma Garrido”; por lo que, levantó una denuncia por tentativa de feminicidio y desaparición forzada.
Ante esta continua situación acudió para pedir protección al presidente. Sin embargo; ninguna de las dos manifestantes logró ser escuchada, pues al finalizar la mañanera ofrecida por el presidente de México, salió en una camioneta blanca saludando a los manifestantes, pero sin detenerse.